sábado, 30 de novembro de 2013

Sem Terra celebram 20 anos da produção coletiva em Itapeva


Por Magnólia Fagundes

Tudo começou há 20 anos, quando em 1993 o MST criou a Cooperativa de Produção Vó
Aparecida (Copava), em Itapeva, sudoeste de São Paulo.
Na época, a iniciativa visava criar o processo de organização do Sistema de
Cooperativas dos Assentados (SCA), dando início a várias cooperativas. E a
Copava é um desses resultados.
A produção da cooperativa está voltada principalmente à produção de grãos,
derivados da cana, hortaliças, frutas e a pecuária.

Atualmente são 50 associados que se organizam de forma totalmente coletiva.
Todas as famílias estão inseridas em alguma das diversas frentes de trabalho da
cooperativa, que vai desde a gestão a produção.
Ao longo dessas duas décadas, a cooperativa sempre manteve presente discussão e
debates para melhorias da sua atuação. Diversas parcerias foram sendo
construídas ao longo do tempo, o que possibilitou melhorias na renda coletiva.
“Todas essas conquistas são fruto da nossa luta. Nós estamos organizados desde
1984, estamos em marcha desde 1997 e por isso temos conquistas. As conquistas
são frutos da nossa luta e não dos decretos dos órgãos”, disse Sebastião Aranha,
presidente da Cooperativa dos Assentados e Pequenos Agricultores da Região de
Itapeva (Coapri).

Leia mais:
Encontro celebra os 27 anos das escolas do MST no Espírito Santo
Assentados entregam arroz orgânico às escolas municipais de São Paulo

O estudante de agronomia do MST, Renato Ramos - nascido no assentamento há 27
anos e membro do setor administrativo da cooperativa -, explica a organização da
Copava, responsável em beneficiar, diretamente, 140 pessoas.
"A divisão de tarefas se dá em setores: administração, padaria, horta,
máquinas/agricultura, pecuária leiteira, suinocultura, bar e serviços gerais.
Assim, é possível agregar todos os sócios, sobretudo a juventude".
Seminário
Como parte da comemoração dos seus 20 anos, a Copava promoveu o Seminário
Estadual sobre cooperação no dia 19 de novembro, quando estiveram presentes as
famílias assentadas da região e de outras partes do estado e dirigentes do setor
de produção do MST.
O seminário visou debater a questão da cooperação com a finalidade de
potencializar os demais assentamentos. No debate, os participantes reconheceram
que é preciso criar novas experiências de cooperação com base nos exemplos que
deram certo, como a Copava.
O representante da Secretaria de Meio Ambiente do município de Itaberá, Valter
Rodrigo, também esteve presente, ao reafirmar o compromisso para executar
projetos de recuperação do meio ambiente.

In
MST
http://www.mst.org.br/node/15486
27/11/2013

Formas de lucha social

Sobre la forma superior de lucha

Raúl Zibechi

Cuando la vida social y política se enfrenta a encrucijadas de caminos, se
multiplican los debates, se suceden foros, encuentros y reuniones que buscan
dilucidar hacia dónde conducir los movimientos. Colombia está viviendo un
periodo de este tipo, donde se abren infinidad de espacios propicios para el
intercambio, la escucha y el aprendizaje.
La pasada semana se realizó un encuentro sobre la unidad de la izquierda
convocado por los periódicos Le Monde Diplomatique y Desdeabajo, otro que fue
organizado por la Universidad de Bogotá para debatir las resistencias sociales
en América Latina en relación con el proceso de paz, y además se realizó una
gran marcha contra la violencia hacia las mujeres. Escenarios bien distintos,
por cierto, por los que transitaron desde mujeres y feministas hasta académicos,
dirigentes políticos y un buen puñado de jóvenes.
En uno de los encuentros el economista Héctor-León Moncayo mencionó la ácida
ironía que vive la izquierda colombiana: En los 70 a los que impulsábamos la
lucha de calles nos decían que había una forma superior de lucha a la que nos
debíamos incorporar, en referencia a la lucha armada. Ahora nos dicen, y esa es
la ironía, que la forma superior de lucha son las elecciones. Ciertamente, el
eje de los debates actuales gira en torno de candidatos, siglas, alianzas y
programas para atraer la voluntad popular hacia las urnas.
Argumentos similares hemos escuchado en otros países. Por ejemplo en Argentina,
donde se viene debatiendo la necesidad de hacer política, insinuando que el
trabajo territorial de base es insuficiente para cambiar el mundo porque es
demasiado local y se debe participar en elecciones para potenciar ese trabajo de
base. Esto lo dicen, por cierto, quienes no abandonaron las bases sino que
encuentran enormes dificultades para sostener esos espacios.
Sobre el tema de las formas superiores o más avanzadas de lucha, sería oportuno
mencionar cuatro aspectos.
El primero es que sostener que existen formas superiores, como sostuvimos en la
década de 1960 y 1970, es tanto como afirmar que otras son inferiores, lo que
tiene dos consecuencias que no son positivas. Por un lado, quienes se encuadran
en las primeras tienen más autoridad para determinar lo que es correcto y
adecuado y lo que no lo es, sencillamente por estar en la esfera superior. Por
otro, tiende a homogeneizar los modos de hacer, lo que suele empobrecer el
combate antisistémico.
La diversidad de formas de acción suele tener algunas ventajas. Quizá la más
notable es que permite que sectores muy amplios de la sociedad se involucren en
movilizaciones aunque no participen en movimientos, algo que suelen hacer sólo
los militantes más o menos convencidos y conscientes. En paralelo, los diversos
sujetos que integran el campo antisistémico (mujeres, jóvenes, gentes del color
de la tierra, entre otros), suelen sentirse cómodos actuando de maneras
diferentes a las que lo hacen otros sujetos. Quiero decir que la diversidad de
formas de lucha facilita la incorporación de actores con sus propias
características distintivas, sin que se sientan forzados a subordinarse a una
forma hegemónica de acción.La segunda cuestión se relaciona con los objetivos a
largo plazo. En las décadas de los 60 y 70 quienes optaban por la lucha armada
pretendían tomar el aparato estatal y destruir el capitalismo para construir una
nueva sociedad. Quienes optaban por las elecciones buscaban modificar el sistema
por dentro, gradualmente, y muchas veces tendían a insertarse sin más en el
mismo. Sin embargo, esta determinista división entre reforma y revolución no
resiste el análisis. Hay organizaciones que apelaron a las armas para ser
reconocidas por el Estado y opciones electorales que realmente pretendieron
cambiar el mundo.
En tercer lugar, buena parte del debate actual gira en torno de la conveniencia
o no de participar en las elecciones. En este punto se registra un doble
argumentación: estratégica o de largo plazo, y táctica o sobre lo más adecuado
para fortalecer aquí y ahora el campo popular. Ante los límites que plantea la
profundización del trabajo territorial urbano, en el que están empeñados desde
piqueteros hasta sin techo y los más nuevos colectivos como el Movimiento Passe
Livre de Brasil, aparece la tentación de volcarse al terreno electoral para
conseguir fuerza adicional. Este argumento no debe subestimarse cuando lo
esgrimen militantes comprometidos con su realidad.
En Chile este mismo debate enfrenta a los protagonistas de las grandes protestas
estudiantiles. Los secundarios agrupados en la Asamblea Coordinadora de
Estudiantes Secundarios y otros muchos colectivos rechazaron la participación
electoral, mientras el Movimiento de Pobladores en Lucha y otros colectivos
apoyaron candidatos a la presidencia. Más allá de los resultados, la mitad de la
población prefirió no ir a las urnas, pero no sería oportuno acusar a quienes
tomaron esa opción de falta de conciencia política.
Por último, un nuevo enfoque modifica radicalmente el debate sobre las formas de
lucha. No es lo mismo elegir modos de acción para cambiar este mundo, que para
construir uno nuevo. En este caso, participar en las instituciones –ya sea a
través de las elecciones o de cualquier otro mecanismo– sólo tendría sentido si
pudiera servir para neutralizaar una ofensiva de los poderosos destinada a
destruir lo que se está construyendo. La opción armada es necesaria para
defender ese mundo otro, pero no para construirlo.
Si de hacer un mundo nuevo se trata, los modos de hacer se multiplican, con
especial énfasis en la producción y la reproducción de la vida, que suceden
tanto en la tierra y la fábrica como en el hogar. Este camino emprendido por
muchos movimientos en nuestro continente coloca el debate en un lugar
completamente nuevo: la reproducción, antes considerada tarea de mujeres, y los
trabajos colectivos, empiezan a tener un lugar relevante y se incorporan al
acervo de las formas de lucha.

In
La Jornada
http://www.jornada.unam.mx/2013/11/29/index.php?section=opinion&article=023a1pol
29/11/2013

sexta-feira, 29 de novembro de 2013

Asamblea en solidaridad con los trabajadores de ABC Formas y Sistemas

1era asamblea en solidaridad con los trabajadores de ABC Formas y Sistemas

Escrito por Prensa Lucha de Clases

El pasado sábado 23 de noviembre fue llevada a cabo, en las
instalaciones de la empresa de artes gráficas ABC Formas y Sistemas, una
asamblea en solidaridad con la lucha de mas de 11 meses de los trabajadores y
trabajadoras, y para la petición a la ministra del trabajo, María Cristina
Iglesias, por la resolución definitiva, que autorice a los trabajadores a
dirigir la empresa por ellos mismos, de acuerdo al artículo 149 de la nueva
LOTT.
Es importante recordar que los trabajadores y trabajadoras, se encuentran a la
espera del Ministerio del Trabajo, para que desde esta instancia se del el
cumplimiento del artículo 149 de la LOTT, donde se establece la formación de una
Junta Interventora, que administre la empresa y reanude la faena laboral. Para
que de esta forma se retomen los salarios, que permitan llevar los ingresos
económicos para las mas de 30 familias, que por más de 11 meses se han visto
perjudicadas por el cierre ilegal y fraudulento cometido por los herederos del
fallecido dueño de la imprenta, luego de su muerte.
Esta asamblea contó con la participación de diferentes colectivos, consejos de
trabajadores y organizaciones políticas entre las que podemos mencionar: Marea
Socialista, Corriente Cruz Villegas del PCV, Socialismo Revolucionario,
Movimiento Nacional por el Control Obrero, Barrio TV, entre otras, así como con
Lucha de Clases.
Los distintos asistentes a la asamblea acordaron realizar actividades en
solidaridad con la digna lucha de los trabajadores, tales como Movilizaciones
hacia la Asamblea Nacional y Ministerio del Trabajo, recolección de firmas y
otras futuras asambleas con participación de más organizaciones. De igual forma
se estableció entre las organizaciones presentes, la importancia de la unidad de
la clase trabajadora, y en especial de las organizaciones políticas de
izquierda, históricamente dispersas en Venezuela, de tal forma que se pueda
trabajar en conjunto para construir la unidad. De esta forma se propuso la
realización de una asamblea nacional, con los sindicatos de base y demás
organizaciones de la clase trabajadora.
Así mismo los trabajadores le hicieron un llamado a la ministra María Cristina
Iglesias, a que se avoque a la firma de la Resolución de acuerdo al artículo 149
de la LOTT, y al presidente Nicolás Maduro a que en esta ofensiva contra la
Guerra Económica, se defienda a estos trabajadores, que siguen siendo pisoteados
por la burguesía y por la burocracia del Ministerio. De esta forma hagamos
cumplir el legado del presidente Hugo Chávez contenido en la LOTT, y que la
consigna “Fabrica cerrada, fabrica puesta en manos de los trabajadores”, no se
quede solamente en un “slogan” publicitario.
Hagámos cumplir el legado de Chávez contenido en la LOTT
Fábrica parada, fábrica tomada

In
http://www.luchadeclases.org.ve/venezuela/lucha-obrera/7603-asamblea-solidaridad-trabajadores-abc
27/11/2013

quinta-feira, 28 de novembro de 2013

Ganância, impunidade e pobreza sustenta escravidão


Ganância, impunidade e pobreza sustenta escravidão, diz especialista


Da IHU On-Line

A possível aprovação do Projeto de Lei 432/2013, que regulará a PEC57A,
conhecida como a PEC do trabalho escravo, prevista para quarta-feira, tem gerado
polêmica entre as entidades que defendem a Proposta de Emenda à Constituição. De
acordo com o jornalista Leonardo Sakamoto, há um equívoco no PL 432/2013, de
autoria do senador Romero Jucá (PMDB-RR).

“Segundo tal proposta, o confisco de terras se daria simplesmente por conta de
parte dos elementos que constituem o trabalho escravo, ou seja, cerceamento de
liberdade e trabalho forçado. Mas a proposta ignoraria outros elementos que
estão previstos na definição de trabalho escravo no Brasil: a dignidade do
trabalhador, as condições degradantes de trabalho e a jornada exaustiva”,
explica, em entrevista concedida à IHU On-Line por telefone.

Sakamoto esclarece que “a bancada ruralista nunca gostou do conceito de trabalho
escravo, especialmente no que se refere à questão da dignidade do trabalhador.
Uma vez mudando a regulamentação para este PL, a bancada irá utilizar esse
conceito aprovado para a regulamentação como justificativa para mudar o conceito
geral do trabalho escravo no Brasil. Por isso ela é preocupante: pelo que causa
num primeiro momento e pelo que pode vir a causar em um segundo momento”. E
acrescenta: “A grande discussão é como fazer a aprovação da regulamentação sem
voltar atrás nesse conceito, utilizando um conceito que já está previsto na
legislação”.

Leonardo Sakamoto é jornalista graduado pela Universidade de São Paulo - USP,
onde também realizou mestrado e doutorado em Ciência Política. É coordenador da
ONG Repórter Brasil e representante na Comissão Nacional para a Erradicação do
Trabalho Escravo - Conatrae. Também escreveu Trabalho escravo no Brasil do
Século XXI (Brasília: Organização Internacional do Trabalho, 2006).

Em que medida a aprovação do Projeto de Lei do Senado (PLS 432/2013) regularia a
PEC57A?

A ideia do projeto é regulamentar a PEC57A/99. A maioria das emendas
constitucionais precisa de um projeto e de um regulamento que digam como ela vai
funcionar. Então, um projeto de lei já era previsto, porque sem PL a PEC não
funciona. O problema não é a regulamentação existir, o problema é o jeito como
ela foi estruturada. Tal estruturação pode gerar um retrocesso no combate ao
trabalho escravo.

A discussão é referente ao jeito como o senador Romero Jucá – que ficou como
relator da comissão mista formada para discutir a regulamentação da proposta da
emenda constitucional 57A/99 – colocou a discussão. Segundo tal proposta, o
confisco de terras se daria simplesmente por conta de parte dos elementos que
constituem o trabalho escravo, ou seja, cerceamento de liberdade e trabalho
forçado.
Mas a proposta ignora outros elementos que estão previstos na definição de
trabalho escravo no Brasil: a dignidade do trabalhador, as condições degradantes
de trabalho e a jornada exaustiva. Então, não só a Comissão Pastoral da Terra -
CPT, mas a Confederação Nacional dos Trabalhadores na Agricultura - CONTAG e
outras dezenas de Instituições e entidades da sociedade civil estão apontando
que, do jeito que a proposta de regulamentação está, considera apenas os
elementos ligados à liberdade do trabalhador e ignora os elementos relacionados
à dignidade. Portanto, a PEC pela qual se lutou tanto desde 1995 poderá ser um
grande retrocesso.

Como o PL redefine o conceito de trabalho escravo previsto no Código Penal?

A regulamentação, para efeito dessa lei, considera metade do artigo 149 do
Código Penal, que define o que é trabalho escravo. O artigo 149 do Código Penal
define trabalho escravo a partir de quatro elementos definidores. A
regulamentação proposta pelo senador Romero Jucá considera apenas os dois
primeiros elementos e ignora os outros dois. Isso muda a concepção para trabalho
escravo no Brasil? Não, não muda. O que muda é o preceito da PEC.

A bancada ruralista nunca gostou do conceito de trabalho escravo, especialmente
no que se refere à questão da dignidade do trabalhador. Então, uma vez mudando a
regulamentação para este PL, a bancada irá utilizar esse conceito aprovado para
a regulamentação como justificativa para mudar o conceito geral do trabalho
escravo no Brasil. Por isso ela é preocupante: pelo que causa num primeiro
momento, e pelo que pode vir a causar em um segundo momento.

Esta PEC57A está tramitando no Congresso há quase 15 anos. Que mudanças foram
feitas na proposta desde então?

Em 1995, a PEC foi apresentada no Senado pelo Deputado Paulo Rocha. Aí o projeto
tramitou na Câmara, mas sem muito sucesso, até que foi proposto um projeto muito
semelhante no Senado. Esse projeto tramitou e foi aprovado em dois turnos no
Senado na década passada, então voltou para a Câmera dos Deputados para que
fosse votado em dois turnos e aprovado. Contudo, o texto ficou parado.

Em 28 de janeiro de 2004 ocorreu o que ficou conhecido como a chacina de Unaí,
quando quatro funcionários do Ministério do Trabalho e Emprego foram mortos em
uma fiscalização de rotina no Noroeste de Minas Gerais. O caso de Unaí, que teve
repercussão nacional e internacional, serviu para forçar o trâmite da PEC.

Leia também:
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Então, ela foi aprovada, na Câmera, em primeiro turno, e sofreu uma modificação.
Antes, era previsto apenas o confisco dos imóveis rurais e sua destinação para
reforma agrária, entretanto, foi acrescentada a destinação de imóveis urbanos
para programas de moradia popular. De agosto de 2004, quando foi aprovada, até
maio de 2012, a PEC ficou transitando na Câmara.
Em 2012 finalmente foi aprovada em segundo turno na Câmara e voltou para o
Senado. Nesse retorno ao Senado, ficou combinado que seria criada uma comissão
mista para discutir um projeto de regulamentação da PEC para que, no momento em
que ela fosse aprovada, tivesse um projeto para regulamentá-la.

Os ruralistas começaram a fazer jogo de palavras, começaram a falar que tinha
sido combinado discutir o conceito de trabalho escravo, o que não é verdade.
Também queriam aprovar a regulamentação antes de aprovar a PEC, o que
tecnicamente é impossível, porque não se pode regulamentar algo que não existe.
Então, foi criado o PL da regulamentação, o qual está previsto para ser votado
no Senado Federal juntamente com a PEC do trabalho escravo, na próxima
quarta-feira.

Tentou-se, na semana passada, no Senado, colocar a votação da regulamentação
antes da PEC. Muitos senadores se insurgiram, acharam isso um absurdo e,
portanto, a regulamentação será votada depois da PEC.
O ponto é que muitos senadores já propuseram emendas à proposta de
regulamentação; tem mais de 50 emendas à proposta de regulamentação. Inclusive o
governo federal, junto com sua base, já tem uma proposta de emenda substitutiva
total, que substituiria a sugestão do Romero Jucá por outra regulamentação que
inclua todos os elementos caracterizadores de trabalho escravo.
A grande discussão é como fazer a aprovação da regulamentação sem voltar atrás
nesse conceito, utilizando um conceito que já está previsto na legislação.

Que razões favorecem a continuidade do trabalho escravo no país? O que
caracteriza o trabalho escravo contemporâneo? Quem são os atores envolvidos
nesta prática?

A manutenção do trabalho escravo é consequência de um tripé: ganância,
impunidade e pobreza. O trabalho escravo não é decorrência da maldade do coração
humano, mas é decorrência de um cálculo econômico de cortar custos visando ao
aumento da competitividade.
A impunidade é outro fator que contribui, uma vez que há certeza de que as
pessoas podem usar trabalho escravo e raramente irão para a cadeia. A pobreza, a
falta de oportunidades, a má qualidade de vida faz com que as pessoas acabem
caindo na rede de gatos, fazendeiros, empresários, que, no intuito de cortar
custos, acabam utilizando essa forma de exploração.

O trabalho escravo, gosto de fazer esta analogia, não é uma doença, mas é um
sintoma, é um indicador de que algo não está bem, ou seja, de que há um modelo
de desenvolvimento extremamente excludente, concentrador.
Para combatê-lo é preciso fazer a reforma agrária, gerar empregos, melhorar a
qualidade de vida das pessoas, atuar na melhoria da situação dos trabalhadores
em geral, atuar na formação dos trabalhadores, no desenvolvimento social, punir
efetivamente, aprovar leis que ajudem na punição das pessoas que utilizam o
trabalho escravo.
O Brasil é uma referência para o Conselho de Direitos Humanos da ONU, é uma
referência para a Organização Internacional do Trabalho, para outros países no
que tange ao combate ao trabalho escravo, mas ainda temos muito a avançar nesta
questão.

Quais são as principais rotas de aliciamento de trabalhadores no Brasil? Há
dados de em quais estados esta atividade é mais recorrente?

Existem rotas internas de Norte a Sul, de Leste a Oeste. O estado que tem o
maior aliciamento de trabalhadores escravizados é o Maranhão, o segundo Estado
com o pior Índice de Desenvolvimento Humano - IDH do Brasil, e com péssimos
índices de renda.
Em contrapartida, o principal estado que utiliza mão de obra escrava é o Pará,
mas nos últimos tempos São Paulo também está despontando como grande mediador de
trabalho escravo, justamente pelo aumento de fiscalizações urbanas no Pará e no
Maranhão.
Há muito trabalho escravo na pecuária, nas siderúrgicas, e em São Paulo tem
trabalho escravo em oficinas de costura, que costuram para grandes marcas, e na
construção civil. Tem uma série de rotas, mas o que importa é que as pessoas
aliciadas saem de áreas pobres para áreas que estão entrando em expansão.

Qual a relevância da Lista Suja do trabalho escravo, atualizada pelo Ministério
do Trabalho e Emprego e pela Secretaria de Direitos Humanos da Presidência da
República?

Hoje ela é um dos principais instrumentos brasileiros de combate ao trabalho
escravo. Ela foi criada em 2003 e traz o nome dos empregadores flagrados como
reutilizando mão de obra escrava, e que tiveram direito de se defender em
primeira e em segunda instância administrativa.
Então, a Lista Suja é um instrumento de transparência importantíssimo, que tem
servido aos trabalhadores do Brasil, mas também ao sistema econômico
empresarial, porque os empresários acabam utilizando a lista - apesar do
Ministério do Trabalho não obrigar - no sentido de se precaver, de fazer
gerenciamento de risco, de evitar parcerias com empresas que utilizam trabalho
escravo.

A Lista Suja é reconhecida internacionalmente como um grande instrumento de
combate ao trabalho escravo, e no Brasil ela acabou ajudando muitos
trabalhadores, porque ao cortar produtores que se utilizam desse tipo de
exploração, você está forçando não apenas aquele produtor a se adequar, mas
também todos os produtores que trabalham em volta a seguir a lei e a adotar
critérios responsáveis, como o trato com seus funcionários.

A Cosan, quando entrou na lista, caiu mais de 5% na Bolsa de Valores de São
Paulo. A MRV, que é uma grande construtora, quando entrou na lista, também caiu
na Bolsa de Valores, porque o mercado está se precavendo. Bancos públicos
federais também não emprestam dinheiro para quem está na lista.

Deseja acrescentar algo?

É importante as pessoas acompanharem a atuação dos senadores. As pessoas
esquecem em quem votam. É importante que os cidadãos enviem e-mails para os
senadores cobrando que a PEC do trabalho escravo seja aprovada, que a
regulamentação seja aprovada sem extorsão. Essas ações podem ter um retorno
positivo e isso ajudará muito nesse processo de aprovação da PEC57A.

In
http://www.mst.org.br/node/15436
12/11/2013

quarta-feira, 27 de novembro de 2013

El sueño de la Revolución de Octubre


96º aniversario de la revolución socialista de 1917
El sueño de la Revolución de Octubre


Juan Andrade
Mundo Obrero


Cuando en 2002 Eric Hobsbawn publicó su autobiografía a la edad de 85 años hubo
quienes se extrañaron al leer que el gran historiador británico se refería a la
Revolución de Octubre como “un sueño que todavía vive en mí”. Que ese sueño
sobreviviera en la conciencia de una persona longeva bien conocedora de la
contemporaneidad, que apenas tenía tres meses cuando se produjo la toma del
Palacio de Invierno, da fe de la onda expansiva de un acontecimiento que dio
forma a las aspiraciones políticas y personales de varias generaciones a lo
largo de sus vidas. La Revolución Rusa es por eso y por mucho más el
acontecimiento más importante del Siglo XX, un golpe de timón que cambió el
curso de la historia instituyendo una nueva temporalidad. La grandeza de
semejante acontecimiento radica en su originalidad y en sus repercusiones.

La originalidad es manifiesta. La revolución de Octubre trajo consigo la
construcción del primer Estado Obrero de la historia. En sus contenidos la
revolución dinamitó la piedra angular del modelo civilizatorio imperante, la
propiedad privada, y durante un tiempo desplegó a través de los soviets la
democracia más intensa hasta entonces conocida. El sujeto de semejante cambio lo
conformó una alianza de sectores subalternos entre los que se encontraban
campesinos depauperados, intelligentsia desclasada y soldados rasos a punto de
convertirse en carne de cañón, al frente de los cuales estuvo el proletariado
industrial políticamente organizado. Aunque sus procedimientos entroncaron con
la tradición jacobina y la experiencia insurreccional de la Comuna de París los
bolcheviques introdujeron novedades fundamentales que evitaron el destino de
esas experiencias de emancipación: la derrota inmediata que siguió a la
conquista del poder. Entre esas novedades estaba la alianza tejida con el
campesinado a partir de una lectura ajustada de sus anhelos, la apropiación del
vigor de algunas reivindicaciones nacionalistas y la puesta a punto de un
instrumento centralizado y formado por cuadros entregados a la causa en cuerpo y
alma: un instrumento llamado partido que supo sortear el aparato represivo de la
dictadura zarista, frenar a la reacción en medio del caos revolucionario y
constituirse en el embrión del nuevo Estado cuando el viejo Leviatán se vino
abajo.

La Revolución fue, como la calificó Antonio Gramsci, una revolución contra El
Capital, una revolución socialista que no aconteció en el epicentro del
capitalismo occidental, sino en una de sus periferias más vastas y
subdesarrolladas. Que fuera allí lo explica en parte la teoría que el arquitecto
de la revolución, Lenin, elaboró precisamente para incentivarla, en uno de los
mejores ejemplos de la performatividad del pensamiento revolucionario, que crea
con su inspiración el mundo que enuncia. En la teoría del eslabón más débil
Lenin planteaba que las cadenas del capitalismo no se romperían allí donde el
desarrollo material había narcotizado con sus concesiones a una parte de la
clase obrera y cooptado para la gestión a su vanguardia política y sindical,
sino en los países de la periferia donde a la rabia por la explotación económica
se le podría sumar la rebeldía frente a la dominación extranjera. La conclusión
de que en su fase de desarrollo imperialista el capitalismo canalizaba la
competitividad intranacional hacia afuera, lanzando a los países a confrontar
militarmente por la apropiación de recursos y la apertura de mercados, fue vista
por Lenin como una oportunidad para apelar al malestar de los comunes y
convertir esa guerra de intereses económicos entre Estados en una guerra
nacional entre clases.

La Revolución de Octubre rompió la lógica de los tiempos y quebró los esquemas
interpretativos y propositivos de la Segunda Internacional. Los bolcheviques no
se resignaron a esa concepción del tiempo lineal, progresiva y teleológica que
exigía pasar previamente por un largo estadio de desarrollo liberal burgués para
construir más tarde el socialismo. Tampoco se sometieron a la tiranía de las
condiciones objetivas, ni anduvieron a la espera de que el desarrollo mecánico
de las fuerzas productivas les diera luz verde para la subversión. Los
bolcheviques supieron leer las condiciones materiales como condiciones de
posibilidad, acelerando a voluntad el tiempo histórico y dilatando los límites
de la realidad por medio de la acción subjetiva. La acción política de los
bolcheviques se movió entre la urgencia y el sentido de la oportunidad, entre su
negativa a concebir el socialismo como advenimiento fatal y el olfato que les
llevó a lanzarse a la toma del poder justo en el momento en el que poder estuvo
al alcance de sus manos y cuando realmente hubo un empuje popular autónomo que
pudiera elevarles a esa posición. Para conservarlo en condiciones de tanta
pobreza y ante la brutal ofensiva blanca, de dentro y fuera del país, tuvieron
que recurrir también a la política del terror, con la brutalidad que supone para
quien la sufre y la degeneración que entraña para quien la ejecuta. De ese
subdesarrollo, de ese terror, de la frustración de la expansión de la revolución
por Europa y sobre todo de la reacción termidoriana del estalinismo surgieron no
pocos engendros y también algunos de los límites que varias décadas después la
colapsarían.

Si esta fue su originalidad, las repercusiones fueron tremendas. De esta
revolución surgió la URSS, una potencia que irrumpió en el ámbito de las
relaciones internacionales para disputar la hegemonía a las potencias
capitalistas. Pero además de la amenaza externa, la Revolución de Octubre
penetró en el interior de esas grandes potencias a través del caballo de Troya
de los partidos comunistas. La Revolución Rusa, más que rusa, fue concebida como
el detonante de una revolución mundial, que, si bien se vio frustrada
inicialmente y no tuvo replica en occidente, desató varias oleadas
revolucionarias tras las cuales un tercio del mundo estuvo regido por sistemas
políticos inspirados en ella. La Revolución Rusa supuso una sacudida universal
en las conciencias de los trabajadores que desató sus esperanzas y les dio una
seguridad que estuvo en la base de los grandes cambios que promovieron durante
medio siglo. Igualmente azuzó el miedo de los de arriba, que para hacerla frente
en muchos sitios tuvieron que echar mano del fascismo. También la derrota del
fascismo en la Segunda Guerra Mundial hubiera sido impensable sin la entrada en
combate de los hijos de la revolución.

De todo aquello todavía puede sacarse mucho para dar impulso a una política
emancipadora, por lo menos la fuerza de una memoria irreverente que, como nos
recuerda Slavoj Zizek, resulta inasimilable para cualquier propuesta progresista
conciliadora. De aquellos revolucionarios cabe rescatar la voluntad obstinada de
impulsar un proceso de transformación radical y la supeditación de toda práctica
a esa finalidad: la idea de la revolución como horizonte y su afirmación como
principio regulativo de la práctica cotidiana, incluso en los momentos donde
obviamente no resulta posible. También la necesidad de modificar los análisis y
las estrategias a las condiciones siempre cambiantes de la realidad. También la
consideración de que la acción política sólo es revolucionaria cuando forma
parte de las aspiraciones del movimiento real de los comunes. También la
importancia de la lealtad a las propuestas programáticas, aunque eso tenga como
coste asumir ignominias como en Brest Litovsk.

En cualquier caso la Revolución de Octubre ofrece algunas respuestas - pero
sobre todo mantiene abierto el interrogante - a la cuestión central que atañe a
cualquier movimiento que se pretenda revolucionario: cómo procurar la conquista
del poder por parte de los de abajo y cómo hacerlo sin reproducir con ello la
propia lógica del poder. Mientras respondemos a ese interrogante no viene mal
vivir el sueño de la Revolución de Octubre.



Juan Andrade es miembro de la Sección de Historia de la FIM y profesor en la
Universidad de Extremadura.

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In:
http://rebelion.org/noticia.php?id=177389
27/11/2013

domingo, 24 de novembro de 2013

Fábrica estatal venezuelama sob controle dos trabalhadores


INVEVAL: VENEZUELAN STATE FACTORY UNDER WORKER’S CONTROL
Candido Giraldez VIEITEZ1
Neusa Maria DAL RI2

A Inveval é uma empresa do ramo metal-mecânico que fabrica
grandes válvulas utilizadas principalmente pela indústria petrolífera.
Está situada em Carrizal, Estado Miranda, na Venezuela.

Em 2008, quando realizamos uma pesquisa in loco, a empresa contava
com 62 trabalhadores, configurando-se, portanto, como uma planta de
porte médio.

Hoje em dia aInveval – Indústria Venezolana Endógena de Válvulasé
uma fabrica do Estado venezuelano que se encontra sob controle dos
trabalhadores. Porém, antes de ser nacionalizada bajo control obrero foi
uma fábrica recuperada.

Inveval foi mais um dos eventos do fenômeno social de
recuperação de empresas pelos trabalhadores que vem ocorrendo em
diversos países, nas últimas três décadas, principalmente como reação
às políticas predatórias do capitalismo neoliberal. No entanto, neste caso,
a esse vetor determinante mais geral, sobrepôs-se um condicionante
especificamente venezuelano, ou seja, a revolução bolivariana e os
concomitantes esforços da burguesia para detê-la.

Em 2003, diante da desativação da fábrica pelo proprietário num
contexto nacional de enfrentamento entre governo e burguesia, e
internacional de precarização neoliberal do mercado de trabalho, os
operários partiram para a recuperação.
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1 Docente da Univ. Estadual Paulista, Programa de Pós-graduação em Educação,

Faculdade de Filosofia e Ciências, Campus de Marília - vieitez@ubinet.com.br

2 Docente da Univ. Estadual Paulista, Programa de Pós-graduação em Educação,
Faculdade de Filosofia e Ciências, Campus de Marília - neusamdr@terra.com.br
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No processo de recuperação, o percurso percorrido pela Inveval
até a estatização sob controle dos trabalhadores encontra-se ligado às
vicissitudes da revolução bolivariana em curso, embora fatores políticos
que desbordam o âmbito do Estado-nação também estejam presentes.

Neste texto procuraremos evidenciar a ação dos trabalhadores da
Inveval para realizar uma transfiguração das relações de produção
capitalistas na e a partir da fábrica.

Essa transfiguração, ainda incipiente e experimental, prefigura a
associação geral dos trabalhadores e apresenta dois momentos
diferenciáveis: o da constituição do trabalho associado nas unidades de
produção e a unificação universal das unidades de trabalho segundo o
princípio de produtores associados.

1. ALUTAPELARECUPERAÇÃODAFÁBRICA
Um dos eventos mais dramáticos do choque recorrente entre o
governo Chávez e a burguesia venezuelana foi o a sabotagem industrial
acintosa que o empresariado realizou entre dezembro de 2002 e janeiro
de 2003 (ABN, 2009). O alvo primordial do lookout foi a indústria
petrolífera, porém, com desdobramentos sobre outros setores da
sociedade. Os trabalhadores daConstructora Nacional de Válvulas (CNV)

– a atual Inveval -, Rolando e Ramón (2008) rememoram os fatos.
Em 2002 devido à paralisação petroleira, o proprietário, Andrés Sosa,
que aderiu ao boicote, mandou fechar a empresa. Fomos todos para
a rua esperando que terminasse o boicote para começar a trabalhar.
O conflito começou com o dono porque queríamos começar a trabalhar
e ele começou a romper as relações de trabalho. Ele queria lidar com
a empresa de um modo que não queríamos. Era muito por baixo de
nossos direitos. Queria liquidar a empresa. Em virtude disto entramos
com um recurso de amparo na Inspetoria do Trabalho. E aí começou
a organização para como solucionar a dívida. E pedíamos os nossos

direitos trabalhistas.

Como vem ocorrendo até hoje na maioria dos eventos de
recuperação de empresas, os trabalhadores da CNV não estavam
originariamente imbuídos de qualquer espírito revolucionário.
Simplesmente temiam pela perda iminente dos postos de trabalho frente
a um mercado laboral precarizado, além de reclamarem seus direitos
trabalhistas usurpados pelo patronato.


Depois de 2003, quando terminou o boicote patronal o governo criou
um escritório [...] que se chamou A Conciliação. Esse escritório,
composto por vários deputados da Assembléia Nacional, chamava
os patrões e os trabalhadores. Muitos empresários conciliaram. Mas,
Sosa não. Ele se fechou totalmente para os trabalhadores. A
intransigência desta empresa foi o que levou a que estejamos aqui. A
teimosia do empresário se converteu na nossa vitória. Mas, não
estávamos querendo a expropriação. Nós não sabíamos nada de

política (AGUILAR; MONTILLA, 2008).

A posição do sindicato do ramo nos eventos da Inveval, embora
não seja a norma geral nos processos envolvendo a recuperação de
empresas, é bastante freqüente. Existia um sindicato da categoria.
Contudo, este não apoiou a luta dos trabalhadores. Em vez disso, tratou
de dividi-los acenando com acordos de migalhas, negadores de seus
direitos (AGUILAR; MONTILLA, 2008). Essa posição foi coerente com o
fato de que a respectiva central desse sindicato tinha apoiado o blackout
petrolífero. De resto, tudo indica que mesmo antes dos eventos ligados à
recuperação, o sindicato primou pela ausência na fábrica de válvulas.
“Nem no tempo da cooperativa havia sindicato aqui. Não tínhamos essafigura de operário e patrão”. (YAÑEZ; VELLORIN, 2008)

A experiência histórica da recuperação mostra que, como de fato
ocorreu na Inveval, um coletivo de trabalhadores pode começar uma luta
a partir de uma perspectiva simplesmente econômico-corporativa. Porém,
mostra também que se o conflito não se resolve e a luta se estende no
tempo, os trabalhadores podem perfeitamente passar para uma
perspectiva do enfrentamento mais política e classista.

A partir daí [do impasse] a nossa luta não foi tanto por direitos, mas
mais política. Foi quando se começou a ver as possibilidades de um
decreto de utilidade pública. E na medida em que fomos por aí
conformamos um Grupo chamado de Comité de lucha. O Comitê fazia

o trabalho na rua. Íamos de dois em dois, repartíamos o trabalho.
Um grupo ia aos meios de comunicação, outro ia falar com os
deputados, outro ia ao Ministro do Trabalho (AGUILAR;MONTILLA,
2008).
2. ARECUPERAÇÃO NA FORMA DE CO-GESTÃOCOOPERATIVA-ESTADO
A posição do governo da Venezuela quanto à organização e
atividade autônoma dos trabalhadores não é muito clara ou firme até os
dias de hoje. Não obstante, é inegável que são inúmeras as ações pró
trabalho que vêm sendo promovidas pelo governo no processo da
denominada revolución. Num certo momento, o governo acreditou que as
cooperativas de trabalhadores poderiam ser uma via importante no
caminho rumo ao socialismo del siglo veintiuno, consigna que acabou sendo
erigida em seu estandarte político.

O governo criou o programa de formação laboral Misión Vuelvan
Caras, que contemplava uma dimensão especificamente educacional. Este
componente educacional não era, porém, restrito à idéia de cooperação,
e possivelmente menos ainda à idéia de cooperativismo. Esta
característica da Vuelvan Caras não só ofereceu a idéia de organização
cooperativa aos trabalhadores da Inveval, como também alargou seus
horizontes em relação a muitas outras questões da vida política e social.
Observemos o relato de Aguilar e Montilla (2008):

A empresa estava fechada. Paralelamente a essa luta toda pedimos
uma formação. Eles [o governo] nos atenderam, e reservaram um
espaço para que pudéssemos estudar. O tema foi o cooperativismo
em suas quatro fases. E também sócio-político. Foram vários cursos.
No sócio-político, no meu conceito, foi uma espécie de janela que se
foi abrindo porque na medida em que ia recebendo as lições de sócio
político foi se aclarando muita coisa. Foi a luz que se foi apresentando
no caminho. Vários professores críticos. Quando pedimos esses
professores em contato com o governo eles vieram. Estudamos
também os revolucionários nacionais.

As declarações do governo acenavam com a possibilidade de
nacionalização da empresa. Contudo, os fatos mostraram que, embora o
governo afirmasse o apoio aos trabalhadores, as vias para se obter
concretamente esse apoio eram labirínticas e dificultosas. Os membros do
coletivo de trabalhadores da fábrica de válvulas, até então isolados e
dispersos em seus postos de trabalho, organizaram-se e foram à luta visando
obter a nacionalização ou o que eles denominavam de “empresa de
utilidade pública” (AGUILLAR; MONTILLA, 2008). Esta luta foi
conduzida em dois planos: o legal, envolvendo a instância jurídica, e o do
movimento social propriamente dito, com manifestos, marchas, encontros
com os políticos ligados ao governo, protestos e tantos outros atos.

Dada a demora dos trâmites legais e o fato de que o proprietário
estava retirando equipamento da fábrica, os trabalhadores resolveram
tomar a entrada da empresa onde permaneceram acampados por cerca
de dois anos.

Nesse ínterim, nos anos de 2003 e 2004, a sobrevivência do coletivo
processou-se segundo um padrão social muito semelhante ao vivenciado
pelos trabalhadores da fábrica Zanón, em Neuquén, Argentina, quando
esses também estavam lutando para recuperar a empresa (VIEITEZ; DAL
RI, 2009). Membros da comunidade e organizações populares, sobretudo,
estabeleceram com os trabalhadores uma aliança tácita que suportou
material e politicamente o movimento. “Vieram várias pessoas que
apoiaram. Vivemos de pedir para as pessoas que ajudaram bastante. As
cooperativas ajudaram, os estudantes, os conselhos vicinais, gente dos
sindicatos” (AGUILAR; MONTILLA, 2008).

Por fim, a fábrica foi assumida pelo Estado com ressarcimento ao
proprietário. Em dezembro de 2005 o governo entregou as chaves da
planta aos trabalhadores. A esta altura dos acontecimentos, os
trabalhadores já tinham constituído uma cooperativa e o governo
concedeu-lhe um empréstimo de 6 mil milhões de bolívares para financiar
a recuperação da planta.

Previamente à entrega da fábrica aos trabalhadores, o governo e a
Cooperativa selaram um acordo por meio do qual se instituía a
propriedade mista e um regime administrativo de co-gestão. Em princípio,
a fábrica seria administrada por uma Junta Directiva formada por dois
representantes do governo e três representantes da cooperativa. O
interesse dos representantes do governo na gestão da fábrica, na visão
dos entrevistados, parece ter sido parcimonioso. “Nunca vieram aqui.
As reuniões se faziam lá em Caracas. A única pessoa do governo que
vinha por aqui de vez em quando era um engenheiro” (AGUILAR;
MONTILLA, 2008). Foi também estabelecida uma assessoria técnica para
a fábrica que, em princípio, deveria ser exercida por um técnico da
petroleira PDVSA – Petróleos de Venezuela.

Os três representantes dos trabalhadores eram dependentes da
Assembléia Geral da cooperativa que compreendia todos os trabalhadores
da fabrica, de sorte que, de fato, a gestão da fábrica ficou nucleada pela
assembléia geral.

A centralidade da assembléia geral na administração da fábrica
não é casual. Isto se prende ao fato de que já no regime de co-gestão
cooperativa-Estado, os trabalhadores da Inveval apresentavam uma
propensão a realizarem uma gestão de tipo horizontal ou horizontalizada,

o que comentaremos mais à frente. Concomitantemente, no outro pólo do
poder, o dos representantes do governo na Junta Directiva, ao
permanecerem numa posição de certo distanciamento em relação à
fábrica, moveram-se aparentemente numa direção inversa daquela de
outras fábricas, como por exemplo, na Sanitários Maracay e na Invepal
(VIEITEZ; DAL RI, 2009), quando os quadros ou funcionários do governo
trataram de abocanhar o maior poder possível ou, então, atribuí-lo aos
empresários privados.

O relativo pouco interesse dos quadros do governo na Inveval
pode estar relacionado com o fato de que esta fábrica nunca pôde
funcionar plenamente desde que fora recuperada, situação que se
mantinha ainda em janeiro de 2008, quando ali pesquisamos. Os
problemas principais eram os seguintes. A Inveval para produzir
válvulas dependia de uma empresa de fundição que permanecera sob
controle privado e que a boicotava. Por outro lado, a estatal PDVSA, a
principal consumidora dos produtos da Inveval, mostrava-se reticente
no estabelecimento dos acordos que poderiam ser decisivos para a
retomada da produção. O resultado desta situação foi que a fábrica, no
começo de 2008, ainda estava limitada a trabalhos de reparação e a
produzir válvulas em pequena escala, com base na matéria prima
insuficiente obtida de uma segunda fundição.

Os pontos de estrangulamento funcionais eram claros e simples.
No entanto, a PDVSA, um gigante estatal que aparentemente deveria
jogar no mesmo time da fábrica em co-gestão, tergiversava3 . Por seu lado,

o governo diretamente implicado na gestão da empresa tampouco tomava
qualquer iniciativa para resolver ou encaminhar a solução para os
problemas, deixando que os mesmos se arrastassem.
Essa situação pode ser tomada como um revelador dos dilemas
em que está mergulhada a revolução bolivariana.

Os trabalhadores da Inveval, como já o indicavam as controvertidas
negociações iniciais com o governo a respeito de como se estruturaria o
poder na fábrica4, estavam tornando-se mais influentes no movimento
operário (MOP). Estavam convencidos de que quaisquer que fossem os
arranjos entre governo e trabalhadores para a gestão das fábricas, estes
deveriam conservar um lugar protagonista mediante autonomia relativa e
autogoverno democrático. Portanto, dada a luta política em curso e o modo

3 - No momento em que pesquisávamos na fábrica encontrava-se ali presente um
técnico da PDVSA. Segundo declaração algo irônica dos trabalhadores, esse técnico
estaria ali para apurar o que seria necessário para que a fábrica retomasse plenamente
suas atividades.

4 - A primeira proposta da co-gestão apresentada pelo governo estipulava que os
dirigentes seriam indicados pelo governo, o que foi rechaçado pelos trabalhadores.
como o assunto Inveval estava sendo conduzido pelas diversas instâncias
estatais envolvidas, podemos supor que para certas forças influentes no
governo talvez fosse melhor que a Inveval não prosperasse como empresa,
e menos ainda como força política exemplar.

3. DA CO-GESTÃO COOPERATIVA-ESTADO À CONDIÇÃO DE FÁBRICA ESTATAL BAJO
CONTROLOBRERO
Os trabalhadores da Inveval evoluíram de uma situação de amorfia
e despolitização, como é usual que se encontrem os trabalhadores nas
empresas capitalistas, para a de um coletivo politizado, militante,
favorável à revolução bolivariana e adepto do control obrero.

As determinantes que conduziram a essa metamorfose, ao menos
as mais visíveis, são as seguintes.

No plano macro-social temos a influência seminal da revolução
bolivariana. Esta incide sobre os trabalhadores antes de mais nada como
acontecimento geral, como a atmosfera social na qual se encontram
imersos hoje os cidadãos venezuelanos. Entretanto, para os trabalhadores
da Inveval a revolução se lhes apresentou de um modo muito mais
concreto, inclusive não desejado. Isto ocorreu, como vimos, por meio do
lockout anti-chavista perpetrado pelo empregador, subseqüentemente
seguido do seu intento de remodelar completamente a fábrica em termos
dos preceitos neoliberais. O lockout deixou os operários
momentaneamente sem trabalho e salários, e a remodelação dos contratos
de trabalho os conduziria à ruína da precarização laboral.

Num plano mais circunstanciado, sobrelevam como causas da
referida metamorfose o movimento encetado e as alianças feitas com os
setores populares. O movimento fez com que os trabalhadores não só
adentrassem à luta de classes, bem como que isto se tornasse para eles
um acontecimento muito real, dolorosamente vivido dia a dia, mantendo-
os, inclusive como indivíduos, à beira da falência pessoal e familiar, em
primeiro lugar pela aguda escassez dos meios de sobrevivência.
Concomitantemente, as várias facetas da luta - marchas, proclamações,
panfletos, audiências - habilitaram prontamente o coletivo ao exercício
de funções políticas, organizativas e intelectuais que sua situação de
origem como trabalhador coletivo da fábrica capitalista lhe negava.

A aliança de facto com os setores populares da comunidade foi
vital para a sobrevivência material dos trabalhadores. Anteriormente
estabelecemos um paralelo com os sucessos de Zanón. Cabe outro
paralelo com Zanón, ou seja, a aliança com os setores populares da
comunidade também possibilitou ao coletivo da Inveval a ampliação de
suas relações sociais, o alargamento de seus horizontes organizacionais
e políticos. Além disso, esse relacionamento agregou à dimensão
intelectual e política elementos de compromisso e identificação, ou seja,
de ordem afetiva e moral com outros setores populares, o que contribuiu
para projetar os trabalhadores por sobre a fronteira de sua posição
econômico-corporativa originária.

Por fim, uma forte influência na práxis dos trabalhadores da Inveval
foi a chegada à fábrica de militantes da Corrente Marxista Internacional.
Eis como Aguillar e Montilha (2008) viram esse acontecimento.

Em 2003, Miguel, um senhor espanhol, a poucos meses de estar na
Venezuela, veio aqui como militante internacional. Ele se interessou
pelo caso da Inveval. Ele nota que se estão apresentando obstáculos
muito fortes em nossa luta pela empresa. Começa a enviar
comunicações para sindicatos internacionais, e eles respondem e
transforma o caso da Inveval em caso internacional. Começou assim.
Depois vem Carlos, vem Pablo e começaram a nos visitar. Nunca
trabalharam aqui na empresa, mas dão apoio político. Pablo é
uruguaio e dá assessoria jurídica. Não é trabalhador. Dá assessoria.
Nos ajudaram a fazer os regulamentos internos, os estatutos. Fizemos
um trabalho político orientados pela Corriente Marxista Internacional.
Nos trouxeram a literatura de Gramsci. Discutimos a literatura de
Marx, o que são os quadros políticos. Quando nos entregaram a
empresa, começamos um trabalho político com outras empresas.
Deu resultado porque em outras empresas passaram a funcionar os
conselhos de fábrica.

A Corrente Marxista Internacional (CMI) congrega-se em torno do
Jornal O Militante5 . Esta corrente reivindica-se herdeira intelectual e
política de Marx, Engels, Lênin e Trotski, dentre outros. Duas
características teórico-programáticas que lhe são próprias e que cabe
ressaltar aqui são: a ação desdobrada em plano internacional; e a
convicção de que o autogoverno da sociedade pelos trabalhadores deve
ser exercido já a partir das fábricas na forma de controle operário6.

5 - Um agrupamento venezuelano surgiu com o nome de Corrente Marxista

Revolucionária. Ver El militante disponível em < www.venezuela.elmilitante.org>
6 - Não temos o propósito de fazer aqui uma apresentação dessa corrente política,
mesmo que esquemática. Essas poucas linhas servem simplesmente para ajudar a
situar a atuação dos trabalhadores da Inveval. Além disso, convém assinalar que a
expressão controle operário, que remonta à Revolução Russa, guarda mais
significados e controvérsias do que sugere sua simples enunciação.

A importância do pensamento da CMI no grupo da Inveval é
bastante patente. Essa influência já fazia parte da reflexão dos
trabalhadores no tempo da Cooperativa. Manifestou-se precocemente
em sua posição de relativa independência frente ao governo e, também,
na primazia concedida à assembléia geral como base da gestão na fábrica.
Por fim, possivelmente devido a essa influência, os trabalhadores fizeram
a crítica da forma de organização cooperativa, rejeitaram a solução de
empresa de propriedade mista cooperativa-Estado e passaram a defender
a estatização da Inveval bajo control obrero.

A fórmula estatización bajo control obrero não era reivindicada
apenas para a Inveval, mas é uma consigna inerente à CMI, assumida
também pela Corriente Marxista Revolucionária (CMR) e pela Frente
Revolucionário de Trabajadores en Empresas Ocupadas y en Cogestión

(FRETECO). Esta última praticamente nasceu na Inveval, que prontamente
liberou da produção dois trabalhadores para ajudar a estruturá-la e
realizar o trabalho político.

Ainda na condição de cooperativa, os trabalhadores re-encetaram
a luta. Desta vez sob o estandarte de estatización bajo control obrero e
também para que o governo tomasse as medidas necessárias no sentido
de viabilizar a fábrica.

Em abril de 2007, delegados da fábrica compareceram a uma
audiência com o presidente Chávez. Os trabalhadores Antonio
Betancourt e Pablo Comenzana (2007) da Inveval, presentes à audiência,
relatam que:

Cuando les tocó a nuestros camaradas de Inveval, Chávez centró sus
preguntas en lo político diciendo que en este momento ello es más
importante que lo productivo. Se interesó por saber cómo manejaban
la escala de salarios en la empresa, ya que en todas las intervenciones
de las otras empresas se había hecho hincapié en dicha escala de
salarios de acuerdo a las posiciones que cada uno ocupa en ellas.
Cuando los camaradas le respondieron que en Inveval todos, desde
el presidente hasta el que limpia los baños, ganan lo mismo, Chávez
pidió un aplauso para ellos diciendo: ‘Ustedes han comprendido el
objeto de este proceso’. También los felicitó por la forma en que están
dirigiendo la empresa a través del consejo de fábrica, y nuevamente
recalcó que son los únicos que han entendido cómo hay que hacer las
cosas y que deben ser un ejemplo para las demás empresas, que hay
que difundir su experiencia porque así deben funcionar las empresas
socialistas. Luego agregó que Inveval iba a pasar a ser una empresa
100% estatal pero manteniéndose el control obrero sobre la misma a
través del consejo de fábrica, tal como ha venido funcionando hasta
ahora.

Finalmente, em janeiro de 2008, a Inveval estava transitando do
estatuto legal de co-gestão cooperativa-Estado para o estatuto de fábrica
estatizada sob controle dos trabalhadores.

3.1. OCONTROLEOPERÁRIOOUO TRABALHOASSOCIADONA FÁBRICA
A concepção de controle operário (CO) não é unívoca
conceitualmente, nem tampouco historicamente. Na Venezuela não é
diferente, e no movimento operário subsistem diferentes concepções, em
diferentes correntes políticas ou até no interior de uma mesma corrente.

A própria expressão CO é denotativa de conceituações e estruturas
de classe pretéritas, quando o proletariado industrial de macacão
centralizava ações e atenções. Na Venezuela, o CO segue tendo como
epicentro conceitual e prático a classe operária industrial de macacão, o
que valida o seu uso, porém, a proposição de controle certamente não está
restringida a esse estrato da classe trabalhadora.

O tipo de controle operário que os trabalhadores da Inveval
defendem é o que denominamos de trabalho associado (TA) (VIEITEZ;
DAL RI, 2001; DAL RI; VIETEZ, 2008).

Os trabalhadores da Inveval estão procurando construir um
sistema de cooperação antitético ao existente, isto é, organizado,
controlado e em benefício dos trabalhadores. No entanto, ainda que se
comece pela organização na fábrica, como é o caso, os trabalhadores da
Inveval têm consciência que este sistema apenas poderá prosperar na
forma de uma articulação cooperativa mais ampla, ou seja, entre cada
uma das unidades de trabalho e a totalidade social. Os trabalhadores
deram uma expressão prática a esta perspectiva basicamente de três
maneiras, por ora: a) apoio ao governo Chávez já que acreditam que este
está impulsionando esse processo, e porque têm a visão de que sem a
parceria do governo o CO não poderá ir muito longe; b) criação da Freteco.
A Freteco visa levar a organização do CO a todas as unidades de trabalho
do país, mas, ao mesmo tempo, é também, ao menos virtualmente, uma
agência de enlace do trabalho associado em âmbito geral; c)
estabelecimento de associação cooperativa com a INEF, outra empresa
em situação análoga.

Dando prosseguimento a esta narrativa apresentamos elementos
básicos a respeito de como os trabalhadores da Inveval estão organizando

o TA em sua empresa.

A única maneira dos trabalhadores superarem a situação de
assalariamento sem que eles mesmos, individualmente, se convertam em
burgueses, consiste em que estabeleçam entre si algum tipo de associação
cooperativa com vistas à produção. Para que não se reproduza o que se
está procurando superar, este tipo de associação tem necessariamente
que ser edificada pelos trabalhadores sobre o princípio de igualdade
entre os produtores. Isto implica a supressão da propriedade privada
dos meios de produção - ou, ao menos, sua modificação como nas
cooperativas -; a liquidação da subordinação hierárquica dos
trabalhadores, a supressão da exploração econômica; o desmantelamento
das relações salariais; e, em última ratio, a superação do mercantilismo
como núcleo estruturador das relações de produção.

Em termos teóricos mais ou menos abstratos, esses princípios são
fáceis de visualizar. Na prática, entretanto, tudo é mais complicado e a
construção social do trabalho associado nas unidades de produção e,
mais ainda, dos produtores associados, conquanto categoria social
inclusiva e totalizante prefigurável, demanda longa experimentação
histórica.

Examinamos em seguida como os trabalhadores estão tentando
atuar segundo essa perspectiva na Inveval.

3.2. A AUTORIDADE NA FÁBRICA COMO ACONTECIMENTO AUTO-REFERIDO DO
TRABALHADOR COLETIVOEAORGANIZAÇÃODAGESTÃO
Os eventos de TA em curso, em geral, apresentam formas muito
variadas de organização. Isto decorre dos diferentes estágios em que se
encontra a luta social em diferentes países e devido ao seu pioneirismo e
inevitável experimentalismo. Na Inveval a produção da sociabilidade
na fábrica, bem como das categorias operatórias mais propriamente
técnicas da gestão, delineiam-se segundo ummodelo que denominamos
de organização horizontal. Um aspecto central deste parâmetro é que ele
apresenta um vetor organizacional e comportamental orientado para
promover a (des)alienação do trabalho, ou seja, um vetor social que visa
fazer com que o trabalhador coletivo assuma-se como demiurgo e
protagonista, relativamente autônomo, de sua própria atividade
produtiva. Examinemos, portanto, como isso se dá concretamente.

Os elementos mais sobressalentes da organização da autoridade
e da gestão na Inveval são ou dizem respeito a: a) o sistema de tomada de
decisões; b) as remunerações; c) a divisão política e técnica do trabalho
d) as relações com a comunidade; e) a educação.

Quando inquirimos Yañez e Vellorin (2008) quanto à tomada de
decisões na empresa, eles responderam que: “Aqui quem manda são ostrabalhadores. Tem uma assembléia e o conselho de fábrica. É o Conselho
que dá as diretrizes. Mas, na realidade, quando se vai tomar uma decisão
importante se chama uma assembléia geral e ali se toma a decisão”.

A assembléia geral é a instância máxima de deliberação no âmbito
endógeno da Inveval. Há assembléias informativas e deliberativas.
Usualmente, a assembléia geral se reúne uma vez ao mês e
extraordinariamente sempre que há necessidade.

A coordenação executiva na Inveval encontra-se em mãos do
conselho de fábrica (CF). O CF é formado por 32 delegados eleitos pela
assembléia para um período de seis meses e são reelegíveis. Convém
observarmos dois elementos da engenharia política utilizada. Nas
organizações liberais/parlamentares temos o representante, que possui
plena autonomia para deliberar e que, geralmente, não pode ser demovido
de seu cargo antes do término do mandato. Na Inveval, diferentemente,
temos o delegado e a revogabilidade. Em princípio, o delegado deve seguir
a linha política e administrativa da assembléia e a revogabilidade
possibilita que esta remova o delegado de seu cargo a qualquer momento.

A assembléia geral é o poder deliberante máximo e o CF funciona
como seu braço executivo. Isto em princípio, porque na prática um
organismo do tipo do CF tende a ter uma ascendência política
variavelmente desproporcional ao preconizado pela constituição de
fábrica que erige como poder máximo a assembléia, como o demonstra a
experiência internacional do TA.

Dependendo das necessidades é comum que se formem comitês
especializados para tratar de vários assuntos e também mesas de
trabalho, em geral com o objetivo de encaminhar propostas à assembléia.

Finalmente, temos aJunta Directiva que subsistiu no novo statusde
empresa estatizada sob controle dos trabalhadores. A Junta representa o
governo e realiza o enlace entre o Estado e a Inveval.

A Junta Directiva coloca em pauta a questão das relações entre a
Inveval e o Estado, entre o particular e o geral. O enlace entre a Inveval e

o governo é necessário agora e seria ainda mais necessário caso o Estado
venezuelano já fosse um Estado proletário. No âmbito deste texto pouco
poderemos agregar a este tema, porém, é evidente que o padrão de relações
a serem estabelecidas entre as unidades de produção e a sociedade como
organismo produtivo total, possivelmente mediante alguma modalidade
de planificação democrática, constitui uma dimensão crucial, de fato,
um verdadeiro nó górdio com respeito à evolução do controle operário e
do pretendido processo de (des)alienação do trabalho.

Um tópico fundamental do TA diz respeito aos critérios de
distribuição da riqueza mediante as remunerações dos trabalhadores.
Por deliberação do coletivo, o valor da remuneração na Inveval, fixada
um pouco acima do salário mínimo, é igual para todos. A opção pela
igualdade, além de expressar a visão do coletivo levou em conta a
experiência passada e a natureza do grupo profissional. O grupo de
trabalhadores é homogêneo e de qualificação profissional simples. Por
outro lado, a experiência na cooperativa mostrou que os principais
conflitos ocorreram em torno da fixação dos critérios de remuneração, já
que havia setores que aspiravam a ganhar diferenciadamente. Assim, na
nova situação de control obrero os trabalhadores optaram pela
remuneração linear, como eles dizem. Contudo, os trabalhadores têm
consciência quanto à realidade do mercado de trabalho, de sorte que se
no dia de amanhã a Inveval tiver que contratar pessoal tecnicamente
mais qualificado, provavelmente terão que introduzir diferenciações nas
remunerações. Segundo Aguilar Montilla (2008) “Isso será discutido.
Mas a tendência é que deverão ganhar no máximo três vezes mais”.

Em acordo com a preocupação manifesta de equalização das
capacidades e funções dos membros do coletivo, os trabalhadores
introduziram na gestão o princípio de rotação nas funções técnicas e nos
cargos políticos e de coordenação. Os coordenadores de área, por exemplo,
cargos técnicos diretamente ligados à produção, são fixados por um ano.
O mais sintomático diz respeito à participação dos trabalhadores no CF.
Espera-se que todos os trabalhadores possam viver as experiências doConselho, porque “Essa é uma experiência muito boa. É como uma escola
passar pelo Conselho de Fábrica” (AGUILAR; MONTILLA, 2008).

O interesse pela educação que se depreende desse depoimento se
aplica, também, à educação formal ou escolar. Neste quesito os
trabalhadores da Inveval estão aproveitando bastante as missões
educativas oferecidas pelo governo Chávez. Conforme os entrevistados,
são muitos os que voltaram a estudar e, atualmente, a maioria está
estudando. Muitos estão na Missão Robinson, que oferece o curso
elementar. Cerca de 40% encontram-se freqüentando cursos
universitários oferecidos pela Missão Sucre. Outros estão fazendo o
segundo ciclo do ensino fundamental, bachillerato, aproveitando a Missão
Rivas.

Três são as determinantes que se destacam neste renovado interesse
dos trabalhadores pela educação formal. A sua nova condição de
demiurgos-protagonistas de sua própria atividade produtiva, o fato de
que esta condição oferece-lhes tempo e incentivos inexistentes sob o
patronato, e as facilidades oferecidas pelas missões educacionais do
governo.

Os trabalhadores da Inveval no regime de controle operário
continuam impulsionando suas relações com os setores operários e
populares da comunidade. A partir da formação da Freteco, esse
relacionamento ampliou-se em âmbito nacional. De acordo com
depoimento de Juan Briceño (2008), coordenador do banco do Consejo
Comunal de Villa Josefina, situado nas imediações da fábrica na estrada
Carrizal, a Inveval busca articular-se com a comunidade, talvez visando
um governo comunitário integrado, notadamente com os consejos
comunales. Encontros de trabalho entre membros da comunidade e o
pessoal da fábrica vêm sendo realizados com esse propósito. Além disso,
a Inveval interage com a comunidade de outras maneiras, apoiando na
medida do possível ações comunitárias e disponibilizando seu espaço
para a realização de atividades educativas e várias outras. Em abril de
2007 realizou-se o Encuentro entre Consejos Comunales de Los Teques y el
Comité de Fábrica de INVEVAL. A proposta principal do encontro “[…]
giró en torno a lo que es el quinto motor constituyente: el de la explosión
del poder comunal, proponiéndose la creación de una Asamblea
conformada por delegados de los distintos Consejos Comunales del
municipio y de los distintos Consejos de Fábrica […] (CMR, 2007).

Mais recentemente, como já indicamos, a Inveval aproximou-se da
INAF, fábrica de peças de metal que também foi estatizada e com a qual
pretende estabelecer uma associação.

CONSIDERAÇÕES FINAIS

O trabalhador coletivo associado na Inveval desenvolve uma
práxis na qual trata de urdir alguns dos elementos, provavelmente
fundamentais, do que poderá vir a ser uma nova concepção de mundo:
igualdade como princípio norteador da socialidade dos trabalhadores,
trabalho associado, produtores associados, conselho de fábrica,
assembléia geral, planificação democrática, etc.

Os pontos de contato que podemos estabelecer entre a práxis da
Inveval e a práxis de outras organizações de TA podem ser tomados
como indicativos de que uma comum matriz tende a engendrar soluções
aparentadas quando se trata de caminhar por uma via de superação do
trabalho alienado. Isto é mais patente quando comparamos a Inveval
com outras organizações de trabalho associado com o mesmo vetor em
direção à horizontalidade de gestão, como, por exemplo, a mencionada
Zanón.

Contudo, é improvável que uma transfiguração geral da sociedade
possa vir a ser realizada a partir basicamente das unidades de trabalho
ou da economia, mutatis mutandis à semelhança do que a burguesia fez
historicamente antes de tornar-se classe dominante e dirigente. Isto
significa que esse processo deverá ser conduzido primordialmente pela
luta política, e a conquista do Estado pela classe trabalhadora será
acontecimento imprescindível.

Na Venezuela, Chávez e seu grupo atualmente no governo dão
sinais, ainda que não inequívocos, de apoiaram a transformação da
sociedade com o apoio ao tipo de práxis que a Inveval e outras unidades
de produção estão tentando engendrar. Quanto a isto, é interessante
observar que seguindo aparentemente essa direção, Chávez tentou
sedimentar como política de Estado o que é atualmente política de governo
quando apresentou para votação popular uma Constituição que
institucionalizaria um tipo de empresa socialista mais em acorde com o
control obrero e outras iniciativas de teor análogo. No entanto, esse que
seria um novo marco favorável à intervenção democrática dos
trabalhadores foi rechaçado pela derrota do governo na votação
constitucional de 2007. De qualquer modo, essa derrota, no marco atual
do processo político venezuelano, não pode ser considerada definitiva.
Esse governo, a continuar na berlinda poderá retomar a qualquer momento
as mesmas ou análogas proposições constitucionais. Quanto ao mais,
não há dúvida de que a luta desenvolvida pelo movimento operário e
popular da Venezuela nesse processo terá um papel fundamental ou
mesmo determinante.

VIEITEZ, C. G.; DAL RI, N.M. Inveval – venezuelan state factory under worker’s
control. Revista ORG & DEMO (Marília), v. 10, n.1, p. 141-158, jan./dez.,
2009.

ORG & DEMO, Marília, v.10, n.1/2, p. 143-158, jan./dez., 2009


VIEITEZ, C. G.; DAL RI, N. M.

REFERÊNCIAS

ABN. Hace siete años la contrarrevolución atentó contra la economía. Net.
Espanha. dez. 2009. Disponível em: Acesso em: dez. 2009.

AGUILAR, R; MONTILLA, R. Entrevista concedida aos pesquisadores na
Inveval em Janeiro de 2008.

BETANCOURT, A.; CORMENZANA, P. Chávez: Inveval, un ejemplo a seguir.
Net. Caracas. out. 2007. Disponível em: . Acesso em: out. 2007.

BRICEÑO, J. Entrevista concedida aos pesquisadores na Inveval em Janeiro
de 2008.

CMR. Encuentro entre Consejos Comunales de Los Teques y el Comité de
Fábrica de INVEVAL Net. Caracas. abril 2007. Disponível em: . Acesso em: abril 2007.

DAL RI, N. M.; VIEITEZ, C. G. Educação democrática e trabalho associado no
Movimento dos Trabalhadores Rurais Sem Terra e nas fábricas de autogestão.

São Paulo: Ícone: Fapesp, 2008.

YANEZ, H.; VELLORIN, H. Entrevista concedida aos pesquisadores na Inveval
em Janeiro de 2008.

VIETEZ, C.G.; DAL RI, N.M. Trabalho associado: cooperativas e empresas de
autogestão. Rio de Janeiro: DP&A: Finep, 2001.

VIEITEZ, C. G.; DAL RI, N. M. Mudança social na América Latina, trabalho
associado e educação. Araraquara: Junqueira & Marin, 2009.

ORG & DEMO, Marília, v.10, n.1/2, p. 143-158, jan./dez., 2009
**********

In:
Revista ORG & DEMO
http://www2.marilia.unesp.br/revistas/index.php/orgdemo/article/viewFile/302/246
Jan./Dez., 2009

sexta-feira, 22 de novembro de 2013

Intercerámicas - más de 15 meses sin salarios

Entrevista a los trabajadores de Intercerámicas - más de 15 meses sin salarios

Escrito por Prensa Lucha de Clases

Correo electrónico Entrevista realizada el día lunes 11 de noviembre en las
instalaciones de la empresa alfarera Intercerámicas, a 2 de los 20 trabajadores
que se mantienen en lucha, luego de que hace más de 15 meses los accionistas y
dueños de la fábrica decidieran notificarles por vía Skype, su decisión
definitiva de cerrar la fábrica, de forma cobarde y sin dar la cara
personalmente.
Esta situación obligó a los trabajadores que decidieron no aceptar la miserable
liquidación ofrecida por esta burguesía parasitaria, a tomaron las instalaciones
de la empresa, en resguardo de sus puestos de trabajo, y de sus beneficios
acumulados por todos los años de labores dentro de la empresa. Debido a la
negativa de los patronos a reiniciar la faena laboral, y la ineficiencia de la
burocracia de la Inspectoría del Trabajo competente, que a 15 meses no se ha
pronunciado según lo establecido en la LOTT, donde se contempla el procedimiento
en cuanto a los cierres ilegales y fraudulentos, para obligar a los patrones a
retomar las operaciones, y en caso de no cumplir, se aplica el art. 149, donde
se forma una Junta Interventora que administre la empresa y reanude la faena
laboral.
Luego de 15 meses de reuniones con diferentes personalidades del gobierno
Bolivariano, tanto de la Inspectoría, el Ministerio del Trabajo, entre otros, se
vieron forzados a reaundar las operaciones de la empresa por ellos mismos, sin
patrono y bajo Control Obrero, con la finalidad de poder llevar a sus
respectivos hogares, un sueldo que les permita poder continuar esta guerra de
desgaste contra esta burguesía, y poder . Se estima que para finales de
noviembre estén en definitiva retomando la producción.



Entrevista a la Maribel García, una de las dos trabajadoras que se mantienen en
pie de lucha, y que son el único sustento económico de sus familias, y que al
igual que el resto de sus compañeros, desde hace 15 meses no reciben ningún
ingreso que les permita llevar a sus casas, al menos los alimentos suficientes
para el día a día.
Lucha de Clases: Camarada díganos su nombre, el cargo y las funciones dentro de
la empresa
Maribel García: Mi nombre es Maribel García, y mi cargo es operador de
Selección. Opero la máquina que selecciona el material según su calidad. Si es
de primera, segunda o tercera, y tengo 12 años en la empresa, entré a la empresa
en el 2001.
LDC: Describe un poco como ha sido para ti esta situación, luego de que el
patrono los dejara sin salarios.
MG: Ya tenemos acá 15 meses en esta situación, yo tengo un hijo de 15 años, que
estudia actualmente 5 años, con todo el sacrificio lo he sacado adelante, ya que
no recibo ningún ingreso fijo, y mi deseo es que saquemos esto adelante. Porque
esto es muy difícil, son 15 meses en esto y no es fácil. Sobre todo cuando uno
es padre y madre al mismo tiempo, uno tiene que buscar las mil maneras para
llevar a la familia adelante. Y bueno, mi hijo dios mediante, ya está por salir
del bachillerato, y espero que cuando entre a la universidad ya todo esto este
solventado.
LDC: ¿Qué llamado le haces a las autoridades competentes?
MG: Bueno que visualicen no tanto lo político, sino el día a día del trabajador,
de que habemos muchos padres, y muchas madres sin empleo y que no podemos
simplemente decirle a nuestros hijos que estamos desempleados y ya. Ellos no
pueden entender eso, porque nos piden cuadernos, nos piden comida, y no podemos
negárselo porque no tenemos un trabajo, porque es algo grave. Y tenemos que
buscar la manera de entregarse en la medida que lo vayan necesitando, para que
el día de mañana no sean unas personas excluidas, o un cero a la izquierda, que
no sean personas ignorantes, sino que tengan un estudio, una educación.



Entrevista al camarada Alexander Castillo, delegado de prevención de
Intercerámicas.
Lucha de Clases: Díganos su nombre, el cargo y las funciones que cumplía dentro
de la empresa
Alexander Castillo: Mi nombre es Alexander Castillo, antes de cerrar la empresa
trabajaba en el area de empaque. Soy delegado de prevención.
LDC: Descríbenos un poco la situación que se les ha estado presentado.
AC: Luego de la actitud que tomó el patrono, decidimos quedarnos acá 20
trabajadores en resguardo y tomar el control en la empresa. Ya que el no quiere
asumir su responsabilidad como patrón, entonces lo asumimos nosotros los
trabajadores que tomamos el control obrero. Tenemos ya 15 meses en resguardo sin
recibir ningún salario. Gracias a la federación y a los trabajadores de las
demás empresas es que hemos aguantado esta lucha, y de aquí hasta la victoria.
LDC: ¿Qué llamado le haces a las autoridades del estado competentes?
Por toda nuestra situación le hacemos un llamado al gobierno, que nos ayude, ya
que incluso hemos ido varias veces a caracas y nos hemos reunido con diferentes
personas, y ya no queda de nuestra parte, sino del gobierno que tome cartas en
el asunto. Y que sepa que la clase obrera apoya el proceso revolucionario, y
estamos en la lucha. Nosotros, tomándole la palabra al camarada Diosdado y al
presidente Nicolás Maduro “que el poder lo tomen los trabajadores”, pues estamos
en eso. Tomando el poder.
LDC: ¿Que consejos le dan a aquellos trabajadores que justo hoy mismo, se
encuentren pasando por situaciones parecidas a las de uds?
AC: Que actúen, que no se dejen dominar por el miedo, que nosotros también lo
tuvimos, y mira donde ahora vamos avanzando. Que cuenten con nuestro apoyo, que
aquí estamos para darles ayuda acá en el estado Lara, ¡y pa' lante!



Desde Lucha de Clases, le hacemos un llamado a la Inspectoría del Trabajo que
atiende el caso, que se pronuncien en beneficio de los trabajadores que producto
de un acto de sabotaje económico de esta burguesía parasitaria, han quedado sin
empleo, y sin un ingreso económico que les permita llevar a sus casas y a sus
familias los alimentos para el sustento diario. De igual manera llamamos al
Ministerio del Trabajo, así como a la camarada María Cristina Iglesias, ministra
del trabajo, a que hagamos cumplir el legado del presidente Hugo Chávez, y
contenido en la ley del trabajo, y a cumplir la voluntad de nuestro actual
presidente Nicolás Maduro: ¡A fábrica parada, fábrica puesta en manos de los
trabajadores!
Todo el poder para la clase obrera del pais.
Por el Control Obrero como única medida definitiva para detener la guerra
económica contra el pueblo.
A fábrica cerrada, fabrica expropiada y puesta en manos de los trabajadores.

In
Lucha de clases
http://www.luchadeclases.org.ve/venezuela/control-obrero/7595-entrevista-trabajadores-interceramicas
22/11/2013

terça-feira, 19 de novembro de 2013

Trabajadores franceses protestan contra el cierre de una planta de Goodyear



Cientos de trabajadores de la filial francesa de la firma estadounidense
Goodyear cerraron hoy los accesos de la planta, ubicada en la comuna de
Amiens-Nord, cuyo desmantelamiento fue confirmado y dejará a más de mil personas
sin empleo.
Los obreros soldaron los portones de la instalación para impedir la entrada o
salida de camiones y prendieron fuego a decenas de neumáticos en protesta contra
la clausura de la fábrica, informó Franck Jurek, delegado de la Confederación
General del Trabajo (CGT). Durante la jornada de manifestaciones está prevista
una concentración en el poblado vecino de Boves, donde tendrá lugar la primera
reunión de la dirección del consorcio estadounidense para informar detalles
sobre el despido del personal.

La CGT llamó a impedir la realización de ese encuentro para demorar el proceso
de cierre y dar tiempo a continuar las negociaciones con el gobierno destinadas
a mantener funcionando la planta, principal fuente de empleo en esa localidad
del norte del país.

En enero de 2013 la transnacional estadounidense informó que pondría fin a sus
actividades en Francia debido a los problemas financieros, supuestamente
derivados de la crisis económica en Europa.

Los asalariados insisten en que la fabricación de neumáticos para automóviles y
vehículos agrícolas es una actividad rentable y propusieron crear una
cooperativa en sociedad con el gobierno para salvar sus puestos y mantener la
actividad.

Dicho proyecto, sin embargo, fue rechazado por el ejecutivo con el argumento de
que no existían fondos para financiarlo debido a las medidas de austeridad
presupuestaria decretadas a finales del año pasado.

Tampoco prosperaron las gestiones del ministro de la Reactivación Productiva,
Arnaud Montebourg, ante la corporación norteamericana Titán para salvar la
planta de Amiens.
http://www.argenpress.info/2013/11/trabajadores-franceses-protestan-contra.html

La última oferta de Titán fue comprar las instalaciones con el requisito previo
de despedir a todo el personal.

Goodyear se suma a otras empresas foráneas que cerraron sus operaciones en el
país galo, como hicieron ArcelorMittal en los altos hornos de la siderúrgica de
Florange y el grupo suizo Petroplús con la refinería de Petit-Couronne.

In
Argenpress
http://www.argenpress.info/2013/11/trabajadores-franceses-protestan-contra.html
18/11/2013

segunda-feira, 18 de novembro de 2013

El cooperativismo vasco: mito y realidad


Santi Ramirez

El pasado 16 de octubre, la empresa Fagor Electrodomésticos, perteneciente al
Grupo Mondragón, anunció que entraba en pre-concurso de acreedores, al haber
acumulado una deuda de más de 800 millones de euros. Días más tarde, el 31 de
octubre de 2013, la Corporación Mondragón anunciaba en un comunicado que no
podía continuar apoyando económicamente a Fagor, lo que significa dar por hecho
el cierre definitivo de la empresa. Pero lo sucedido en Fagor, nos obliga a
hacer algunas reflexiones.
La quiebra de Fagor Electrodomésticos supone la destrucción de más de 4000
empleos, entre puestos de trabajo directos (socios cooperativistas y
trabajadores asalariados) e inducidos, y afectará principalmente a la comarca
guipuzcoana del Alto Deba aunque también repercutirá en otras zonas de Hegoalde
y de otros países europeos. Además, Fagor era un símbolo del Grupo Mondragón, y
uno de los principales referentes del cooperativismo vasco a nivel mundial.
El movimiento cooperativista ha llegado a tener un peso importante en la
economía vasca, especialmente en Hegoalde. Hay cooperativas de muy diversos
tipos: de trabajo asociado (industriales), de consumo, agrarias, de ahorro y
crédito, de servicios, de viviendas, de transporte, de turismo, de enseñanza, de
comercio, de suministro, mixtas, etc.
En 2008 el número de cooperativas era de 2236. En la CAPV había 1688
cooperativas constituidas, de las que 1083 (un 64,2%) eran de trabajo asociado.
En 2009, en Nafarroa, el número de cooperativas era de 532, de las que 303 eran
agrarias y 93 de trabajo asociado. Y en Iparralde, en 2005, había 16
cooperativas [1]. Dicho año, el número de empleados-as en las cooperativas de la
CAPV ascendía a 50.359 personas, que se clasificaban de la siguiente manera: el
69% eran socios trabajadores, el 13%, asalariados fijos, y el 18% asalariados
eventuales [2].
El mito
La organización de cooperativas se remonta al siglo XIX. Una de las primeras se
formó en 1844 en Rochdale, Mánchester (Inglaterra). Entre los defensores del
cooperativismo, se encuentran los socialistas utópicos Robert Owen y Charles
Fourier. Estos, eran conscientes de la penosa situación en que se encontraban
los trabajadores bajo el capitalismo pero, para ponerle fin, no planteaban
correctamente cómo acabar con éste.
Sobre esta cuestión, decía Lenin que:
“¿En qué consiste el carácter fantástico de los planes de los viejos
cooperativistas, comenzando por Roberto Owen? En que soñaban con la
transformación pacífica de la sociedad de entonces mediante el socialismo, sin
tener en cuenta cuestiones tan fundamentales como la lucha de clases, la
conquista del poder político por la clase obrera, el derrocamiento de la
dominación de la clase de los explotadores. Y por eso, tenemos razón al
considerar ese socialismo “cooperativista” como una pura fantasía, algo
romántico y hasta trivial por sus sueños de transformar, mediante el simple
agrupamiento de la población en cooperativas, a los enemigos de clase en
colaboradores de clase, y la guerra de clases en paz de clases (la llamada paz
civil).
Indudablemente, desde el punto de vista de nuestro planteamiento de la tarea
fundamental de la actualidad, nosotros teníamos razón, ya que sin la lucha de
clases por el poder político del Estado el socialismo no puede ser realizado”.
[3].
Por su parte, la iglesia católica, en su “doctrina social”, también ha defendido
el cooperativismo como un medio para “dignificar” a los trabajadores y, al mismo
tiempo, alejarles del comunismo y de la lucha de clases. Por tanto, no puede
extrañarnos que en Euskal Herria fuese un sacerdote, Jose María Arizmendiarreta,
quien junto a cinco jóvenes procedentes de la Escuela Profesional de Mondragón,
fundase en 1956 la cooperativa ULGOR que fue el inicio del que años más tarde
sería el Grupo Cooperativo Mondragón.
Algunos sectores de izquierda también han idealizado y mitificado la
organización de cooperativas. Incluso entre la izquierda soberanista vasca han
surgido algunos neo- socialistas utópicos que consideran a las cooperativas como
si fuesen una especie de “islas” de socialismo, a partir de las cuales se podría
llegar a “construir” el poder de los trabajadores, sin necesidad de
arrebatárselo a la burguesía.
La realidad
Esta visión idílica de las cooperativas ha sido echada por tierra, de forma
cruda y descarnada, por la propia realidad objetiva. Aunque las cooperativas que
se desarrollan en el marco socio-económico del capitalismo tengan algunos
aspectos positivos (como el posibilitar el autoempleo en periodos de crisis; o
el demostrar, en la práctica, que los propios trabajadores pueden controlar y
gestionar las empresas sin necesitar a los patronos); lo cierto es que se
encuentran sometidas a las leyes del mercado y que, para sobrevivir, necesitan
competir, de forma despiadada con otras empresas y también con otras
cooperativas.
Por ello, se ven forzadas a abaratar sus costes de producción y mejorar su
productividad, para lo que deben incorporar los últimos avances técnicos y
científicos (I+D+i) al proceso productivo. Al mismo tiempo, también se ven
obligadas a buscar nuevos mercados (ya sea en el plano nacional o en el
internacional). Todo lo cual las lleva a requerir una creciente financiación
externa, para lo que deben recurrir cada vez con mayor frecuencia a los créditos
bancarios.
En fin, bajo el capitalismo, las cooperativas se ven sometidas a la acción de
una serie de factores que condicionan su propio funcionamiento interno, que las
llevan a adoptar formas organizativas y de gestión cada vez más complejas y, en
definitiva, a alejarse cada vez más de sus iniciales principios democráticos y
asamblearios; a requerir del trabajo de “expertos” que acaban resultando
imprescindibles y que llegan a constituir una verdadera élite de tecnócratas que
se superpone al conjunto de los trabajadores-cooperativistas y acaban
gestionando las cooperativas según sus propios intereses. Es decir que las
cooperativas, lejos de ser esas idílicas “islas” de socialismo, tienden a
reproducir las relaciones de producción capitalistas y, como consecuencia de
ello, a generar contradicciones entre el trabajo físico e intelectual, entre el
trabajo de ejecución y el de dirección.
Esto es, ni más ni menos, lo que ha ocurrido con Fagor Electrodomésticos, según
denuncian algunos de sus propios cooperativistas. De hecho, esta cooperativa
opera a través de 12 marcas comerciales, posee plantas de producción y filiales
en varios países (España, Francia, Marruecos, Irlanda, Italia, Polonia, China,
etc.) y vende sus productos en 130 países. Está integrada en el grupo Fagor que,
a su vez, forma parte de la Corporación Mondragón (séptimo grupo empresarial del
Estado español y el mayor grupo cooperativo del mundo) cuya producción supuso en
2010 el 3,1% del PIB de la CAPV y el 7,4% de su PIB industrial [4].
En el 3er. Congreso del Grupo Mondragón (1991), se creó la Mondragón Corporación
Cooperativa, que se constituyó como una federación. En 1993, el Parlamento Vasco
aprobó la Ley de Cooperativas de Euskadi, que respondía a las necesidades del
Grupo Mondragón y que permitía que las cooperativas pudieran disponer de nuevos
medios de financiación, entre ellos la emisión de “participaciones especiales” y
obligaciones, con lo cual se asemejaron más y más a otras empresas capitalistas.
Algunas cooperativas, como ULMA, no se integraron en MCC.
El cambio en la legislación vino a favorecer la articulación sectorial de las
cooperativas, así como su integración vertical, al mismo tiempo que se
debilitaba la autonomía de las cooperativas individuales en beneficio del grupo,
al facilitar la concentración y centralización de los órganos de decisión dentro
del MCC.
A partir de ese momento, los órganos básicos de gobierno del Grupo Mondragón
fueron el Congreso, el Consejo General y el Consejo Permanente, situándose
inmediatamente después los órganos de las divisiones. Al mismo tiempo que perdía
peso la Asamblea General, por reducción de competencias, lo ganaban las
cooperativas más representativas del grupo (Fagor, Eroski, Ikerlan,…) a través
de las Agrupaciones Sectoriales. Con ello, el poder de decisión quedaba cada vez
más alejado de las asambleas de base de las cooperativas y las decisiones más
importantes escapaban a su control.
Para hacerse una idea sobre la importancia de MCC en el conjunto del
cooperativismo vasco hay que decir que Konfekoop (Confederación de Cooperativas
de Euskadi) agrupaba, en 2009, al 95% del sector cooperativo y empleaba a 56.000
trabajadores-as; y que MCC constituía el núcleo principal de la confederación ya
que sumaba el 73% del empleo en las cooperativas de trabajo asociado, más del90%
de las de consumo y el 80% de las cooperativas de crédito. Ello, a pesar de que,
en mayo de 2008, dos cooperativas tan representativas como Irizar y Ampo
abandonaron MCC [5].
Por último, el “pinchazo” de la burbuja inmobiliaria que tuvo lugar en 2008,
afectó considerablemente a Fagor Electrodomésticos ya que de los aproximadamente
700.000 pisos que en aquella época se construían en el Estado español, la mayor
parte estaban equipados con electrodomésticos de dicha empresa. Ello hizo que de
tener una facturación anual de unos 1.800 millones de euros en los años 2006 y
2007, ese año bajase a unos 500 millones, con unas pérdidas adicionales de 60
millones [6].
Notas
1.- “Cooperativismo en Euskal Herria”. Auñamendi Eusko Entziklopedia.
2.- Idem.
3.- V.I. Lenin: “Sobre la cooperación”. O.E. Tomo III. Pág. 783. Editorial
Progreso. Moscú, 1970.
4.- www.lainformación.com (17-10-13)
5.- El País (18-06-2009).
6.- www.20minutos.es (03-11-2013)
Rebelión ha publicado este artículo con el permiso del autor mediante una
licencia de Creative Commons, respetando su libertad para publicarlo en otras
fuentes.

In
Rebelión
http://rebelion.org/noticia.php?id=176993
18/11/2013

domingo, 17 de novembro de 2013

Empresas sob autogestão de trabalhadores


Pesquisa da Unicamp revela sucesso de empresas sob autogestão de trabalhadores

Dissertação 'Autogestão dos trabalhadores como alternativa para recuperação de
empresas falidas ou em processo falimentar' é de

Thiago Figueiredo Ribeiro.


Criação, encerramento e falência de empresas constituem um processo dinâmico e
intrínseco ao capitalismo. Particularmente as empresas de maior porte, ao
encerrar as atividades, geram perdas significativas para agentes econômicos e,
dependendo de sua abrangência, alteram até a dinâmica de uma localidade.
Perdem-se, também, conhecimentos acumulados, competências desenvolvidas e,
normalmente, ocorre o desmonte da estrutura produtiva com a venda de ativos para
o pagamento de credores, inviabilizando a possibilidade de retomada das
atividades.

O Direito Falimentar brasileiro disponibiliza instrumentos que visam minimizar
os danos e preservar as atividades empresariais, recuperar o empreendimento,
salvaguardar interesses de credores e maximizar o valor dos ativos. Para tanto,
o instrumento de recuperação judicial abre a possibilidade aos trabalhadores,
enquanto credores, de buscar alternativas para o encaminhamento da situação.

Nesses casos destaca-se a possibilidade da organização coletiva dos
trabalhadores em um empreendimento de autogestão (cooperativa), como forma de
viabilizar o arrendamento da massa falida para o grupo constituído e a
continuidade das atividades produtivas. Essa solução, entretanto, não automática
nem regulamentada, resulta, na maioria das vezes, de um processo de luta
encampado pelos trabalhadores, apoiados pelos respectivos sindicatos.

Esse processo, muitas vezes longo e penoso, é assumido, em geral, pelos
trabalhadores mais antigos, com menores chances de recolocação no mercado e que
atuam no chão de fábrica. Ainda assim, em cada caso, o grau de dificuldade
enfrentado dependerá, em última instância, de decisões da Justiça do Trabalho.

Essas experiências foram mais significativas no Brasil na década de 1990, em uma
época em que os postos de trabalho escasseavam em todo o mundo e vaticinava-se a
drástica e progressiva redução do emprego formal. No país, a mudança cambial e a
abertura comercial agravaram a situação. O movimento sindical brasileiro, que
nessa ocasião teve contato com a autogestão e o cooperativismo internacional,
incorporou essa bandeira à sua luta, com a perspectiva de preservar os postos de
trabalho e a renda dos empregados das empresas falidas.

Acreditando na importância econômica e social da manutenção do emprego e da
renda – função social da empresa – e considerando um desperdício permitir que
empresas com potencial produtivo encerrem suas atividades, Thiago Figueiredo
Fonseca Ribeiro, elaborou dissertação de mestrado em que discute a viabilidade
atual da autogestão dos trabalhadores como alternativa para a recuperação de
empresas falidas ou em processo falimentar no Brasil. O trabalho foi apresentado
ao Instituto de Economia (IE) da Unicamp, orientado pelo professor Rodrigo Lanna
Franco da Silveira.


Pontos de partida

Do ponto de vista microeconômico são analisadas as experiências de recuperação
de empresas em processo de autogestão dos trabalhadores e verificada sua
viabilidade. No sentido mais amplo, das políticas públicas, o autor procura
entender como outras experiências de autogestão dos anos 1990 desaguaram no
movimento da Economia Solidária e culminaram, em 2003, na criação da Secretaria
Nacional de Economia Solidaria (SENAES), ligada ao Ministério do Trabalho e
Emprego (MTE), que concentrou a maioria das ações públicas relativas ao tema.
Explicita as características e funções do órgão, explica os óbices que impediram
avanços na construção de uma política mais efetiva e analisa sua contribuição
para a recuperação de empresas autogestionárias.

Baseado em duas experiências empíricas, o autor procura responder a duas
perguntas básicas: a recuperação de empresas industriais falimentares, através
da organização do trabalho e dos trabalhadores de forma coletiva e
autogestionária (cooperativas), constitui-se em uma alternativa economicamente
viável? Em sendo positiva essa resposta, quais as possibilidades de se
reproduzir as experiências estudadas para a recuperação de outras empresas nos
dias atuais?

Para responder a estes questionamentos, ele estudou a evolução das políticas
públicas na construção das possíveis bases de sustentação para essas iniciativas
(apoio técnico, capacitação, marco legal e financiamento) e se concentrou em
duas experiências em andamento. Uma na Unipol (Cooperativa da Indústria de
Polímeros de Joinville), em Santa Catarina, e a outra na Metalcoop (Cooperativa
de Produção Industrial de Trabalhadores em Conformação de Metais), localizada em
Salto, interior de São Paulo.


Constatações

Thiago chega a duas conclusões importantes. Se por um lado, do ponto de vista
econômico, essa forma de organização é capaz de recuperar parte das empresas em
falência, por outro lado, não se conseguiu avançar no país, na última década,
nos aspectos que envolvem suas bases de sustentação. Em decorrência disso e
ainda do fato de hoje se desenvolver um novo ciclo econômico, com aumento de
postos de trabalho e de salários, a força política dos defensores dos modelos
alternativos se reduziu.

Para ele, perdeu-se o bonde da história e a oportunidade de avançar no estímulo
de iniciativas dessa natureza no Brasil. As taxas de sucesso relativamente
baixas dessas experiências decorrem das deficiências estruturais oriundas de
processos pelas quais passaram essas empresas ao serem recuperadas, agravadas
pela ausência de leis e financiamentos, de apoio técnico e de competência em
seus quadros. E constata: “Com poucos casos bem-sucedidos em andamento e em
vista do atual ciclo virtuoso de nossa economia nos últimos anos, o que se
verifica atualmente é um quadro de abandono dessas poucas experiências pelo
setor público e uma grande morosidade no trâmite de uma legislação condizente
com a realidade desses empreendimentos”.

Os estudos de caso, segundo o pesquisador, o credenciam a afirmar que os
trabalhadores são capazes de assumir os novos papeis e que o processo é viável:
“Embora olhados com descrença e sem apoio, os trabalhadores correm atrás do que
precisam, aprendem, estudam e dão conta da gestão. Um dos presidentes de uma das
cooperativas era estoquista, hoje tem MBA, senta-se à mesa com o BNDES. Tive
oportunidade de observar transformações realmente fenomenais e emocionantes
dentro do grupo dirigente”. Ele conta que na mesma empresa os diretores realizam
há onze anos uma gestão eficiente. Pagaram praticamente todo o passivo dos
trabalhadores que não permaneceram na cooperativa e compraram a massa falida com
fundo do BNDES, tornando-se assim, efetivamente, autogestores, já que isso
pressupõe, simultaneamente, a participação nos processos decisórios e à
propriedade dos meios de produção.

Os insucessos acompanham os empreendimentos que começam mal financeiramente e,
em decorrência, não conseguem se recuperar. Ele defende então uma boa análise
financeira inicial, oferta de linhas de crédito, apoio técnico em termos de
gestão, criação de legislação coerente, aspectos que poderiam ter sido
encaminhados pela SENAES, que encampou as políticas públicas de Economia
Solidária e a quem também estava afeta a recuperação de empresas.

A Secretaria iniciou um trabalho de diagnóstico, de legislação, mas avançou
pouco. No atual governo o ciclo negativo da economia se transformou em positivo,
passou-se do desemprego estrutural ao pleno emprego e a Economia Solidária, que
foi criada para pensar alternativas do modelo capitalista tradicional, perdeu
força. O modelo, que nasceu como resposta a uma crise e envolve um processo
duro, demorado, cansativo, estressante se exaure, porque não conta com apoio
público, não tem financiamento, não tem apoio técnico. O autor comenta com
tristeza: “A Economia Solidária volta à pauta na próxima crise de emprego com
tudo a construir”.



Dilemas

Para Thiago Ribeiro, mesmo com a maioria das variáveis examinadas conspirando
contra as possibilidades de sucesso das iniciativas de recuperação de empresas
pela autogestão dos trabalhadores, as experiências estudadas surpreendem pelos
resultados alcançados e pela capacidade de organização e gestão dos
trabalhadores envolvidos. “A manutenção dos postos de trabalho e a significativa
contribuição para o pagamento do passivo trabalhista das antigas empresas,
garantidos pelo arrendamento dos meios de produção, constituem fatores que
justificam o investimento de tempo e energia dedicados a essas experiências e
demonstram tratar-se de uma possibilidade concreta para o encaminhamento de
crises e recuperação de empresas falimentares”, enfatiza ele.

Embora o processo se mostre viável em casos particulares, atualmente apresenta
grande risco e exige enormes sacrifícios dos envolvidos, não configurando
alternativa com possibilidades de reprodução em termos de políticas públicas.

O pesquisador considera que o dilema está em conseguir com a autogestão maior
produtividade, eficiência, segurança e felicidade do que na empresa capitalista
convencional: “Essa é a luta, mesmo porque o mercado comprador continua o mesmo.
Pode haver um nicho de pessoas que se disponha a pagar um pouco mais por um
produto de uma empresa autogestionada, mas em geral o consumidor quer padrão e
qualidade por preço menor.”

Para o pesquisador, as empresas estudadas são tão boas ou melhores que as
concorrentes e por isso sobrevivem. Para ele “a Economia Solidária não está
criando um novo mundo, não está fazendo uma revolução operária. Está propiciando
a criação de um ambiente mais saudável, mais democrático, com melhores condições
de evolução pessoal”.

O estudo o leva a uma crítica ao fazer político no Brasil, que não constrói:
“Criamos uma Secretaria que não deu respostas aos problemas enfrentados pela
Economia Solidária e que se extinta não vai deixar praticamente nenhum legado”.
Considera, por sua vez, que o movimento popular também precisa realizar uma
autocrítica.

Na sua visão, as empresas em recuperação não deveriam estar no mesmo arcabouço
da Economia Solidária porque, face ao menor número, não têm expressão política
nem condições de influir em negociações. E conclui: “Cerca de 500 empresas em
recuperação não conseguem conversar com outras vinte mil que constituem o grupo,
com a agravante de que estas se dividem em grupos com interesses bem diversos,
do que resulta enfraquecimento do movimento”.

In
Carta Maior
http://www.cartamaior.com.br/?/Editoria/Economia/Pesquisa-da-Unicamp-revela-sucesso-de-empresas-sob-autogestao-de-trabalhadores/7/29561
17/11/2013