sexta-feira, 30 de setembro de 2016

El proyecto educativo de la nueva derecha




Raúl Zibechi

Ha nacido una nueva derecha adecuada a los tiempos extractivos y de
expolio-piratería contra los pueblos; una derecha posterior al Estado del
bienestar, que ya no aspira al desarrollo, sino a consolidar las desigualdades,
la segregación de la mitad pobre, mestiza, india y negra de nuestro continente.
Una derecha implacable formada en el rechazo a lo popular, a la soberanía
nacional, a las leyes y las constituciones.
En el terreno educativo, esa nueva derecha busca desembarazarse de los
anteriores compromisos, entre ellos la laicidad y la libertad de cátedra, para
adecuar el sistema educativo al periodo de guerra y confrontación que
atravesamos. El objetivo es retomar el control del conjunto del sistema
educativo, desde los ministerios hasta el aula, consolidando una educación
antiemancipatoria, en la que el control de la población es el objetivo casi
excluyente.
Hace 12 años nació en Brasil la organización no gubernamental Escuela Sin
Partido, muy activa en las redes sociales y los grandes medios, articulada con
diputados y concejales de los más diversos partidos para hacer aprobar sus
propuestas. En su página web (escolasempartido.org/) se puede acceder al
programa de seis puntos titulado Deberes de los profesores, en el que se destaca
que el profesor no promoverá en el aula sus propias ideas, ni perjudicará a los
alumnos que profesen ideas diferentes, ni hará propaganda político-partidaria se
limitará a exponer de forma neutra el programa, y otorga a los padres la
elección de la educación moral que quieren para sus hijos.
Algunos principios de Escuela Sin Partido parecen compartibles. Sin embargo,
conllevan objetivos que nos hacen retroceder más de un siglo. Por un lado,
disocia entre el acto de educar y el de instruir. Para ellos la educación es
responsabilidad de la familia y la iglesia, mientras los profesores deben
limitarse a instruir, o sea a trasmitir conocimiento como si éste fuera neutro,
ahistórico, descontextualizado.
La segunda es lo que consideran como adoctrinamiento en el aula. Hablar sobre
feminismo, homofobia o derechos reproductivos, por ejemplo, sería tanto como
imponer una ideología de género en las escuelas. Todo lo que sea desviarse de la
asignatura se considera adoctrinamiento, situación que en los proyectos de ley
que ha presentado Escuela Sin Partido en varios municipios y en parlamentos de
los estados sería tipificada como crimen de acoso ideológico y abuso de
autoridad, punibles con cárcel y penas agravadas.
En el apartado capturando al adoctrinador, en su web, aparece una larga lista de
situaciones comunes en las aulas, como difamar personalidades históricas,
políticas o religiosas, entre muchas otras. El docente debería mencionar a
Hitler, Pinochet o Mussolini sin más, como a cualquier otra personalidad, sin
establecer diferencias, dejando a los padres la exclusividad de opinar. Lo mismo
respecto a los genocidios, los feminicidios y así, porque está rigurosamente
prohibido mentar valores. Consideran que los debates sobre diversidad sexual,
contemplados en las currículas de muchos países, serían en este caso
inconstitucionales.

Una de las prácticas más graves promovidas por Escuela Sin Partido es el
espionaje de la práctica docente para luego denunciarla. Bajo el epígrafe
Planifique su denuncia, pide a los alumnos y a sus padres que anoten
cuidadosamente o filmen los momentos en los cuales el docente estaría
adoctrinando a los alumnos. Promueven actitudes que llevan a los jóvenes a
convertirse en policías de los docentes.
Uno de los objetivos centrales de la nueva derecha en el terreno educativo es la
descalificación de los docentes que serían culpables de todos los males de la
educación, desde el fracaso escolar hasta la baja calidad de la enseñanza. De
ese modo consiguen desviar la atención de los problemas estructurales en la
educación, focalizando sólo las consecuencias y ocultando sus causas. El
profesor siempre es sospechoso de izquierdismo. En paralelo, consideran que los
alumnos no tienen capacidad para formar sus propias convicciones y que deben
estar sujetos a la autoridad paterna, eclesial o docente.
Como era de esperar, los profesores han reaccionado con campañas de denuncia del
proyecto, que ya fue aprobado en el estado de Alagoas, Brasil, y será abordado
en otros. Pero no debemos olvidar que lo que se proponen en esta coyuntura, no
sólo en Brasil, es frenar en seco al creciente movimiento estudiantil, en
particular a los estudiantes de secundaria, que son los menos susceptibles de
ser cooptados por las instituciones estatales y de la izquierda electoral.
En efecto, la crisis política brasileña está modelada por las movilizaciones de
junio de 2013; una crisis que está lejos de haberse cerrado con la destitución
ilegítima de la presidenta Dilma Rousseff. Incluso Chile, el régimen neoliberal
modélico por su estabilidad, atraviesa una crisis de legitimidad a consecuencia
del potente movimiento estudiantil, que desde 2011 abrió brechas por las que
están pasando diversos actores sociales. Uno de los más importantes empresarios,
Andrónico Luksic, reconoce que el país se está cayendo y destaca el papel del
movimiento por la educación en esta crisis (goo.gl/qpXIsA).
En otros países sucede algo similar. En Paraguay los estudiantes se mostraron
como un actor potente en pleno gobierno reaccionario de Horacio Cartes. Nuevas
camadas de jóvenes rebeldes están presentes en casi todos los países. Ni qué
hablar de México, después del parteaguas que fue Ayotzinapa.
Buena parte de los objetivos que se propone Escuela Sin Partido en Brasil
parecen utopías de orden que cuentan con escasos apoyos. Sin embargo, no se los
debe subestimar. Cuando las crisis políticas se profundizan, aparecen potentes
bifurcaciones; la derecha se quita el velo para mostrarse como lo que es: el
partido del orden, dispuesto a pasar por encima de todo. Son las izquierdas las
que deben decidir si optan por las instituciones o por acompañar las
resistencias.
In
LA JORNADA
http://www.jornada.unam.mx/2016/09/29/opinion/019a1pol
29/9/2016

Os Físicos europeus põem em causa a versão oficial do 11-de-Setembro




Rede Voltaire

Desde há quinze anos peritos pagos pelo governo federal norte-americano
asseguram que o colapso das Torres Gémeas e da Torre 7 do World Trade Center, a
11 de Setembro de 2001, são imputáveis à projeção de dois aviões comerciais
sobre as duas primeiras torres.
A prestigiosa European Physical Society (Sociedade de Física Europeia- ndT) não
entende o mesmo. Ela acaba de publicar, na sua revista European Physics News, um
artigo de Steven Jones, Robert Korol, Anthony Szamboti e Ted Walter, pondo em
evidência que se tratou de um caso de demolição controlada.
Tradução
Alva

In
REDE VOLTAIRE
http://www.voltairenet.org/article193372.html
20/9/2016

quinta-feira, 29 de setembro de 2016

Crise: algumas perguntas e respostas


 

       por Jorge Figueiredo 

       Pode haver um capitalismo sem crises? 

       Não, as crises periódicas, ou crises de conjuntura, são inerentes ao modo
      de produção capitalista. Trata-se de um assunto já bem estudado pelos mais
      diversos autores, inclusive Marx.

       A presente crise económica é conjuntural? 

       Não, a presente crise é estrutural. Ela tem um carácter sistémico.
       Já houve outras crises estruturais na história do capitalismo? 
       Sim, no passado verificaram-se crises de natureza estrutural, como as de
       1880-1890, 1913 e 1929-1939.

       O que desencadeia uma crise capitalista de natureza estrutural? 

       Em síntese, a crise é desencadeada por uma acumulação excessiva de
      Capital Fictício, a qual tem origem na queda da taxa de lucro obtida nas
      actividades produtivas da economia real. A queda da taxa de lucro é
      provocada basicamente pelo aumento da composição orgânica do capital
      (rácio capital constante/capital variável).

       O que é Capital Fictício? 

       Trata-se do capital investido em títulos de crédito, tanto os clássicos
      (acções, obrigações, debentures, etc) como os modernos inventados
      recentemente (derivativos de toda espécie, como as CDOs, CDSs, MBSs, etc).
      O montante do capital fictício ultrapassa em muito o do capital real. Ver 
      Capital Fictício

       Uma crise estrutural pode ser resolvida rapidamente? 

       Não, a saída de uma crise estrutural exige que o capital fictício
      acumulado seja  destruído.  A referida destruição não pode ocorrer
      rapidamente. Enquanto não for realizada haverá um período de estagnação,
      ou depressão, que pode perdurar por muitos anos.
       A estagnação é uma anomalia no modo de produção capitalista? 
       Como demonstrou Paul Sweezy, na sua fase monopolista a estagnação é uma
      característica inerente ao capitalismo. Assim, o que precisa ser explicado
      é a razão porque há crescimento e não porque há estagnação. Ver
       Capitalismo monopolista,  de Paul Baran e Paul Sweezy.

       Como se manifesta o Capital Fictício? 

       Manifesta-se na acumulação de dívidas por toda a sociedade (bancos,
      empresas, famílias e governos). A maior parte destas dívidas é impagável.
       A destruição de capital fictício já verificada desde 2008 não foi
      suficiente? 
       Ainda não. Após a falência do Lehman Brothers os demais bancos sistémicos
      foram salvos pelos Estados respectivos através de medidas como as
      facilidades quantitativas, bail-outs e bail-in (no caso de Chipre).
       Actualmente há outros bancos "sistémicos" na fila de espera (Deutsche
      Bank, Commerzbank, Monte Paschi, etc).

       Como foi a saída de crises estruturais anteriores do capitalismo? 

       A crise iniciada em 1929 só acabou com o início da II Guerra Mundial.
      Nesse caso verificou-se não só destruição de capital fictício como também
      de uma quantidade enorme de activos fixos, o que proporcionou um novo
      ciclo de acumulação. A crise do fim do século XIX acabou sem guerra, após
      a destruição (que levou dez anos) do capital fictício que fora acumulado.

       Quais os desenlaces possíveis de uma crise estrutural? 

       Assumindo que não haja guerra nuclear, as principais saídas de uma crise
      estrutural ao longo do tempo podem ser em V, em L, em W, em raiz quadrada,
      em raiz ondulante, conforme os gráficos respectivos. Para mais pormenores
      ver  Crises, os desenlaces possíveis.

       Pode um país sair individualmente de uma crise estrutural? 

       Sim, se tiver forças, lucidez, um governo digno e unidade popular. Para
      isso será preciso romper com o capital monopolista e financeiro. Isso
      implica o repúdio da sua dívida externa (pelo menos da parte odiosa), a
       recuperação da sua soberania monetária, o abandono de organizações
      imperialistas (UE, FMI, OMC, ...), a emissão de moeda pelo próprio governo
      (de modo a que este não tenha de ser endividar permanentemente junto a
      banqueiros privados) e a construção de uma economia que sirva o povo e não
      o capital financeiro.

       Algum país já repudiou a sua dívida externa?

       Sim, há muitos exemplos históricos. Eis alguns:
       Em 1776 os Estados Unidos repudiaram a sua dívida para com a Inglaterra.
       O México repudiou alguns pagamentos de dívida em 1867, 1914 e 1946.
       Em 1870, após a guerra civil, o governo federal dos EUA repudiou dívidas
      a bancos sulistas.
       Em 1898 Cuba repudiou dívidas a bancos espanhóis, consideradas odiosas.
       Em 1912 a Turquia ganhou num Tribunal Arbitral o processo referente ao
      seu repúdio à dívida para com a Rússia czarista.
       Em 1918 a Rússia repudiou a dívida czarista, particularmente aquela
      acumulada com a I Guerra Mundial.
       Em 1919 um novo governo da Costa Rica considerou ilegítima a dívida de
      governos anteriores e consequentemente pediu a sua anulação, o que foi
      devidamente assegurado num tribunal dos EUA.
       Em 1919 o Tratado de Versalhes isentou a Polónia da dívida acumulada para
      com a Alemanha durante a I Guerra Mundial.
       Em 1931 o Brasil anulou grande parte da sua dívida externa após uma
      auditoria conduzida pelo ministro Osvaldo Aranha.
       Na década de 1930 treze outros países latino-americanos repudiaram
      dívidas que consideraram ilegítimas.
       Em 1953 o  Acordo de Londres cancelou 51% da dívida da Alemanha acumulada
       durante a II Guerra Mundial. Foi acordado ali que o serviço da dívida que
      ultrapassasse 3,5% das receitas de exportação não teria de ser pago. Este
      cancelamento foi a chave para o crescimento da economia alemã.
       Em 1959, a seguir à Revolução, Cuba repudiou a dívida da ditadura de
      Batista.
       O governo pós-apartheid da África do Sul cancelou dívidas da Namíbia e de
      Moçambique para com o antigo regime racista.
       Em 2002, em meio à recessão provocada pelos empréstimos e políticas do
      FMI, o governo da Argentina anunciou a maior suspensão de pagamentos de
      dívida da história, no montante de US$80 mil milhões. Durante os anos
      seguintes a economia argentina cresceu a taxas de 8 a 9% ao ano.
       Sob a ocupação dos EUA, a dívida nacional do Iraque (US$125 mil milhões)
      foi renegociada tendo sida reduzida em mais de 80%.

In
RESISTIR.INFO
http://resistir.info/jf/crise_faq.html
29/9/2016

terça-feira, 27 de setembro de 2016

Estancamiento secular




Immanuel Wallerstein

Los economistas del mundo están batallando con algo nuevo que les es muy difícil
explicar. ¿Por qué es que los precios del mercado de valores han continuado
subiendo pese al hecho de que algo conocido como crecimiento parece estar
estancado? En la teoría económica dominante no se supone que funcione de tal
modo. Si no hay crecimiento, los precios del mercado deberían declinar,
estimulando por tanto el crecimiento. Y cuando se recupera el crecimiento,
entonces los precios del mercado vuelven a subir.
Todos aquellos que son fieles a esta teorización dicen que la anomalía es una
aberración momentánea. Algunos niegan incluso que sea cierto. Pero hay otros que
consideran la anomalía un desafío importante a la teorización dominante. Buscan
revisar la teorización para que tome en cuenta lo que muchos ahora llaman
estancamiento secular. Los críticos incluyen a prominentes personas, algunos de
ellos laureados con el Premio Nobel. Incluyen pensadores tan diferentes como
Amartya Sen. Joseph Stiglitz, Paul Krugman y Stephen Roach.
Aunque cada una de estas personas tiene una diferente línea de argumentos,
comparten algunas creencias. Todos ellos consideran que lo que hagan los Estados
tiene un impacto grande en lo que ocurre. Todos ellos consideran que la
situación actual es poco sana para la economía como un todo y ha contribuido a
un incremento signifi- cativo en la polarización del ingreso real. Todos ellos
consideran que se debe intentar movilizar la opinión pública para ponerle
presión a las autoridades gubernamentales para que actúen formas específicas. Y
todos ellos consideran que aunque continuara la actual situación anómala y poco
sana todavía algún tiempo, existen políticas estatales apropiadas que harán
posible una economía menos polarizada y más sana.
Hace no tanto, el estancamiento secular fue un término utilizado por muchos
analistas, primordialmente para describir el estado de la economía japonesa, al
comienzo de los años 90 del siglo XX. Pero desde 2008 el uso del concepto se ha
aplicado a diversas regiones –miembros de la zona del euro, como Grecia, Italia
e Irlanda; Estados ricos en petróleo, como Rusia, Venezuela y Brasil;
recientemente también Estados Unidos, y potencialmente actores económicos
previamente fuertes como China o Alemania.
Uno de los problemas de quienes buscan entender lo que está ocurriendo es que
diferentes analistas utilizan diferentes geografías y diferentes calendarios.
Algunos hablan de la situación Estado por Estado y algunos intentan evaluar la
situación en la economía-mundo como un todo. Algunos piensan que el
estancamiento secular comenzó en 2008; otros dicen que fue en la década de los
90. Otros más piensan que viene de finales de los 60, y unos cuantos más la
sitúan aun antes.
Déjenme proponerles una vez más otro modo de entender el estancamiento secular.
La economía-mundo capitalista ha existido en partes del globo desde el siglo
XVI. Yo le he llamado el sistema-mundo moderno. Se ha expandido de un modo
constante en lo geográfico terminando por abarcar el mundo entero desde mediados
del siglo XIX. Ha sido un sistema muy exitoso en términos de su principio
rector: la interminable acumulación de capital. Es decir, la búsqueda de
acumular capital de modo de acumular más capital aún.
El moderno sistema-mundo, como todos los sistemas, fluctúa. También tiene
mecanismos que limitan las fluctuaciones y lo empujan hacia un renovado
equilibrio. Esto semeja un ciclo de altas y bajas. El único problema es que las
caídas nunca retornan al punto bajo previo, sino a uno un poco más alto. Esto se
debe a que en el complejo patrón institucional hay resistencia a ir hasta el
fondo. La forma real de los ritmos cíclicos es dos pasos hacia arriba y un paso
hacia abajo. Por tanto, el punto de equilibrio se mueve.

Si uno mide la abscisa de las tendencias, se mueven hacia una asíntota de 100
por ciento, que por supuesto no pueden cruzar. Un poco antes de dicho punto
(digamos, cerca del 80 por ciento), las curvas comienzan a fluctuar alocadas.
Esto es señal de que nos hemos movido al interior de la crisis estructural del
sistema. Se bifurca, lo que quiere decir que son dos diferentes, casi opuestos,
modos de optar por un sistema sucesor (o sistemas). Lo único que no es posible,
es hacer que el actual sistema opere del modo normal anterior.
Mientras que antes de ese punto los grandes esfuerzos por transformar el sistema
tuvieron como efecto pocos cambios, ahora lo opuesto es cierto. Cada pequeño
esfuerzo por cambiar el sistema tiene un gran impacto. Es mi argumento que el
sistema-mundo moderno entró en su crisis estructural cerca de 1970 y se
mantendrá en ella todavía otros 20-40 años más. Si deseamos evaluar las acciones
útiles, necesitamos tener en cuenta dos temporalidades diferentes: el corto
plazo (a lo sumo tres años) y el mediano plazo.
A corto plazo lo que podemos hacer es minimizar el sufrimiento de quienes son
los más afectados negativamente por la creciente polarización en el ingreso que
está ocurriendo. La gente vive en el corto plazo y necesita alivio inmediato.
Sin embargo, tal alivio no cambiará el sistema. El cambio puede ocurrir a
mediano plazo conforme los que favorecen una clase u otra de sistema sucesor
obtienen la suficiente fuerza para inclinar la bifurcación hacia su propia
dirección.
He aquí el peligro de no ir lo suficientemente lejos en el análisis crítico del
sistema. Sólo si uno mira con claridad que no hay salida del estancamiento
persistente uno puede de hecho volverse lo suficientemente fuerte para ganar la
batalla política y moral.
Una punta de la bifurcación pugna por remplazar el capitalismo por otro sistema
que será tan malo o más que el anterior, manteniendo los rasgos cruciales de
jerarquía, explotación y polarización. La otra punta pugna por un nuevo sistema
que sea relativamente igualitario y relativamente democrático.
En los años por venir, habrá vueltas que parezcan indicar que el sistema vuelve
a funcionar. Puede incluso subir el nivel de empleo en el sistema como un todo
(la medida clave del estado del sistema). Pero tal alza no podrá durar mucho,
porque la situación global es demasiado caótica. Y el caos paraliza la presteza
de los poderosos emprendedores y de las personas simples por igual, en lo
tocante a gastar el capital remanente en formas que tienen el riesgo de pérdida
y, por tanto, de su supervivencia.
Estamos en un alocado viaje, uno que no es nada placentero. Si nos hemos de
comportar con sensatez, el primer requisito es la claridad de análisis, seguida
de decisiones morales y juicio político. El fondo del asunto es que ya hace
mucho rebasamos el punto en que el capitalismo como sistema histórico pueda
sobrevivir.
Traducción: Ramón Vera Herrera
In
LA JORNADA
http://www.jornada.unam.mx/2016/09/25/opinion/026a1mun
25/9/2016

segunda-feira, 26 de setembro de 2016

O desastre macriano na Argentina será o Brasil de amanhã?



Restauração neoliberal de Macri provoca recessão, desemprego e disparada de
preços. Popularidade despenca e apenas a grande mídia comemora. Será o futuro de
Temer?
por Cauê Ameni e Hugo Albuquerque


Macri em fórum de investimento em Buenos Aires, em 15 de setembro: ele
representa a volta do neoliberalismo

Era para ter sido só mais uma sexta-feira de inverno em Mar del Plata. Tudo se
resolveria com um discurso simples, recheado de lugares comuns e uma partida
tranquila. Contudo, Maurício Macri, presidente da Argentina, não conseguiu
discursar mais do que dez minutos. Ele não resistiu às – nada metafóricas –
pedradas desferidas pela multidão aos gritos de “Macri, basura [lixo], vos sos
la ditadura”. O líder argentino encerrou seu breve discurso e entrou rapidamente
no carro oficial, cercado pelos manifestantes.
Qualquer semelhança com o sumiço do então “presidente” Michel Temer, que quebrou
o protocolo ao pedir que seu nome não fosse anunciado na abertura das Olimpíadas
e seu desaparecimento no encerramento, além das vaias ensurdecedoras na abertura
das Paraolimpíadas, não são meras coincidências.
Macri chegou ao poder prometendo reduzir a inflação, a pobreza e o desemprego,
além de tentar acalmar os ânimos na polarização política. Entretanto, os
primeiros efeitos são exatamente o contrário. Embora esteja no poder em virtude
do voto, representa setores com agendas políticas parecidas às que aqui
sustentam Temer. Como chegou ao poder um pouco antes, a Argentina já sente o
peso das medidas de austeridade mais claramente.
Enquanto os manifestantes brasileiros tiveram seus cartazes de protesto caçados
dentro dos estádios e são recebidos com cassetetes nas ruas por se oporem ao
processo de impeachment, os manifestantes argentinos reagem à repressão.
Organizações em defesa de perseguidos e desaparecidos políticos na ditadura
conduzem atos enormes de resistência na esteira do rumoroso caso da tentativa de
prisão de Hebe de Bonafini, líder das mães da praça de maio – em 4 de agosto
último, resultando em um rotundo fracasso e consequente desmoralização das
forças da repressão locais.

Além disso, para colocar mais gasolina na fogueira, aliados de Macri estão
relativizando a cifra de mortos da última ditadura e tribunais agora começam a
liberar repressores da ditadura.
Várias perguntas se insurgem sobre a atual conjuntura: o que significa a
presença de Macri no poder para a Argentina e para a América Latina? O que
explicaria tamanha fúria contra um jovem presidente, eleito como novidade, com
apenas nove meses de mandato? As suas políticas econômicas estão sendo mal
compreendidas? Qual a real situação argentina? Seria a Argentina a imagem do
Brasil e da América Latina de amanhã?

Macri: a “novidade” contra atípica estabilidade da Era Kirchner
Eleito em 2015, Macri conseguiu a “proeza” de se tornar o primeiro candidato
neoliberal a presidir a Argentina depois da catástrofe social, econômica e
política que explodiu naquele país em 2001, quando cinco presidentes passaram
pela Casa Rosada, sede do poder argentino, em poucas semanas – consequência
deflagrada diretamente pelas políticas neoliberais que afundaram o país naquela
ocasião.
Dali em diante, e com a prosperidade socioeconômica iniciada nos doze anos de
governos do casal Néstor e Cristina Kirchner (2003-2015), parecia ser muito
difícil que a direita neoliberal voltasse ao poder. Sobretudo por não ter havido
nenhuma crise relevante, mesmo nos maus momentos do Kirchnerismo – levando em
consideração que a grande crise argentina de 2001 contudo, não foi nem a única,
nem a mais trágica dos últimos cem anos naquele país.
A era kirchnerista (2003-2015) foi um dos períodos de maior estabilidade –
política, mas também econômica – da história argentina. Quase uma ilha pacifica
em meio a um mar turbulento. Desde que o sufrágio universal foi instituído
naquele país, pela Lei Sáenz Peña, em 1912, não demorou muito para que os
problemas aparecessem: já em 1930 os argentinos se viram diante do primeiro dos
cinco golpes militares – totalizando 25 anos de regimes militares de corte
fascista.
Filho da elite argentina, ex-presidente do Boca Juniors, ex-prefeito de Buenos
Aires, Macri pode ser tudo, menos um elemento novo na política de seu país ou da
América Latina. Contudo ele conseguiu ser vendido com ares de novo,
eleitoralmente, por uma razão episódica: sem nunca ter sido militar e não vir de
nenhum dos dois principais partidos da Argentina moderna, seus marqueteiros
conseguiram maquiar sua biografia.
Vitorioso em segundo turno contra o moderado Daniel Scioli – candidato peronista
apoiado, de maneira não muito animada, por Cristina Kirchner – Macri teve um
êxito eleitoral apertadíssimo (51,34% contra 48,66% do rival) o exato mesmo
placar com o qual Dilma Rousseff bateu seu rival Aécio Neves em 2014 – e um
pouco mais do que Maduro bateu Henrique Capriles em 2013 na Venezuela (na
ocasião, 50,61% a 49,12%). Nos casos brasileiro e venezuelano, o ponteiro das
urnas continuou inclinado para o campo popular, mas no caso argentino ele
pendulou a favor das elites.
Depois de anos de constituição de direitos, como a legalização do casamento
homoafetivo, o enfrentamento do legado militar, uma lei que *regulamentou* o
setor midiático e a realização de eleições regulares, o discurso de Macri
explorou o esgotamento do ciclo progressista e um suposto mau momento econômico.
Sem registrar a ocorrência de nenhum desastre político à moda Argentina, a tese
do desgaste de Cristina em virtude da situação econômica poderia ser uma
explicação plausível. Mas a pergunta de facto é: até que ponto Macri teria razão
nisso, qual a real gravidade da situação econômica argentina em 2015?
A economia argentina sob kircherinismo desestabilizou o país? Plano Macri seria
a solução?

O gráfico acima é um resumo do crescimento do PIB argentino desde 1961. Os altos
e os baixos lembram a melancolia de um tango: da ribalta à sarjeta em uma mesma
vida. Não foram poucas as vezes que a economia argentina foi do céu ao inferno
em um curtíssimo espaço de tempo. Na era kirchnerista, contudo, o PIB jamais
caiu, em que pesem os últimos anos de Cristina serem marcados por uma
desaceleração do crescimento – movido, sobretudo, pela queda nos preços
internacionais das commodities.
A mídia, que viu seu monopólio ameaçado com a Ley de Medios, e Macri, contudo,
conseguiram convencer os argentinos da suposta gravidade da situação econômica
do país e, não só, sutilmente deixar no ar que seriam necessários ajustes.
Scioli, o candidato peronista, tampouco parecia ter desenvoltura para explicar a
queda do ritmo de crescimento ou, quem sabe, defender o modelo socioeconômico
que, por sinal, não era exatamente o seu – Scioli é uma cria do menemismo,
vertente neoliberal do peronismo, referente ao ex-presidente Carlos Menem
(1989-1999).
Visto em conjunto, o período kirchnerista, sob a ótica econômica, registrou uma
média de crescimento anual de 5,2% – tendo uma sequência em torno de 9% nos
mandatos de Néstor; a taxa de desemprego despencou de 20% no fim de 2002 para 6%
no final de 2015 – com queda de 87% na desigualdade salarial e uma valorização
salarial, em termos reais, de mais de 70%.
A balança comercial se manteve superavitária, a exportação chegou a quadruplicar
em 2011 – indo de 25 bilhões de dólares em 2002 para 84 bilhões dólares. Ano em
que o PIB per capita atingiu 17.376 dólares, o maior na América Latina. Em 2015,
o país teve seu primeiro déficit na balança comercial depois de 15 anos, mas,
mesmo assim, manteve o crescimento do PIB em 2,4%.
Do ponto de vista social, a pobreza recuou severamente: de 57,8% nos anos da
crise para apenas 29% no último ano de Cristina Kirchner no poder. A
desigualdade social seguiu um rumo de queda muito acentuado depois de ter
atingido seu auge, não por caso, em virtude da crise de 2001 – na qual os mais
pobres, evidentemente, sofreram mais do que os mais ricos.
Ponto polêmico, a inflação foi controlada, despencou de 40% em 2002 para metade,
chegando a 8% no último ano do mandato de Nestor. Embora tenha se elevado
posteriormente, tendo uma média de 13,3% nos governos da Cristina, criou-se uma
celeuma entre o governo Kirchner e a oposição, que acusava o governo de maquiar
dados – muito embora a legislação e a atuação governamental, inclusive nas
articulações junto aos sindicatos, sempre garantissem reposições salariais.
Concretamente, a economia argentina passou a crescer menos nos últimos anos de
Cristina. Macri tinha esse flanco e a inflação, ainda que com seus efeitos
contidos pelas políticas de Cristina. A crise foi desenhada, vendida e, ao final
do processo eleitoral, comprada pelo eleitorado argentino, ainda que por uma
pequena vantagem. Agora, era hora da nova etapa, quando o discurso de Macri iria
encontrar a realidade prática.
A “solução” macriana
As primeiras atitudes de Macri no governo foram surpreendentes para muitos
argentinos: ao contrário de resolver pragmática e gradualmente os problemas, da
“grande crise” que ele e seus marqueteiros criaram, ele construiu um cavalo de
troia para mudar o modelo econômico; apostou todas as fichas em uma mudança
completa do modelo econômico do país, dando um enorme cavalo de pau,
independentemente do custo que isso tivesse.
Noves meses depois das promessas, Macri, que propagandeava a retomada da
economia e o crescimento de 1% em 2016, vai ter de se contentar com a queda de
1%. Basicamente, algumas das mudanças radicais que ele promoveu foram a violenta
e abrupta desvalorização do peso argentino (30% já em dezembro) e os cortes nos
subsídios implantados durante o kircherismo.
Em outras palavras, promoveu um verdadeiro tarifaço: 400% nas contas do gás; nas
tarifas de energia houve um aumento de 300%, chegando em alguns casos a 700%; o
aumento na água oscilou de 216% a 375%; o combustível aumentou 35% acumulados
desde dezembro; e o preço do transporte público teve um aumento de 100%.

A sanha de cortar sem anestesia para “reduzir o estado” foi tanta que o governo
chegou ao ponto de cortar 160 remédios distribuídos para aposentados e
pensionistas.
Ambas as medidas, com fulcro em aumentar os ganhos de concessionários e grandes
detentores de dólares, fizeram, irônica e justamente, inflação disparar,
alcançando a casa de 46%, a mais alta desde 1991 – ao fim do governo Cristina, a
mesma taxa estava em 25% há oito meses.
Ironicamente, o governo Macri insiste em dizer que a inflação é menor do que a
acusada pelos órgãos independentes, a mesma prática que ele condenava na
antecessora. Por outro lado, o governo tem sido duro nas negociações salariais,
não repondo as perdas com a inflação – o que torna o problema inflacionário
muitíssimo maior.
Ainda, com a retração do consumo interno (o gasto médio de compra caiu 26,5%) e
o baixo preço das commodities – sejam os derivados de gás e petróleo ou mesmo os
produtos agrícolas –, além da incerteza sobre qual será o novo desenho da
economia argentina, que está bem no meio de um cavalo de pau, fez com que o
crescimento desacelerasse: nos três primeiros trimestres de 2016 a economia caiu
em um ritmo cada vez mais acelerado, sugerindo um desempenho negativo no final
do ano, o primeiro desde 2001.
Segundo a consultora Scentia, alguns setores da economia foram fortemente
golpeados pelo aprofundamento da recessão: a atividade na construção civil caiu
19,6% e a indústria recuou 6,5%. Segundo os sindicatos, até junho foram
demitidos 200 mil assalariados. E, para piorar, Macri vetou uma lei
antidemissões.
Como consequência, com o avanço da inflação afetando os trabalhadores –
duplamente, pelo avanço objetivo das tarifas de serviços públicos e como isso
aumenta o preço de outras mercadorias por irradiação – e a desvalorização do
peso favorecendo os mais ricos – que detinham reservas em dólares – verifica-se
um desaquecimento geral que fez o desemprego saltar de 5,9% para 9,3% sob Macri.
Ademais, estudos comprovam que neste curto período mais de um milhão de
argentinos entraram na linha de pobreza – que agora chega a 34,5% da população.
A popularidade do novo governo também despencou. Ao tomar posse, em 10 de
dezembro, Macri contava com 63%. Hoje, segundo a pesquisa da M&F de agosto,
apenas 43,1% dos argentinos o aprovam, contra 42,6% que desaprovam. E 43%
esperam uma situação econômica pior nos próximos meses.
A política neoliberal ortodoxa de Macri conseguiu destruir até hábitos
arraigados entre os argentinos: os churrascos se tornaram vaga lembrança quando
preço da carne dobrou. A combinação dos efeitos cruzados da restauração da
economia neoliberal e a repressão – necessária para garantir a implementação
dessa Doutrina de Choque, mas também dissuasória – não estão isoladas de um
contexto internacional turbulento, o qual também está conectado com fenômenos
paralelos na América Latina – mas o que representaria, do ponto de vista
institucional, a volta da arte de governo neoliberal no cenário pós-inclusão
social dos últimos anos?
Restauração neoliberal na América Latina, com as bençãos de Washington
Macri, é verdade, veio num momento no qual as experiências de esquerda popular
da América Latina estavam em fase de declínio – do radical Chavismo ao brando
Lulismo, as quais nasceram da resposta ao neoliberalismo dos anos 1990. Nesse
sentido, Macri é o marco de uma indisfarçável restauração construída sob um véu
clean e moderado de mudança.
Não que os governos populares, em que pesem suas inúmeras e relevantes
conquistas, não tenham igualmente falhado: fiaram seus planos e projetos nos
altos preços das commodities – sobretudo, do petróleo – enquanto supuseram que
grandes economias “nacionais” poderiam dar conta de superar ou mesmo enterrar
definitivamente o neoliberalismo ou, de maneira ambiciosa, as contradições entre
as classes.
A economia extrativista, pouco preocupada com a natureza e pouco centrada na
criação e inovação, indispôs os governos populares com suas bases, mas também
encontrou seu limiar econômico com a queda do preço do petróleo, em grande
medida pela política americana no Oriente Médio: daí, surgiu um verdadeiro
efeito dominó que, a priori, pôs as elites em desespero pela perspectiva de
arcarem com algum custo dessa crise.
Como se sabe, a oportunidade é a mãe da invenção. As oligarquias tradicionais
sul-americanas, nesse contexto, fabricaram e implementaram um plano arriscado:
remover a todo custo os governos populares para, assim, empossar governos
dispostos a implementar políticas de “ajuste” que se apliquem apenas sobre os
trabalhadores e os mais pobres.
De maneira coordenada, se viu na Venezuela, no Brasil e na Argentina o
surgimento de candidaturas dessa nova direita quase idênticas: Capriles, Aécio e
Macri – embora só o último tenha vencido uma eleição para dar mostras do que
poderiam ser os dois outros.
A novíssima direita sul-americana apresenta líderes que contrastam sua estética
moderada com, ironicamente, um marxismo às avessas na prática: a defesa de
políticas radicais assentadas em um sujeito político classista – não os
trabalhadores, mas a oligarquia –, a ação antagônica e nenhuma disposição à
conciliação.
Na Venezuela e no Brasil, o jogo eleitoral agressivo foi continuado, após a
derrota da direita, com uma pressão para deslegitimar a qualquer custo os
líderes democraticamente eleitos. No Brasil, esse movimento chegou ao golpe
branco implementado contra Dilma Rousseff. Na Venezuela, a polarização nas ruas
e a busca pela revogação do mandato de Maduro não difere em nada.
A aparente normalidade institucional da chegada ao poder de Macri é, portanto,
episódica e não uma questão de princípio. Materialmente, a política de Macri é a
de Capriles e a de Aécio – e agora a de Temer, vice de Dilma que chega ao poder
após uma manobra parlamentar para aplicar, tragicamente, o programa chumbado nas
urnas pelos eleitores brasileiros em 2014.
Ainda, o arranjo de direita na América do Sul marca a volta da velha aliança à
geopolítica dos Estados Unidos – como sugere a nada inocente visita de Obama à
Argentina, durante o processo de impeachment de Dilma, para acordar a abertura
de duas bases norte-americanas com Macri. Essa recentíssima investida
neoliberal, por sinal, reforça a histórica aliança entre as oligarquias
latino-americanas e a ação militar burocrática dos Estados Unidos.
Os discursos assentados na correção técnica dos erros dos governos populares,
desse modo, logo se desmontam ao se defrontarem com os dados, assim que os
neoliberais voltam ao poder: no caso argentino, os indicadores pioraram com
Macri, mas isso pouca importa, visto que o objetivo desde o começo sempre foi
uma mudança do modelo socioeconômico.
Nesse sentido, uma escalada repressiva passa a fazer todo sentido – como no caso
de Hebe de Bonafini, mas também na ameaça inquisitória contra Cristina Kirchner
–, pois isso não é apenas uma forma de conter a contestação social, mas também
de literalmente desviar o foco da opinião pública sobre os efeitos desastrosos
dessa restauração.
Por ora, Macri passa a usar uma blindagem também nos seus carros oficiais – em
virtude da celeuma de Mar del Plata, que deu início a este ensaio – a qual se
somar a todas as demais blindagens simbólicas e midiáticas que lhe protegem –
mesmo assim, sua popularidade chegou em agosto ao mais baixo ponto de sua breve
presidência, lançando dúvidas até onde ele poderá e terá coragem de ir.
A única certeza, além do derretimento dos indicadores sociais e econômicos
argentinos, é que aquele país é a imagem do futuro próximo que assombra a
América do Sul – o Brasil de Temer sobretudo.

Cauê Seignemartin Ameni é sociólogo formado pela PUC-SP. Editor de Outras
Palavras, subeditor no De Olho Nos Ruralistas e editor da editora Autonomia
Literária.
Hugo Albuquerque é jurista, mestre em Direito Constitucional pela PUC-SP, sócio
da Saccomani, Albuquerque & Biral Sociedade de Advogados e editor da editora
Autonomia Literária.
In
CARTA CAPITAL
http://www.cartacapital.com.br/blogs/outras-palavras/o-desastre-macriano-na-argentina-sera-o-brasil-de-amanha
23/9/2016

sábado, 24 de setembro de 2016

50 anos de trabalho para se aposentar. Vem aí outro desmentido da verdade.


Por Fernando Brito

Claro que vai ter outro “desmentido”. Ou outro “Temer recua”. Ou “é boato”.
Conversa fiada.
Vão “cozinhar o galo”, enquanto as pessoas não começando a achar que “piorar
menos” é o mesmo que melhorar.
Mas alguém acha que a Folha ia tirar do nada a manchete que diz que a reforma da
Previdência vai exigir que o cidadão contribua 45 ou 50 anos para ter direito a
se aposentar.
Para ter direito ao benefício integral, o trabalhador precisará somar 45 ou 50
anos de contribuição —por meio de carteira assinada ou contribuição individual.
Esse tempo ainda não foi definido.
As regras constam da proposta de emenda constitucional concluída pela equipe
responsável pela reforma e ainda será encaminhada ao presidente Michel Temer,
que prometeu enviá-la ao Congresso antes das eleições municipais, marcadas para
o dia 2 de outubro.
45 ou 50 anos de contribuição!
Desculpem, mas só um canalha, tendo se aposentado aos 55 anos de idade, pode
propor uma coisa destas.
Será que o verme moral que escreveu uma proposta destas sabe alguma coisa da
vida ou está vem assentado no seu emprego estável de alto funcionário?
Será que este (desculpem de novo, mas eu escrevo para me expressar, não para me
esconder) desalmado que propõe um “troço” destes não sabem que as pessoas,
quando chegam aos 55/60 anos são mandadas embora do emprego e não conseguem
outro, se tiverem ocupações humildes?
Se o cidadão é pedreiro, começou a trabalhar aos 18  anos, vão querer ele na
empreiteira aos 60? Ainda vão faltar pelo menos 5 anos para a idade mínima  de
65 anos e oito para ele completar os 50 anos de contribuição! O que faz este
homem? Vai se humilhar pedindo esmolas, vai ser ambulante, vai pedir aos filhos
de vida modesta que o sustentem e ainda paguem seu INSS?
E não é só com os pobres, não. A classe média imbecil que lotou a Paulista
espere para ver se vai manter seu emprego com 65, 68 anos…
O senhor Henrique Meirelles, que ganhou aos 57 anos uma aposentadoria milionária
do Bank Boston, acha que todo mundo tem essa “boca rica” de de US$ 750 mil
anuais?
Escrevam o que estou dizendo, essa gente vai apanhar na rua, ou mandar a PM
jogar spray de pimenta nos velhinhos.
E além de desgraçados, desalmados, desumanos, monstruosos  – tá difícil segurar
o palavrão merecido! – ainda são, sabe o quê?
Burros, porque vão quebrar de  vez o INSS com a corrida para se aposentar  que
estão promovendo com esse terrorismo que fazem para ver se conseguem aprovar a
metade do mal que pretendem.
In
TIJOLAÇO
http://www.tijolaco.com.br/blog/50-anos-de-trabalho-para-se-aposentar-vem-ai-outro-desmentido-da-verdade/
24/9/2016

sexta-feira, 23 de setembro de 2016

Nueva marcha de las cooperativas La litoraleña y La casona contra los desalojos



FACTA

Mañana  viernes 23 de septiembre desde las 9 de la mañana,  trabajadores de la
fábrica de tapas de empanadas La Litoraleña y del restaurante y pizzería La
Casona, marcharán a los juzgados comerciales N° 18 y 16 de la Ciudad de Buenos
Aires para presentar los fundamentos y recursos de amparos que acompañarán las
apelaciones -presentadas hace dos semanas-  a los dos fallos judiciales que
amenazan la continuidad de la actividad que realizan como cooperativas.
“Estamos convocando a todas las cooperativas de FACTA y del sector, a los
partidos políticos para que nos acompañen junto a los compañeros de La Casona.
Lo único que pedimos es trabajar, están en riesgo 150 familias”, expresó Luis
Baini, titular de la cooperativa la Litoraleña.


Por su parte, Mario Romero, presidente de la cooperativa La Casona se mostró
preocupado por la situación y dio detalles del plan de acción que llevarán
adelante desde mañana para revertir esta situación. “Mañana marchamos con los
compañeros de La Litoraleña y el día 29, al mediodía haremos  ñoquis y empanadas
gratis acá en la esquina de Maipú y Corrientes, para difundir nuestra situación.
Además  el  11 de octubre vamos a hacer una movilización desde el Obelisco hasta
el Ministerio de Trabajo para que las autoridades nos den una respuesta. Entre
las dos cooperativas sumamos 150 familias que pueden quedar en la calle”,
analizó Romero.
El abogado de FACTA, Ataliva Dinani, presentó la semana pasada la apelación con
el objetivo de revertir la decisión de la jueza Valeria Pérez Casado que rechazó
el pedido para explotar económicamente la fábrica de tapas para empanadas, según
lo indica la Ley de Concursos y Quiebras.  Cabe recordar que el conflicto de La
Litoraleña comenzó el año pasado cuando el dueño, Rodolfo Conti, dejó de pagar
los salarios de los 115 trabajadores, que tres meses más tarde comenzaron una
huelga ante la falta de pago
En este sentido, Baini remarcó que “No entendemos porqué nos niega la
posibilidad de la continuidad laboral dado que la Ley lo expresa claramente. La
Jueza Pérez Casado viola el espíritu de la Ley y hace comparaciones con el 2001
habiendo una ley vigente y en el expediente quedó demostrado que hubo un
vaciamiento financiero y que nosotros tenemos la prioridad para seguir
trabajando”, analizó el representante de la fábrica de tapas de empanadas.

Por otra parte, los trabajadores de la cooperativa La Casona presentaron una
 apelación que pretende hacer valer el acuerdo que tenían  con los dueños y que
sorpresivamente dio un vuelco ante la resolución del juez que ordenó restituir
el local a la empresa.
“Había una acuerdo que los dueños no están cumpliendo. Mientras nosotros les
pagábamos 150.000 pesos por mes de alquiler, tal como convenimos, ellos
iniciaron el pedido de desalojo sin avisarnos y ahora en vez de tres años, tal
como estaba conversado, nos están sacando de un día para otro”, informó  Romero.
In
FACTA
http://www.facta.org.ar/news/nueva-marcha-de-las-cooperativas-la-litoralena-y-la-casona-contra-los-desalojos/
23/9/2016

Reforma de ensino médio do (des) governo de turno: decreta-se uma escola para os ricos e outra para os pobres




Por Gaudêncio Frigotto*, no site da ANPED


A reforma de ensino médio proposta pelo bloco de poder que tomou o Estado
brasileiro por um processo golpista, jurídico, parlamentar e midiático, liquida
a dura conquista do ensino médio como educação básica universal para a grande
maioria de jovens e adultos, cerca de 85% dos que frequentam a escola pública.
Uma agressão frontal à constituição de 1988 e a Lei de Diretrizes da Educação
Nacional que garantem a universalidade do ensino médio como etapa final de
educação básica.
Os proponentes da reforma, especialistas analfabetos sociais e doutores em
prepotência, autoritarismo e segregação social, são por sua estreiteza de
pensamento e por condição de classe, incapazes de entender o que significa
educação básica.
E o que é pior, se entende não a querem para todos.
Com efeito, por rezarem e serem co-autores da cartilha dos intelectuais do Banco
Mundial, Organização Mundial do Comércio, etc., seus compromissos não são com
direito universal à educação básica, pois a consideram um serviço que tem que se
ajustar às demandas do mercado.
Este, uma espécie de um deus que define quem merece ser por ele considerado num
tempo histórico de desemprego estrutural.
O ajuste ou a austeridade que se aplica à classe trabalhadora brasileira, da
cidade e do campo, pelas reformas da previdência, reforma trabalhista e
congelamento por vinte anos na ampliação do investimento na educação e saúde
públicas, tem que chegar à escola pública, espaço onde seus filhos estudam.
A reforma do ensino médio que se quer impor por Medida Provisória segue figurino
da década de 1990 quando MEC era dirigido por Paulo Renato de Souza no Governo
Fernando Henrique Cardoso.
Não por acaso Maria Helena Guimarães é a que de fato toca o barco do MEC.
Também não por acaso que o espaço da mídia empresarial golpista é dado a figuras
desta década.
Uma reforma que retrocede ao obscurantismo de autores como Desttut de Tracy que
defendia, ao final do século XIX, ser da própria natureza e, portanto,
independente da vontade dos homens, a existência de uma escola rica em
conhecimento, cultura, etc., para os que tinham tempo de estudar e se destinavam
a dirigir no futuro e outra escola rápida, pragmática, para os que não tinham
muito tempo para ficar na escola e se destinavam (por natureza) ao duro ofício
do trabalho.
Neste sentido é uma reforma que anula Lei Nº. 1.821 de 12 de março de 1953.
Que dispõe sobre o regime de equivalência dos cursos de grau médio para efeito
de matrícula nos curso superiores e cria novamente, com outra nomenclatura, o
direcionamento compulsório à universidade.
Um direcionamento que camufla o fato de que para a maioria da classe
trabalhadora seu destino são as carreiras de menor prestigio social e de valor
econômico.
Também retrocede e torna, e de forma pior, a reforma do ensino médio da ditadura
civil militar que postulava a profissionalização compulsória do ensino
profissional neste nível de ensino.
Piora porque aquela reforma visava a todos e esta só visa os filhos da classe
trabalhadora que estudam na escola pública.
Uma reforma que legaliza o apartheid social na educação no Brasil.
O argumento de que há excesso de disciplinas esconde o que querem tirar do
currículo – filosofia, sociologia e diminuir a carga de história, geografia,
etc.
E o medíocre e fetichista argumento que hoje o aluno é digital e não agüenta uma
escola conteudista mascara o que realmente o aluno desta, uma escola degradada
em seus espaços, sem laboratórios, sem auditórios de arte e cultura, sem espaços
de esporte e lazer e com professores esfacelados em seus tempos trabalhando em
duas ou três escolas em três turnos para comporem um salário que não lhes
permite ter satisfeitas as suas necessidades básicas.
Um professorado que de forma crescente adoece.
Os alunos do Movimento Ocupa Escolas não pediram mais aparelhos digitais, estes
eles têm nos seus cotidianos.
Pediram justamente condições dignas para estudar e sentir-se bem no espaço
escolar.
Por fim, uma traição aos alunos filhos dos trabalhadores, ao achar que deixando
que eles escolham parte do currículo vai ajuda-los na vida.
Um abominável descompromisso geracional e um cinismo covarde, pois seus filhos e
netos estudam nas escolas onde, na acepção de Desttut de Tracy estudam os que
estão destinados a dirigir a sociedade.
Uma reforma que legaliza a existência de uma escola diferente para cada classe
social.
Justo estes intelectuais que em seus escritos negam a existência das classes
sociais.
Quando se junta prepotência do autoritarismo, arrogância, obscurantismo e
desprezo aos direitos da educação básica plena e igual para todos os jovens, o
seu futuro terá como horizonte a insegurança e a vida em suspenso.
* Filósofo e Educador. Professor do Programa de Pós Graduação em Políticas
Públicas e Formação Humana da Universidade do Estado do Rio de Janeiro (UERJ)
In
VIOMUNDO
http://www.viomundo.com.br/denuncias/gaudencio-frigotto-reforma-de-temer-legaliza-o-apartheid-social-no-brasil.html
22/9/2016

quinta-feira, 22 de setembro de 2016

Donald Trump: ¡los mercados colapsarán después de las elecciones!



Wim Dierckxsens

Conforme el año 2016 avanza el mundo parece estar cada vez más fuera de control.
Hay una creciente inseguridad y descontento en el mundo con los actuales
gobiernos y no solo en Occidente. Las próximas elecciones en los EEUU puedan
desembocar en una completa rebeldía o hasta pueda haber insurrección. No digamos
tampoco que las elecciones en Europa prometen ser tranquilas. Podríamos estar en
una fase prerrevolucionaria y sin embargo a la vez nos sentimos ante la amenaza
de una nueva guerra mundial. Estamos viviendo tiempos como durante la Primera
Guerra Mundial y el surgimiento del comunismo, pero a la vez los tiempos
parecidos a la Gran Depresión de los años treinta con el ascenso del fascismo.
Se siente que algo muy fuerte podrá suceder pero no está claro para la
ciudadanía lo que va ser.
 Bloomberg ha afirmado que la eventual pérdida de Hillary Clinton en las
elecciones debido a su enfermedad es como una mina terrestre para los mercados
de por sí ya frágiles. Como veremos hay más minas en el camino.
...

Donald Trump: ¡los mercados colapsarán después de las elecciones!
Wim Dierckxsens
 La cumbre del G20 que tuvo lugar en setiembre de 2016 en China dejó muy claro
que el sistema monetario se moverá en una u otra dirección. Hay dos campos en
disputa: Occidente y Oriente. China y Rusia tienen una agenda: caminar hacia un
mundo multipolar. EE.UU., contando con Gran Bretaña hará lo posible para
mantener su hegemonía. Con ello EE.UU. podría aferrarse durante más tiempo de lo
previsto al statu quo del dólar, mientras Gran Bretaña en cambio después de
BREXIT está acercándose más a China. ¿Hasta donde es posible mantenerse a este
statu quo y qué posibilidades tiene la opción de los BRICS de crear un mundo
multipolar?
En el G20 se tomó la decisión de aumentar la utilización de los Derechos
Especiales de Giro (DEG) a nivel global en detrimento del dólar (en beneficio
del Yuan) sobre inversiones en infraestructura con fines de invertir el dinero o
crédito del Banco Asiático de Inversión en Infraestructura (BAII) en la economía
real. Para este proyecto se han apuntado un centenar de países incluyendo a los
europeos y los ausentes más notorios son EEUU y Japón. El colosal proyecto
económico chino de crear ‘Un cinturón, un camino’ también conocido como las
‘nuevas rutas de la seda’, se está viendo amenazado por el caos de Oriente
Medio.
China nunca tuvo una fuerte presencia económica en Siria ahora busca aumentarla
para sus ambiciosas ‘nuevas rutas de seda´. El conflicto sirio constituye una
seria amenaza para este proyecto de infraestructuras y comercial que busca unir
China con Oriente Medio, Europa, África y Asia. China está consciente de esto y
se está involucrando con Rusia en la lucha contra el terrorismo en Siria que,
como ha quedado en evidencia con los ataques aéreos en el alto de fuegos de
fines de setiembre coordinados y apoyados por EE.UU. y sus aliados.
Pekín entiende además que después de haber acabado con la violencia interétnica
en la Región autónoma Uigur de Sinkiang en julio de 2009 se ha creado un
corredor para los uigures que quieren abandonar la región. Huyen a Turquía, que
históricamente simpatiza con ellos, a Siria y a Afganistán, donde están
involucrados en las guerras locales y en cualquier momento podrán revolcarse de
nuevo sobre el territorio chino. La estrategia antiterrorista china puede ser
explicada con la creciente participación de los uigures de China en las
actividades violentas en Siria o Afganistán además de en otros países y la
amenaza que suponen el día de mañana en China. Es por este motivo que China ha
decidido implicarse en la lucha contra el terrorismo en Siria.
Pekín observa la guerra civil en Siria como el intento estadounidense de socavar
la influencia de Irán en el Oriente Medio “bajo el pretexto de derrocar el
régimen de Bashar Al Assad”. Rusia ha sido firme en su compromiso de eliminar la
amenaza ‘terrorista’ apoyando al régimen en Damasco y Pekín ha quedado
impresionado con la manera en que las decisivas acciones de Rusia han tenido un
efecto que no se pudo alcanzar en los campos de batallas en años anteriores”.
Por ello, ahora Pekín está convencido de que aliarse con Rusia y apoyar al Assad
(Vea, Dos razones que explican por qué China decidió involucrarse en Siria,
https://actualidad.rt.com, 21 de setiembre de 2016).
Con este proyecto de los DEG´s , avalado por Christine Lagarde directora gerente
del Fondo Monetario Internacional, avanza la agenda de los BRICS hacia un mundo
multipolar con una reagrupación de uniones monetarias en el mundo. Esta posible
transformación de la gobernanza global permitiría a Europa en principio
liberarse del yugo de EEUU y del dólar sin tener que enfrentarse directamente, o
sea, sin provocar grandes olas a nivel global. Permitiría, al menos como
posibilidad gestionar una transformación pacífica hacia un mundo multipolar tal
y como lo percibe promover sobre todo China. Lo anterior bajo el supuesto que
las élites financieras de EEUU lo dejen pasar o buscan más bien la vía política
y militar. Cuando vemos la agresividad creciente entre EEUU y Rusia no se
vislumbra como una tarea fácil (Vea GEAB informe 107 septiembre de 2016).
Conforme el año 2016 avanza el mundo parece estar cada vez más fuera de control.
Hay una creciente inseguridad y descontento en el mundo con los actuales
gobiernos y no solo en Occidente. Las próximas elecciones en los EEUU puedan
desembocar en una completa rebeldía o hasta pueda haber insurrección. No digamos
tampoco que las elecciones en Europa prometen ser tranquilas. Podríamos estar en
una fase prerrevolucionaria y sin embargo a la vez nos sentimos ante la amenaza
de una nueva guerra mundial. Estamos viviendo tiempos como durante la Primera
Guerra Mundial y el surgimiento del comunismo, pero a la vez los tiempos
parecidos a la Gran Depresión de los años treinta con el ascenso del fascismo.
Se siente que algo muy fuerte podrá suceder pero no está claro para la
ciudadanía lo que va ser.
Lo que sucede es que los mercados globales están cada vez más fuera de control.
¿Por qué la Reserva Federal consideró públicamente subir la tasa de interés
hacia fines de setiembre de 2016? ¿Será que la Reserva Federal ha encontrado en
el ascenso de Trump que muestran los sondeos para la elección presidencial en
EEUU el motivo para el colapso en la bolsa de valores. Bloomberg ha afirmado que
la eventual pérdida de Hillary Clinton en las elecciones debido a su enfermedad
es como una mina terrestre para los mercados de por sí ya frágiles. ¿Es que lo
anterior lo están montando los medios controlados por la élite financiera
globalista? El colapso económico que nos avecina se podría atribuir entonces al
triunfo de movimientos conservadores y debido a la enfermedad de la Clinton
(Brandon Smith, The Unthinkable: “Postponed Election Would Trigger Massive
Chaos”, www.silverdoctors.com, 20 de setiembre de 2016).
Otro escenario podría ser que las elecciones se posponen debido a la enfermedad
de Clinton. Aunque esta alternativa no sirve en la misma medida a los intereses
de la élite financiera. Si Obama suspende las elecciones el caos público sería
probablemente enorme. Un estado policiaco ya está listo para mantener el orden
aplicando la ley marcial con puño de hierro. Caos y represión se repetirán y la
inestabilidad política aumentaría sin cesar creando momentos
prerrevolucionarios. (Vea, Mac Slavo, Chaos Has Never Been Closer: “Obama May
Suspend Election” If She Is Too Sick, www.silverdoctors.com, 16 de setiembre de
2016).
Otro factor a tomar en cuenta es el hecho que el Congreso en EEUU ha aprobado
una ley que las familias de las víctimas de 11 de setiembre de 2001 podrán
reclamar indemnizaciones al gobierno de Arabia Saudita debido a ser considerados
co-responsables en el ataque a las Torres Gemelas. Aun cuando el presidente
Obama lo vetara, la votación casi segura de más de dos tercios en el Senado
anularía tal veto. Sería la receta perfecta para que Arabia Saudita dejara de
comercializar el petróleo en dólares y con ello se sellaría el fin del
petrodólar. En realidad sería la última gota gruesa para sellar el fin del dólar
como moneda internacional de reserva ya que el petróleo se comercializa cada vez
menos en dólares. Sin embargo, así como la Reserva Federal está en condiciones
de aumentar la tasa de interés cuando la élite financiera considere que sea el
momento así también podrá el Senado de EEUU calcular el momento de decidir con
su voto sobre la suerte del petrodólar.
Es un hecho que los gobiernos se están preparando para catástrofes como estas.
Lo anterior no solo ha quedado claro en EEUU sino tal vez aún más manifiesto
todavía en la Unión Europea. El gobierno alemán alertó al público de un suceso
no bien definido de gran impacto al recomendarles al público tener reservas de
comida y agua para al menos unos diez días. Alemania también se está preparando
con la idea de tener tropas en las calles para proteger a la población contra
ISIS. La realidad es que estas medidas suelen ser anunciadas para protegerse
contra un segmento específico de la población para luego aplicarlo para otro
grupo radical por cualquier motivo. El término de ´radicales´ es sumamente
elástico y puede ser utilizado con gran arbitrariedad. De este modo se desemboca
antes de darse cuenta en un Estado Totalitario. Aquí las advertencias poéticas
de Bertholt Brecht son más claras que cualquier análisis político. ¿Por qué
tanta preocupación en Europa y por qué en Alemania?
Se anuncia desde Wall Street que la próxima crisis financiera podría estallar
primero en Europa y más probable en Alemania con el colapso de Deutsche Bank. Si
bien la crisis financiera podrá estallar esta vez en primero en Europa para
luego, con el efecto dominó del mercado de los derivados (´securities´), sacudir
a los megabancos en EEUU para así por ende crear otra crisis financiera a nivel
mundial sin precedentes. La élite financiera de Wall Street busca poder
responsabilizar a otros ´actores´ por este colapso financiero tanto dentro como
fuera de EEUU.
 La pregunta sin embargo es si las élites están suficientemente preparadas para
dejar pasar el colapso total antes de las elecciones. El hecho más probable es
que procurarán de posponerlo hasta después de las elecciones. El mismo Donald
Trump ya afirmó (un día antes que la Reserva Federal lo anunció) que la razón
por la cual las tasas de interés no aumenten sino hasta después de las
elecciones es porque la Reserva Federal no quiere interferir en el legado de
Obama. Jeff Berwick estima que Trump, con esta afirmación más bien podría dejar
una señal que el mismo puede ir adelante con la idea de un gobierno global. Este
hecho cambiaría un tanto el panorama de la campaña (Vea, Jeff Berwick, Donald
Trump Warns Markets Will COLLAPSE January 1st!, www.silverdoctors.com, September
20, 2016).
Toda burbuja de crédito es dinámica ya que suelen crecer para explotar en algún
momento y no es posible tener un control perfecto sobre ese suceso. Las burbujas
crecen mientras el crédito se expande. Pasado cierto punto estos créditos son
más difíciles de conseguir y la burbuja inevitablemente suele explotar. Obtener
créditos se torna cada vez más difícil al tornarse negativas las tasas de
interés. Al recibir intereses negativos en la banca se ponen penalidades al
ahorro en dinero y con ello disminuye el ahorro y se prefiere tener el dinero en
efectivo. ¿Cuáles fondos de pensiones podrán operar poniendo su dinero en la
banca con tasas de interés negativas? Las tasas negativas a su vez alientan a
los banqueros a tomar riesgos aún más grandes. Los que invierten el dinero
prestado a costo cero quieren premios mayores al trabajar con más riesgos. Esos
premios en ascenso aumentan a su vez el peligro de la incapacidad de pago. Las
bancarrotas suelen estar en el aire. Lo anterior genera desconfianza en el
sistema. La desconfianza pone límites a seguir alimentando la burbuja de
crédito. Cuando la confianza erosiona y se acaba la liquidez es inevitable que
se anuncie el colapso. Los riesgos aumentan con cada ciclo. Hoy en día nos
encontramos en este punto (Nicole Foss, Negative Interest Rates and the War on
Cash, www.theautomaticearth.com, 4 de setiembre de 2016)
No necesariamente se percibe el peligro ya que aquellos estados que se
encuentran ante el pico de la burbuja puedan mostrar a primera vista un riesgo
bajo comparando con estados que luchan más abiertamente contra la bancarrota.
Sin embargo lo contrario podría ser el caso. La mera percepción de un riesgo
bajo es suficiente para que sigan bajando las tasas de interés hacia zonas
negativas. Las tasas de interés negativas son percibidas como medio para
sostener el crédito y obtener ventajas en la exportación. La carrera por la baja
de dichas tasas se conoce como una guerra monetaria. La política de los bancos
centrales sin embargo es sostener el crédito a bajo costo hasta donde sea
posible. Un incremento en la tasa de interés tendría resultados desastrosos al
fomentar una incapacidad de pago generalizado conllevando al colapso.
Pero qué pasa con la baja de la tasa de interés en zonas negativas. Una política
de tasas de interés negativas fomenta el retiro de dinero en efectivo de la
banca acompañado de un sentimiento de desconfianza en la banca. Esta percepción
negativa a su vez tiende a bajar la demanda global de productos y servicios y
con la sub-consumo aumenta el espiral deflacionario. El consecuente pesimismo
sobre una economía en contracción hace aumentar la demanda de dinero en efectivo
llevándonos a un círculo vicioso. Lo anterior está sucediendo en una amplia
escala de países.
La respuesta de los políticos es comenzar una ´guerra contra el dinero en
efectivo´. Se levantan trabas para retirar montos dinero en efectivo - incluso
cuando sean nada extravagantes - con el pretexto de una lucha contra el
narcotráfico y el crimen organizado. Así tratan de montar, en otras palabras, un
´corralito a escala mundial´. Sin embargo mientras unas monedas son más
accesibles que otras para obtener dinero en efectivo y mientras existan formas
de guardar dinero bajo la forma de otros valores (oro, plata, tierra, etc.) esta
guerra no es fácil de ganar. La política hacia el uso exclusivo de moneda
electrónica está en plena marcha y sobre todo en los países centrales. La
confianza en los gobiernos actuales y en las élites en el poder se deteriora con
ello aún más todavía. En el momento del colapso financiero que nos avecina habrá
rebeliones no vistas antes en mucho tiempo (Ibid).
Ahora bien este colapso es inminente con cualquier alza en las tasas de interés
pero, a cómo hemos tratado de mostrar está igualmente cerca de nosotros cuando
dichas tasas se mantienen y abrirían espacio para una tendencia a tasas más
negativas en el mercado. El hecho es que la Reserva Federal está ante una
situación de jaque mate. El 21 de setiembre de 2016 la Reserva Federal decidió
que aún no era el momento de aumentar las tasas de interés y estimaba apropiado
esperar hasta diciembre para tomar una decisión al respecto. La razón única es
que quieren dejar pasar las elecciones y evitar que estalle la burbuja antes. La
duda sin embargo es si es posible posponer el colapso financiero por otro tiempo
más.
El 1 de octubre el Yuan entrará (junto con el dólar, el euro, el Yen y la Libra
esterlina) a formar parte de la canasta de monedas que dan sostén a los Derechos
Especiales de Giro (Los DEG´s) lo que permitiría un nuevo balance en la
geopolítica monetaria. ¿Es posible que la Unión Europea pueda apostar a un
futuro Euroasiático o más bien al igual que América latina estará condenado a
formar parte subordinada de un Occidente bajo liderazgo de EEUU? Veamos para
ello un momento cómo está la situación en Europa.
 Al salir de la Unión Europea, el Reino Unido se ha liberado de su deber
estructural para con EEUU y en contra de la Unión Europea. La Unión Europea
murió el 23 de junio de 2016 pero no necesariamente así la construcción de
Europa. No solo la Unión Europea se liberó de la tutela estadounidense al
deshacerse de Reino Unido (RU), el mismo RU se liberó de la tutela de
estadounidense al desprenderse de la Unión Europea. En estas en condiciones
Reino Unido podrá afirmar sus nuevas alianzas con China, lo que sería un golpe
para la élite financiera globalista. Tras el BREXIT es posible avanzar la vía
China de consolidar y articular agrupaciones regionales y particularmente de
uniones monetarias en el mundo a fin de construir un mundo multipolar.
Es un hecho que después de BREXIT la Unión Europea murió y con ello es posible
deslegitimar la Comisión Europea. La función de la Comisión podría reducirse
eventualmente a implementar el BREXIT como único dominio de su competencia al
servicio de los 28 estados miembros y poner la nueva EU de los 27 restantes más
al servicio de Schengen y no más al servicio de EEUU. El debilitamiento de la
Comisión (pro yanqui) y la reducción de sus funciones se hacen necesarias y más
posibles conforme pase el tiempo ya que cada vez más países se inclinen hacia el
populismo anti EU, es decir, anti la centralización del poder a través de la
Comisión.
Hay indicaciones de rupturas transatlánticas mediante una oposición cada vez más
frontal y más amplia al TTIP. El mismo presidente Hollande y un ministro alemán
ya lo han declarado un proyecto muerto. Al mismo tiempo y sobre todo después de
la amenaza que Turquía podría ser echada de la OTAN (al acusar a EEUU de estar
detrás del golpe de estado fallido), la misma organización se ve deteriorada y
se observa la reactivación del proyecto de una Europa de la defensa. Ante la
perspectiva electoral en EEUU con Trump o Clinton en la presidencia Europa se
pregunta si puede arriesgarse permanecer ligada a la agenda de EEUU frente a
Rusia que cada día se pone peor.
Una política de ruptura obviamente permitiría una mayor posibilidad de la
integración de Eurasia. Esta misiva sin embargo supone eliminar dentro de la UE
el poder de obstrucción de Polonia y los países bálticos frente al levantamiento
de las sanciones contra Rusia. Este poder podría eliminarse al subvertir la
legitimidad actual de la Comisión Europea. Esta deslegitimación es posible al
declarar muerta la Unión Europea con el BREXIT. Son Francia, Italia Alemania y
Bélgica sobre todo los que deseen que se levanten las sanciones contra Rusia y
todavía antes de finalizar el año 2016. El levantamiento de las sanciones contra
Rusia y el probable fracaso del nuevo gobierno brasileño podrán devolver nueva
importancia a los BRICS y al proyecto Euroasiático y el camino hacia un mundo
multipolar (Vea GEAB informe 107 septiembre de 2016).
 
In
LA PÁGINA DE WIM DIERCKXENS
http://mariwim.info/?p=55
Sep. 2016
22/9/2016

quarta-feira, 21 de setembro de 2016

“La ofensiva imperialista, desatada al derrumbarse la URRS, se ha empantanado en Asia”



Jorge Beinstein


Entrevista especialmente elaborada para la revista de Red Roja, publicada
parcialmente en la edición impresa correspondiente a septiembre, por el
economista marxista Jorge Beinstein
...

RR: Tras casi una década de crisis, ¿cómo ves la salud del capitalismo y de su
intento de revertir la caída de la tasa de ganancia?.
JB: En realidad la crisis del sistema comenzó mucho antes de 2008, tendríamos
que retroceder hasta los años 1970 o como lo señalaba Mandel hacia fines de los
años 1960. A partir de ese período comenzó a descender tendencialmente la tasa
de crecimiento real del Producto Bruto Global, proceso motorizado por la
desaceleración de las grandes economías centrales como las de Estados Unidos,
Japón, Inglaterra o Alemania (en ese momento Alemania Federal) y también a
expandirse la llamada financiarización del capitalismo.
2008 fue un punto de inflexión que marcó el agotamiento de la financiarización
que había sido la droga dinamizadora del capitalismo, su euforizante y su
parásito al mismo tiempo. Si tomanos el caso de los “productos financieros
derivados”, la espina dorsal del sistema financiero (y en consecuencia del
capitalismo mundial), constatamos que hacia el año 2000 llegaban aproximadamente
a los 100 billones (millones de millones) de dólares equivalentes unas tres
veces el Producto Bruto Global, en 2008 alcanzaban los 685 billones de dólares
casi unas 11 veces el PBM, pero ese año se produjo la gran crisis financiera y
la masa nominal de derivados dejó de crecer, se mantuvo en una suerte de
estancamiento inestable. En diciembre de 2013 llegaban a los 710 billones (unas
9 veces el PBM) y en 2014 comenzó el desinfle: hacia diciembre de 2015 habían
caído a unos 490 billones de dólares (seis veces el PBM), en solo dos años se
evaporaron 230 billones de dólares, que representaron algo menos de tres veces
el PBM de 2015. El desinfle de esa hiperburbuja, en realidad la madre de todas
la burbujas, golpeó duramente a los precios y a las inversiones, las economías
centrales se estancaron, tuvieron crecimientos bajos o entraron en recesión.
Como sabemos en 2014 se produjo el derrumbe de los precios de las materias
primas y la generalización de la que suele ser calificada como crisis
deflacionaria global. El motor financiero dejo de cumplir el rol de euforizante
y paso a ser un factor depresivo que empuja hacia abajo al conjunto del
capitalismo. En lo que va del 2016 la situación ha empeorado y seguramente se va
a agravar próximamente, numerosas señales así lo indican.
Cuando uno mira más en profundidad se da cuenta que por debajo del fenómeno,
desde los años 1970 hasta hoy, aparece la acentuación de la tendencia a la
declinación de la tasa de ganancia que de manera irregular, con algunas mejoras
efímeras seguidas por fuertes caídas va acorralando a un sistema enfermo. Las
mejoras pasajeras de esa tasa fueron obtenidas principalmente gracias a la mayor
explotación de los trabajadores y/o a la depredación de los recursos naturales
de la periferia. Por ejemplo el ingreso al mercado mundial capitalista de
millones de obreros industriales chinos y de otras zonas de la periferia
permitió a las grandes empresas deslocalizar sus instalaciones y así producir
con salarios reducidos, gracias la aplicación de tecnologías mineras y agrícolas
altamente destructivas del medio ambiente las economías imperialistas obtuvieron
materias primas baratas (y súper beneficios). Entonces vemos como la curva
representativa de la tasa de ganancia de las economías centrales dejaba de caer
e incluso ascendía durante algunos períodos entre los años 1980 y 2000, pero
esos remedios no consiguieron superar el problema y en lo que va del siglo
actual la trayectoria a la baja es irresistible.
Ahora nos encontramos ante la tentativa siniestra de frenar ese descenso
acentuando al extremo el saqueo de recursos naturales y sometiendo a centenares
de millones de trabajadores a la superexplotación, para lograr esos objetivos es
empleada una variedad de instrumentos que van desde las intervenciones militares
directas y los llamados golpes blandos hasta la imposición autoritaria por parte
de gobiernos seudo democráticos de planes económicos que producen desempleo y
caídas de los salarios reales. Pero al poner en marcha esos remedios agravan la
crisis del sistema, extienden el caos, expanden los espacios sociales
ingobernables, deterioran las instituciones burguesas. Pretenden alejar el
desastre pero en realidad lo amplifican.
RR: ¿Qué papel juega la deuda como elemento disciplinador? ¿Por qué debemos
reclamar su impago?
JB: El endeudamiento estatal y privado fue un gran dinamizador del capitalismo
desde las últimas décadas del siglo pasado, en países como los Estados Unidos el
grueso de los salarios crecían muy poco, se estancaban y en algunos casos caían
pero el crédito permitía mantener el consumo. El Estado podía seguir gastando en
guerras u obras públicas aumentando su deuda. Y las deudas crecieron más y más
hasta que tocaron techo. En 2008 se produjo el descalabro financiero porque una
masa significativa de deudores privados no podían seguir pagando y estalló la
burbuja inmobiliaria. El ciclo de crecimientos en base a deudas se agotó y se
inició un ciclo opuesto de estancamientos, recesiones y crecimientos anémicos.
Antes el endeudamiento era un mecanismo que permitía crecer desacelerando
salarios, ahora aparece como un factor que impone restricciones de gastos
sociales del estado, reducciones salariales reales y aumento del paro. Los polos
financieros disciplinan a los estados que a su vez disciplinan a los
trabajadores. ¿Pero cuanto tiempo puede durar esa degradación?, no mucho más,
dicho deterioro hace a mediano o largo plazo ingobernables a las sociedades. La
decadencia del sistema se generaliza, ya no solo afecta a sus estructuras
económicas, sino también a sus reproducciones institucionales, ideológicas,
políticas, etc. Las súper deudas, dados sus volúmenes, son impagables, solo
pueden ser atendidas con más deudas lo que a su vez impulsa más estancamiento
económico y desintegración social. No existe la formula mágica capaz de resolver
el problema preservando el funcionamiento del sistema por una razón muy simple:
la súper deuda no es otra cosa que la expresión de la decadencia del sistema, no
es su causa sino su resultado, es uno de sus efectos visibles.
Como lo demostró el caso griego donde el gobierno “progresista” proponía seguir
pagando “de otra manera” y mejorar la situación económica general, el sistema no
ofrece esa posibilidad. Y no pagar la deuda significa romper con el sistema, con
el centro financiero de un capitalismo global completamente financiarizado. Para
los progresistas hacer eso sería “irracional”, sería apartarse del “mundo”, con
lo cual aceptan la irracionalidad profunda del sistema que nos está llevando
hacia el desastre, también identifican al “mundo” con las élites dominantes. En
suma, pagar y pagar empobreciéndonos cada vez más cuando es perfectamente
posible mejorar las condiciones de vida de la mayoría de la población dados los
recursos técnicos disponibles siempre y cuando nos saquemos de encima al
parasitismo, es decir al sistema, es decir al capitalismo tal cual existe en la
realidad que no tiene nada que ver con los capitalismos imaginarios que nos
proponen progresistas y conservadores simpáticos.
RR: ¿Qué opinas de la acentuación de las contradicciones interimperialistas
entre EE UU, Alemania, Rusia, China….?
JB: Como lo señalé antes el capitalismo central, básicamente las economías
dirigentes de la Unión Europea más los Estados Unidos y Japón, necesita saquear
a la periferia para frenar, aunque sea durante un cierto tiempo, su decadencia
económica, se trata de una mega estrategia imperialista global en curso. Cuando
hablo de periferia extiendo el concepto tradicional no solo a Rusia y China sino
además a las economías sometidas de Europa centro-oriental y del sur.
Pero esa gran ofensiva imperialista desatada al derrumbarse la URRS, terminó
empantanándose en Asia. Peor aún: el propio mecanismo de reproducción global del
sistema al fomentar el desarrollo capitalista subordinado de China contribuyó de
manera decisiva a la creación de las condiciones que posibilitaron el ascenso y
consolidación de de una clase dirigente combinación de burgueses y altos
burócratas civiles y militares que fue ganando una creciente autonomía política,
económica y tecnológica. Un capitalismo de Estado con rasgos estructurales y
culturales muy sorprendentes que conforma la segunda potencia económica del
planeta y ahora también científico-tecnológica. Según la National Science
Foundation en 2016 los Estados Unidos gastarán en Investigación y Desarrollo el
27 % del total global seguidos por China con el 20 % y entre 2009 y 2013
mientras que los Estados Unidos incrementaron en un 7 % sus gastos de I+D, China
lo hizo en un 78 %. Extrapolando esos ritmos, hacia mediados de la próxima
década China pasaría a ser la primera potencia científico-tecnológica del
planeta. En términos reales tal vez lo sea antes ya que los gastos
estadounidenses son realizados sobre un aparato científico viejo, plagado de
zonas grises, burocracias, etc. mientras que los gastos chinos se aplican a un
aparato joven, muy dinámico, en rápida expansión.
En el caso ruso quienes pronosticaban en los años 1990 la desintegración de
Rusia siguiendo lo que había ocurrido con la URSS se equivocaron completamente.
El Estado y en especial su componente industrial-científico-militar se
recompuso, el núcleo duro de las élites dirigentes aprovecho el auge de las
exportaciones energéticas, recupero tradiciones nacionalistas que habían
atravesado (y deformado) a la URSS y que se remontan a los orígenes mismos de la
identidad rusa que no pueden ser asumidas sin integrar a las glorias del siglo
XX, por ejemplo la victoria soviética sobre el nazismo que le costó a ese país
27 millones de muertos, el mayor sacrificio militar de un pueblo a lo largo de
toda la historia humana. Eso no se borra fácilmente.
 También allí se forjó un capitalismo de Estado que se fue autonomizando.
En ambos casos lo que no debemos hacer es caer en el reduccionismo económico, es
necesario ampliar la visión al conjunto de la historia de dichas naciones, de
ese modo podemos llegar a entender tanto sus resistencias a la hegemonía
occidental como sus numerosas contradicciones y debilidades.
Ambos capitalismos dependen de sus exportaciones a las grandes potencias
tradicionales, existen complejos lazos financieros globales a los que están
atados, pero existe también la amenaza de los Estados Unidos, sus agresiones,
pretendiendo colonizarlos. Algunos analistas simplificadores pronosticaban hace
algunos años que jamás ocurrirían confrontaciones militares de los Estados
Unidos con Rusia o con China, lo hacían señalando que la globalización económica
había engendrado una suerte de trama burguesa transnacional que sobre
determinaba el comportamiento de los grandes estados cuyas rivalidades pasaban
entonces a un segundo plano. Algo parecido pensaba cierta gente antes de la
Primera Guerra Mundial cuando avizoraba la instalación de una súper burguesía
mundial por encima de los estados, pero la guerra llegó desmintiendo esa
fantasía.
En síntesis: integraciones, interdependencias de todo tipo entre grandes
potencias pero al mismo tiempo rivalidades, guerras.
RR: ¿Qué papel juega la guerra imperialista hoy? ¿Está el capitalismo en su
etapa senil?
JB: La guerra, el aparato militar, sus prolongaciones industriales y
financieras, sus articulaciones mafiosas, constituye actualmente el núcleo
central de las élites dominantes de los Estados Unidos que conforman un
conglomerado de redes muy concentradas volcadas mayoritariamente a practicas
parasitarias. Parasitismo, imperialismo y militarismo son conceptos decisivos
cuando tratados de describir el comportamiento del Imperio. Estos rasgos del amo
explican a su vez la dinámica de sus socios-vasallos (Alemania, Francia, Japón,
etc.).
Los capitalismos centrales tradicionales necesitan para sobrevivir como tales
(así como Drácula necesitaba sangre y más sangre) sobreexplotar los recursos
naturales y masas trabajadoras de la periferia lo que lo convierte en una
gigantesca fuerza tanática de alcance planetario.
Estados Unidos apoyado en ciertos casos por otras potencias occiddentales ha
destruido a países como Afganistas, Irak, Libia o Siria, intenta cercar
militarmente a Rusia, hundir su economía, está empezando a hostigar militarmente
a China, se encuentra embarcado en la recolonización integral de América Latina
a la que le reserva un destino mexicano.
Se trata de la guerra de Estados Unidos y sus socios-vasallos contra el resto
del mundo, “guerra de cuarta generación” que combina una amplia variedad de
formas (militar convencional, mediática, financiera, etc.) cuyo objetivo final
es la transformación de ese “resto-del-mundo” en una vasta zona gris, con
semi-estados fallidos, sociedades desarticuladas, caóticas indefensas ante el
saqueo desmesurado.
Pero querer no es poder, más aún si las retaguardias imperialistas, sus espacios
nacionales se encuentran en franca decadencia. Sus economías crecen cada vez
menos, algunas de ellas ya están en recesión y sin posibilidades de recuperación
atrapadas por sus tramas parasitarias. En ese sentido el concepto de senilidad
es sumamente útil para entender lo que está ocurriendo, tanto desde el punto de
vista productivo-tecnológico como ideológico. La cercanía de la muerte, la
pérdida de vitalidad, no promueven la resignación serena del viejo crápula sino
su irracionalidad, su tentativa desesperada por conservar lo existente e incluso
acrecentar sus privilegios, a medida que avanza la pérdida de vitalidad se
exacerban sus delirios. La RAND Corporation, la más importante consultora
norteamericana en temas militares, acaba de publicar un estudio donde se
desarrollan escenarios de una hipotética guerra entre los Estados Unidos y
China, allí se miden posibles “pérdidas” de cada contendiente, etc. Circulan
documentos similares referidos a una eventual guerra con Rusia.
RR: ¿Cree que el capitalismo puede “reformarse”, como sostiene la
socialdemocracia?
JB: La reforma productivista y social del capitalismo, como lo pregona la
socialdemocracia es en el mejor de los casos una simple expresión de deseos, en
realidad se trata de un engaño que oculta la naturaleza real del capitalismo tal
como hoy existe. Para lograr ese supuesto capitalismo con rostro humano sería
necesario erradicar a sus centros hegemónicos financieros. Dicho de otra manera
para salvar al enfermo habría que extirpar su corazón y su cerebro para luego
mejorar lo que queda. El capitalismo del siglo XXI está completamente
financiarizado y ese hecho es el resultado de un largo proceso histórico de
carácter global, no el efecto no deseado de una desviación reversible. Es el
resultado de la prolongada declinación tendencial de la tasa de ganancia y en
consecuencia de la irrupción de su salvavidas financiero, del achatamiento de
las inversiones productivas, de los modelos tecnológicos centrados en la
depredación de recursos naturales y el ahorro de costos laborales.
El capitalismo solo nos ofrece vivir cada vez peor, no tiene otra posibilidad,
no puede reproducirse como sistema global sin acrecentar su parasitismo y por
consiguiente la superexplotación de sus víctimas a las que la marcha de la
historia va conduciendo ante dos escenarios contrapuestos: el de la insurgencia
anticapitalista y el de la degradación prolongada.
—-
Jorge Beinstein es Doctor de Estado en Ciencias Económicas (Francia),
especialista en pronósticos económicos. Fue consultor de organismos
internacionales y gobiernos, dirigió numerosos programas de investigación y fue
titular de cátedras de economía internacional y prospectiva tanto en Europa como
en América Latina. Es profesor titular de las cátedras libres “Globalización y
Crisis” en las Universidades de Buenos Aires y Córdoba (Argentina) y de La
Habana (Cuba), y Director del Centro de Prospectiva y Gestión de Sistemas
(Cepros). Su página web es http://beinstein.lahaine.org/

In
REDROJA
http://redroja.net/index.php/noticias-red-roja/opinion/4196-la-ofensiva-imperialista-desatada-al-derrumbarse-la-urrs-se-ha-empantanado-en-asia
15/9/2016

terça-feira, 20 de setembro de 2016

Intransigência em atender reivindicações tem forte resposta da categoria bancária em greve


CONLUTAS

O setor financeiro apresentou uma proposta vergonhosa: 7% de reajuste e abono de
3.300 reais diante de uma inflação de 9,57% no período. Isso significaria uma
perda salarial de 3% no ano. Na última década, a cada três anos, os bancos
cresceram o equivalente a um novo banco. Os lucros continuam em num patamar
muito acima do resto da economia. Os banqueiros afirmam que lucraram menos que
em 2015, mas mesmo com o freio no crédito, os financiamentos aprovados pelo
governo do PT às grandes empresas e o aumento da inadimplência que atingem o
setor, o lucro dos cinco maiores bancos (Itaú, Bradesco, Banco do Brasil,
Santander e Caixa) no primeiro semestre de 2016, chegou a R$ 29,7 bilhões.
Enquanto isso houve corte de 7.897 postos de trabalho só nos primeiros sete
meses do ano. O que eles não dizem é que os lucros bilionários nos últimos anos
foi muito superior aos aumentos salariais.
Reestruturação dos bancos ameaçam nossos empregos
Se a pequena diminuição do lucro deve-se à inadimplência de grandes empresas do
país, como a Oi e a Sete Brasil que tinham empréstimos bilionários, os bancos
continuam diminuindo seus gastos com folha de pagamento, aumentando sua receita
com cobrança de tarifas e com um dos maiores juros do mundo. Só exemplificando,
houve o pedido de recuperação judicial da Sete Brasil, OAS, Queiroz Galvão,
vários estaleiros e Oi, cujos créditos e debêntures totalizam R$ 4,4 bilhões. E
os bancos continuam editando formas de manter os lucros: redução drástica dos
gastos administrativos e o quadro funcional, aumento da tecnologia, do
atendimento digital e da terceirização. Tais reestruturações atingem também os
bancos privados: o Bradesco, com a incorporação do HSBC e o Itaú -na vanguarda,-
com o fechamento de agências e transferência de clientes ao banco virtual. Fica
nítido que a FENABAN (Federação Nacional dos Bancos), em uma política articulada
com o governo Temer, pretende que nós trabalhadores paguemos uma conta que não é
nossa.
A greve  segue forte!

A greve dos bancários segue fortalecida. A paralisação atingiu 12.727 agências e
52 centros administrativos em todo o pais, até esta sexta-feira (16). A
enrolação dos banqueiros em não apresentar propostas no setor mais rentável do
país é combustível para seguirmos lutando. Além das cláusulas econômicas, há
questões como a CASSI (plano de saúde) no BB, reestruturação e o RH184 (que dá
poderes ao gestor de retirar funções) na Caixa e as demissões nos bancos
privados que sequer foram abordadas na mesa de negociação. Alia-se a isso a
proposta de mudanças na previdência e nos direitos trabalhistas do governo para
percebermos que a unidade é nossa arma. Dia 22 acontecerão atos nacionais e dia
29 uma paralisação dos metalúrgicos em todo o país. Isso demonstra o ânimo da
nossa classe para tirar das nossas costas a conta da crise.

In
CONLUTAS
http://cspconlutas.org.br/2016/09/bancos-continuam-ganhando-como-nunca-intransigencia-em-atender-reivindicacoes-tem-forte-resposta-da-categoria-bancaria-em-greve/
19/9/2016

Evo frente a lo que llaman cooperativismo



Por Camila Vollenweider y Shirley Ampuero     


Como era de esperar, el asesinato del Viceministro Rodolfo Illanes -y otras 4
personas- marcó un hito de quiebre en la alianza política establecida entre el
gobierno del MAS y el sector de los cooperativistas mineros. Generó una cadena
de acciones y reacciones, y puso en la palestra la situación real del complejo
colectivo “cooperativista”.
Cinco decretos y una resolución marcan el inicio de la voluntad del Gobierno de
regular la dinámica de este sector, que creció aceleradamente a partir del
proceso privatizador instaurado por Sánchez de Lozada y que posteriormente
consiguió mantener sus actividades casi al margen del control gubernamental.
Durante todos esos años, el sector cooperativista -avalado por la legislación
entonces vigente- consiguió suscribir contratos de riesgo compartido,
arrendamiento y subarrendamiento con empresas privadas, incluso extranjeras. En
2014, la Ley 535 prohibió este tipo de acuerdos pero, a pesar de ello, los que
habían sido contraídos continuaron efectivizándose. Tras la escalada del
conflicto de las últimas semanas, el Gobierno estableció como respuesta una
serie de decretos sancionados el 01 de septiembre. Entre ellos, el Decreto
Supremo (DS) 2891, establece que las áreas sobre las cuales se hubiesen
establecido contratos de ese tipo -31 en total- volverían a dominio del Estado.
Se dispuso así la reversión de las concesiones mineras en áreas donde se
constate la inexistencia de actividad minera o su indebida explotación.
El establecimiento del derecho a la sindicalización de los trabajadores de las
cooperativas, decretado por Morales a mediados de agosto y uno de los motivos de
la protesta que acabó en tragedia, alude a que muchas de éstas funcionan, en la
realidad, como empresas privadas, con mano de obra asalariada y privada de
derechos laborales elementales. Así, dos de los decretos sancionados apuntan a
regular la situación jurídica y laboral de las cooperativas: el DS 2892
establece que: “todas las personas que, sin ser socias, prestan servicios en las
cooperativas mineras bajo relación laboral en la que concurran las
características esenciales de ésta, independientemente de la modalidad de
remuneración se encuentran protegidas por la Ley General de Trabajo, estando sus
derechos laborales y todos aquellos relativos a la Seguridad Social, en su
condición de trabajadoras y trabajadores, plenamente reconocidos y
garantizados”.
A través de esta normativa, conjuntamente con la que estableció el derecho a la
sindicalización, se busca garantizar los derechos laborales de una importante
cantidad de “cooperativistas” subcontratados por los mineros que participan como
socios en la producción.
Por otra parte, el DS 2889 pretende la fiscalización del carácter de las
cooperativas, que han de ser “instituciones sociales y económicas
autogestionarias de interés social sin fines de lucro [1]”, y el control de sus
actividades (cateo, prospección, exploración, explotación, concentración,
fundición, refinación, comercialización e industrialización). Por último, les
exige información sobre la distribución de ingresos y excedentes entre los
socios, sobre el volumen y valor de la producción, balances contables, las
nóminas de socios y personal contratado entre otros. Esta información que deben
proveer las cooperativas anualmente ayudará a que el Estado tenga la certeza de
que son tales y no empresas corrientes de explotación minera.
Además se estableció la prohibición del uso, porte y tenencia de explosivos en
manifestaciones públicas -algo habitual en las protestas de los mineros en
Bolivia- y se resolvió acabar con la práctica por la cual las cooperativas
aportaban económicamente a las federaciones departamentales, regionales y a la
FENCOMIN (Federación de Cooperativas Mineras). Las empresas comercializadoras e
ingenios descontaban entre el 1% y el 5% al momento de la internación de los
minerales para su venta, montos que se destinaban a las distintas federaciones.
Estas medidas adoptadas por el Gobierno tras los trágicos episodios de las
últimas semanas apuntan a regularizar un sector productivo, el cooperativista
minero, que no sólo se ha acrecentado sustancialmente en las últimas tres
décadas llegando a ser 14 veces mayor que el estatal y que el privado, sino que
ha recibido numerosos beneficios por parte del Estado (exenciones impositivas,
concesiones de explotación sin licitación, representación política en el
Parlamento, entre otros). Esto los ha convertido en un poderoso actor social
que, si bien ha apoyado políticamente al gobierno de Morales, ha conseguido
también -hasta ahora- limitar la capacidad gubernamental de “interferir” en sus
actividades. Sin embargo, en estas décadas de “autogestión” cooperativista, su
estructura organizacional se ha desvirtuado por completo y hoy son, en su
mayoría, empresas conformadas por pocos dueños (autodenominados “socios”) y una
gran masa de asalariados -mal remunerados y desprovistos de todo derecho laboral
y sindical-, que también figuran como “socios”. Son, justamente los “patrones
cooperativistas”, que encabezan las Federaciones, quienes lideran el
enfrentamiento con el Gobierno, exigiéndole mayores beneficios y la
flexibilización de normativas ambientales, laborales, así como el derecho a
arrendar y subarrendar áreas de explotación a privados.
A pesar del desgaste político post referéndum y la pérdida de apoyo de los
cooperativistas al Gobierno, Morales no parece dispuesto a dar el brazo a torcer
y, seguramente, anunciará más medidas tendientes a regular el sector. El
Gobierno ha condicionado la reapertura del diálogo -solicitada por los mineros a
través de la creación de la Comisión Nacional de Pacificación- a la entrega de
los autores materiales e intelectuales del asesinato de Illanes, y también ha
suspendido la venta de explosivos a las cooperativas, con lo que su producción
ha disminuido. De este modo, hoy éstas se encuentran en una situación mucho más
desventajosa que hace diez días atrás: la violencia de las “patronales
cooperativistas” ha resultado en la exposición pública de sus contradicciones y
ha conseguido que el Gobierno apunte contundentemente a acabar con su accionar
al margen de la ley.

[1]     Ley N° 535 del 28 de mayo de 2014, que regula actividades metalúrgicas y
mineras. URL:
http://www.cedla.org/sites/default/files/Ley535%20Mineria%20Metalurgia.pdf

In
CELAG
http://www.celag.org/evo-frente-a-lo-que-llaman-cooperativismo/
14/9/2016