terça-feira, 13 de outubro de 2015

La Batalla de Imperios financieros por el mundo ***




Walter Formento y Wim DierckxsensOct

En la actualidad el capitalismo aún continúa siendo capitalismo pero entró a la
escena un capital global que está haciendo -al parecer - de todo el mundo o de
todos los países “neo-colonias emergentes”, todas colonizadas por el gran
capital financiero transnacional. La pregunta que nos hacemos es si van a lograr
imponer un estado global sin fronteras ni ciudadanos o más bien si entremos en
la transición hacia el poscapitalismo.

¿Un mundo en transición histórica?


Los imperios financieros en el mundo
En la actualidad el capitalismo aún continúa siendo capitalismo pero entró a la
escena un capital global que está haciendo -al parecer - de todo el mundo o de
todos los países “neo-colonias emergentes”, todas colonizadas por el gran
capital financiero transnacional. La pregunta que nos hacemos es si van a lograr
imponer un estado global sin fronteras ni ciudadanos o más bien si entremos en
la transición hacia el poscapitalismo. Estado El capital financierizado
globalizado puja desde Wall Street y la City de Londres por un Estado global sin
fronteras o barreras nacionales a la libre circulación de ese capital
financiero. Puja por un Estado sin ciudadanía, es decir, sin una participación
de los pueblos más allá de las a menudo alienantes redes sociales y la
televisión satelital. Tratase de un Estado con instituciones propias más allá de
las naciones, que puedan controlar sin necesidad del juego democrático, con sus
propios órganos, su propio sistema jurídico de propiedad material e intelectual
y, sobre todo con la posibilidad de una fuerza armada global (la OTAN). El
Estado global busca instaurar una moneda independiente de cualquier nación que
permite incluso diezmar el poderío de EEUU como nación. Lo anterior supone
sustituir al dólar y con ello pujas de poderes incluso al interior de EE.UU.

Dentro de EEUU hay otra fracción de capital financiero que brega más bien por
fortalecer a EE.UU. apuntando a ´Otro Siglo Americano´ basado en el Dólar,
viendo en ello su propia fortaleza. Esta fracción está expresada en parte por el
Tea Party del partido Republicano y hegemonizado por capitales con asiento en la
esfera de la producción para la defensa, el petróleo, la industria farmacéutica
entre otras, entrelazados con algunos megabancos (JPMorgan-Chase, Bank of
América-y-Goldman Sachs, etc.) con mayor desarrollo interno que internacional.
La proyección de poder de la gran banca multinacional es desde el país central
multinacional unilateral y delimita estados-continentes. Es la continuidad de la
Trilateral con tres áreas y tres monedas (Dólar, Marco y Yen).

La otra fracción asentada en Wall Street proyecta instaurar poder global desde
la red de city´s financieras multilaterales (Citigroup-Barclays-HSBC-Lloyd´s-ING
Baring, Santander CH, etc.). Su proyecto es crear un Estado-Global en la forma
de red financiera unipolar-multilateral de city´s financieras. Aunque ambos son
modos de poder unipolar y financiero, la multinacional se encuentra claramente
en su fase de declinación pero con fuertes intentos de ´Restauración´. La Global
se encuentra en su fase ascendente pero se ve cada vez más confrontada con la
alternativa de los BRICS. La creciente integración económica y militar de
Eurasia de este último proyecto les preocupa a ambos bandos en particular. Lo
anterior no quita la confrontación abierta entre el capital global y las fuerzas
de Restauración. La misma comenzó a partir del 11 de septiembre de 2001 con la
´caída´ de las Torres Gemelas. Es diez años después que entra realmente en
escena la alternativa de los BRICS (Vea Walter Formento, La situación para
Syriza-Grecia después de la victoria electoral).

La confrontación financiera global se desarrolla a partir de 2001 con la “caída”
(voladura) de las Torres Gemelas seguido en 2008 por otra ´caida´ de Lehman
Brothers (controlado por el Citigroup, megabanco que pertenece a los
globalistas). Esta confrontación aún hoy. La economía-política transnacional se
despliega con economías de países centrales paralizadas (creciendo a menos del
1%) al estancar la inversión productiva. Debido a la tendencial baja en la tasa
de ganancia en el centro, el capital financiero más dinámico se globaliza y
opera en economías de países dependientes (emergentes para los capitales
globales) creciendo-emergiendo a una tasa media del 7%. La economía china lo
hacía en el pasado por años incluso al 14%. La tasa de crecimiento en los países
emergentes está actualmente a la baja.

La Unión Europea (UE) constituye en este entorno un bloque regional de poder de
país-central (Estado-Continente), conformado hoy por 27 países. Alemania, en
primer lugar, junto con Francia hegemonizan este bloque continental. Luego de la
crisis financiera global de 2008, desarrollaron un proceso de centralización de
poder económico-político institucional a partir de lo que se denominó la segunda
ola de Crisis Financiera Global (CFG) de 2010-2012. La segunda ola de Crisis
Financiera Global, se inicia con el “estallido” de la crisis en Grecia país
periférico en el bloque. En 2015 la nueva crisis en Grecia solo ha acentuado más
aún esta tendencia. A partir de esta crisis Alemania logra imponer condiciones
de expropiación de todo lo que era empresas-estatales griegas. Alemania y
Francia no solo lograron centralizar poder en Grecia sino en toda la Unión
Europea como Estado UE-Buitre.

La City de Londres, otro centro de operaciones del capital financiero global a
la par de Wall Street, contraataca la Unión Europea en esa coyuntura tratando de
ampliar la crisis hacia países como España, Italia y de ser posible Francia. El
objetivo fue producir una crisis que pueda imponer el programa del globalismo
financiero que planteaba el desarrollo de la Comunidad Económica Europea (CEE)
como área de libre de capital financiero y comercial, o sea, bloquear el
programa de Alemania-Francia de la Restauración de la Unión Europea
política-económica-y-cultural. Son dos programas de centralización de autonomías
de los estados-nación en un Estado-Continente: uno vía centralización desde la
política-estado (UE) y el otro programa, vía la centralización desde lo
financiero-económico-mercado por encima del Estado Continente.
La intervención de China y Rusia con diversos instrumentos consolidó la
posición de Alemania-Francia y debilitó a Londres-Inglaterra (2009-2012).

Con la crisis griega de 2015 se manifestaron y profundizaron las grietas entre
Francia y Alemania y con ello de la UE. La situación en la Unión Europea
actualmente es tal que los ex estados-naciones que conforman la UE, ya no son
estados, en realidad son solo 27 naciones en un estado-continente UE y hasta
Francia sufre las consecuencias negativas. El presidente de Francia, Hollande,
´interviene´ en la crisis con Grecia, por intereses propios, algo más humano que
los buitres de Berlín. La negociación dura y prolongada ha dejado en evidencia
una fractura conceptual entre Francia y Alemania sobre lo que debe ser la unión
monetaria. Grecia fue el peón en el juego de ajedrez entre Francia y Alemania
(Claudio Testa, La crisis en Grecia desnudó las contradicciones en la UE-
Alemania y Francia: tensiones entre socios cada vez más desiguales,
www.socialismo-o-barbarie.org 16 de julio de 2015).

En realidad hay un nuevo bloque financiero de poder que se ha conformado
reuniendo y sintetizando a las oligarquías de todos los países miembros
sintetizados por el eje-oligárquico financiero germano-francés por encima de las
naciones. La reciente Crisis Griega, llamada Crisis de la Deuda, es la
manifestación de la Crisis de la Unión Europea, en tanto pone de manifiesto el
límite del bloque financiero Unión-Europeo. La crisis de la Unión Europea es la
crisis de las fuerzas de la restauración que cada vez más se manifiesta como un
Estado-Buitre dirigido desde Berlín. Desde un abordaje geopolítico, las fuerzas
de la restauración del Estado Nación tanto en EE.UU. como en la Unión Europea
están cediendo cada vez más posición en su defensa, y su situación los torna en
consecuencia cada vez más virulentos.

Lo que está en juego no es solamente la dirección que debe tomar la zona euro,
sino la sobrevivencia misma de la UE. Es preciso saber que Deutsche Bank está
muy comprometido no solo con los bonos soberanos de Grecia, España, Italia o
Francia sino con los bonos (chatarra) de todos los países de la eurozona. Para
protegerse tiene una cartera de derivados entrelazados con todos los mayores
bancos en Occidente a fin de cubrir riesgos de impago de la deuda y/o los
intereses. En total Deutsche Bank posee 25 billones de dólares en derivados con
bancos centrales y otros grandes bancos que al caerse provocaría un efecto en
cadena múltiples veces más grande. Lo anterior significa si Deutsche Bank
cayera, caerán otros bancos grandes y entre otros City Group, HSBC, JP Morgan,
Goldman Sachs, Barclays, Societé Génerale, etc. La crisis se tornaría sistémica.
(Vea Jim Willie, If Deutsche Bank goes under it will be Lehman times five,
www.silverdoctors.com, 7 de octubre de 2015).

Ante la Crisis de la UE, crisis que no pudo restaurar a las posiciones de Grecia
como Estado-Nación ni logra consolidarse como UE-Estado-Continente, no hay forma
de proyectarse hacia el futuro. Tratase de una estrategia unipolar multinacional
en crisis. A la UE le quedan dos opciones. Debe avanzar transformándose
políticamente ya sea en parte de la Red Financiera Global con la casi segura
subordinación a las corporaciones de EE.UU. mediante el Tratado Transatlántico
de Inversiones y Comercio (TTIP), o más bien avanzar transformándose en parte de
la Red de Polos del esquema de poder multipolar vinculándose con el proyecto de
Eurasia van-guardado primero que todo por Rusia y China y los demás países de
los BRICS, con todas las implicaciones geopolíticas que tenga.

BRICS ante los imperios financieros
En julio de 2014, el conjunto de países BRICS que forman parte del G20 (las
veinte economías más importantes, centrales -G7- y emergentes), presenta un
esquema alternativo a los dos esquemas transnacionales financieros unipolares:
el proyecto de Restauración de la Triada con centro en Washington-Alemania-Japón
y el Globalista con centro en Londres-Nueva York. Este tercer proyecto
alternativo pasa a denominarse nueva arquitectura financiera-productiva
BRICS-Multipolar. Este proyecto se conforma a partir de Bloques regionales
continentales de poder emergentes: China-OCS, Rusia-Unión Aduanera Euroasiática,
Brasil-Unasur-Celac, India-, Sudáfrica- Egipto-Siria-Irán.
Los capitales financieros multinacionales se encuentran retrasándose en su
capacidad de acumular mientras los capitales financieros globales logran
acumular a gran velocidad. Estos capitales han sido financiados desde la Reserva
Federal en un volumen de 85 billones U$S/mes, a una tasa de interés de 0% y
comprando su deuda de “bonos basura”. Esto financia de modo dominante al mundo
emergente financiero global de manera directa (e indirectamente la estrategia de
los países dependientes), pero hace crecer la burbuja de deuda financiera a un
tamaño diez veces mayor que la que estalló en 2008. Todo esto profundiza las
diferencias y la confrontación haciendo que la guerra financiera sea la moneda
común. En la guerra financiera el proyecto multinacional tiene menos
“capacidades”, pero en la guerra militar es muy fuerte aun. Solo en este
contexto se comprende cómo Francia se alineó con los halcones en EEUU en torno a
Siria y que Obama llega a negociar en nombre de los globalistas con Putin. Dos
terrenos de fortaleza diferentes que se expresan actualmente en las pujas por el
control de Medio Oriente.

Los BRICS nacen como los países “emergentes” con peso mundial, por volumen de
población, de materias primas y por ser territorio de localización de los
capitales financieros globales desde 1994, que conforman el G20 junto a los
“viejos” países centrales del G7. Los BRICS expresan en su primer momento una
relación estratégica subordinada a los intereses financieros globalistas
(2008-2011). Luego (al no ser aceptados como verdaderos socios en el Fondo
Monetario Internacional (FMI) se buscan más agresivamente su propio espacio
geopolítico. Originalmente, el FMI había propuesto anunciar un cambio de moneda
internacional en 2014 a partir de los Derechos Especiales de Giro (DEG´s) para
posponerlo luego a una fecha antes de finalizar el año 2015. El 11 de Agosto de
2015 en el FMI decidieron posponer la inclusión del yuan a la nueva canasta de
monedas y sus respectivos valores para el 30 de setiembre de 2016. La aceptación
del yuan hubiera sido el primer paso en firme para que fuese considerado como
una moneda de reserva internacional. Artos de ser engañados, a partir de julio
de 2014, los BRICS-Multipolares no financieros, plantean en Brasil su programa
de nueva arquitectura económica, financiera, política y cultural. A partir de
ello el multipolarismo de los BRICS adquiere mayor agresividad.

BRICS insurge como proyecto estratégico no financiero. Como opción estratégica
desde los países dependientes-subdesarrollados-periféricos-no alineados. Insurge
en el marco de la guerra financiera transnacional inter-imperialista y a partir
de las decisiones del FMI se pone de pie con un proyecto propio en confrontación
principal con los capitales financieros. Insurge en el momento en que el mundo
dependiente-“emergente” se vuelve centro dominante de producción y consumo de
riqueza social. China justifica su accionar en la medida en que el FMI no
permite la inclusión del yuan en la determinación del valor de los Derechos
Especiales de Giro y no habilita a dicha moneda como instrumento de cambio
internacional. Aunque el centro dominante de las capacidades militares aún se
encuentra en EEUU, en tanto país central financiero Buitre, la presencia de
Rusia y el acuerdo militar entre este país con China y otros países de Asia
otorga mayor fuerza geopolítica al proyecto BRICS-Ampliado.

Avanzar en la salida Multipolar BRICS-Ampliado se torna cada vez más factible.
La propuesta cuenta con un Banco de Desarrollo y Fomento como con un Fondo de
Compensación entre los instrumentos más importantes. El esquema avanza
proponiendo un instrumento de cambio (moneda) mundial multipolar potencialmente
basado-respaldado en oro, en sus reservas de oro que han subido vertiginosamente
aunque el país no las reconoce oficialmente. Este esquema de poder conforma a la
vez una mayoría institucional mundial activa a partir del G77+China (que reúne
un piso de 144 votos sobre una asamblea de 197 miembros en total).

China, a la par, recientemente lanzó la iniciativa de un servicio de pago
internacional, el CIPS –China International Payment Platform – una “alternativa”
al SWIFT -Society for Worldwide Interbank Financial Telecommunication- creado en
1973. Este sistema lanzó la amenaza con destino ruso de desconectarle sus
bancos. Rusia ha respondido con la creación de su propio sistema, aunque
obviamente la potencia del sistema Chino que incorporaría gran cantidad de
entidades financieras es superior. El CIPS garantizaría una mayor cobertura del
yuan en los pagos internacionales y permitiría a esa moneda avanzar hacia su
conversión como moneda de reserva.

No es diferente, lo que pasa con el nuevo sistema que rige desde marzo de 2015
para la determinación del precio del oro. Hasta el 19 de marzo de ese año, el
precio fue fijado por London Gold Fix cuyos 5 socios -que pasaron igualmente a
formar parte del nuevo sistema de fijación de precios- son: Bank of Nova Scotia,
Barclays, Deutsche Bank, HSBC y Societé Générale. Hubo presunta manipulación en
la fijación de precios del oro, plata, platino y paladio. Delitos del mismo tipo
se comentaron con la fijación de la tasa LIBOR. Ahora la fijación del precio del
oro se gestionará a través de una plataforma de negociación electrónica para la
London Bullion Market Association (LBMA).

El precio del oro se va a dejar de fijar diariamente como desde hace casi 100
años mediante acuerdos privados a través de videoconferencia entre los cuatro
miembros del London Gold Market Fixing Ltd., que en la actualidad son, Bank of
Nova Scotia-Scotia Mocatta, Barclays Bank PLC, HSBC Bank U.S.A., y Société
Générale SA. Tres bancos chinos ya son miembros de la LBMA y participarán más
directamente en la fijación del precio del oro. Esto significa que los
inversores chinos tendrán una mayor y más directa influencia sobre el precio
internacional del metal. China a través de los bancos de propiedad estatal, ya
controla el Shanghai Gold Exchange (Bolsa de Oro de Shanghai), el mayor mercado
físico en Asia. China ha venido aumentando significativamente sus reservas en
oro a la vez que es el mayor productor de oro en el mundo. El país adquiere de
esta forma mayor poder para crear un caos financiero simplemente ‘subiendo’ la
cotización del oro. Si lo hacen, será sólo una cuestión de tiempo, para que el
sistema de reserva fraccional londinense de cuentas de oro sin respaldo físico
colapse, dejando a Shanghai como único mercado físico importante en el mundo
(Vea, Marion Mueller, Se reforma el sistema para fijar el precio de oro en
Londres; .www.loff.it.abc.es; 16.03.2015)

China ha venido aumentando significativamente sus reservas en oro a la vez que
es el mayor productor de oro en el mundo. Es preciso sabe que Rusia como China
son hoy los más activos compradores de oro a nivel mundial. En general en la
medida en que le es posible, los países de Eurasia están posicionando cada vez
más sus reservas en dicho metal. La pregunta es qué pasaría con el USD si China
decidiese hacer el yuan convertible al oro. Una nueva moneda mundial con
respaldo en el oro, implicaría un profundo cambio observado desde cuando EEUU
impuso el Dólar sin otro respaldo que su poder militar desde 1971/73. Estos
posibles escenarios de cambio en lo económico conllevan cambios también en lo
político, militar y estratégico.

Todo esto hace vislumbrar la inevitable Crisis del Dólar, como instrumento de
cambio y reserva mundial. Un instrumento cuyo respaldo más importante hoy radica
en la alta capacidad bélica del complejo financiero industrial-militar
norteamericano. La Crisis de la UE implicaría, en el fondo, la posibilidad
abierta de la Crisis del Dólar, y la Crisis del Dólar implicaría la crisis del
conjunto de jugadores de Unipolarismos Financieros Multinacionales (Fuerzas de
Restauración (Buitres-Tea Party) y pondría en plena ventaja al el esquema
unipolar Globalista si no fuera que BRICS-ampliado estuviese en el camino. Lo
anterior pone a Rusia y China como los enemigos más directos no solo de los
globalistas, sino también de las Fuerzas de Restauración en EE.UU..

La geopolítica actual

Los líderes de la Organización de Cooperación de Shangái (OCS)-Rusia , China,
Kazajstán, Kirguistán, Rusia, Tayikistán y Uzbekistán además de admitir
formalmente a India y Pakistán ven también con buenos ojos la incorporación de
la UE dentro de su proyecto. Se está formando una nueva arquitectura de Eurasia
y las naciones de la UE, sobre todo Alemania, Francia e Italia, podrían
beneficiarse enormemente de cooperar con este nuevo sistema. De producirse esta
integración EE.UU. quedaría aislado en el mundo y el proyecto globalista estaría
contra la pared. Es obvio que con ello los tambores de guerra están sonando con
fuerza en Washington (Jim Dean, Cumbre BRICS-OCS marca fin de hegemonía
occidental; www.hispantv.com, 26 de julio de 2015).

Según Albert Stahel, experto suizo militar y director del Instituto de
Investigaciones Estratégicas en Wadenswil, a la revista alemana ‘Focus’,
Vladímir Putin puede convertirse más temprano que tarde en el nuevo protector de
Alemania en vez de EE.UU. “Una vez Alemania sienta una amenaza para sus
intereses nacionales, cambiará el rumbo”, afirma el experto”.(Vea Russia Today
15 de junio de 2015). Sin embargo, Alemania o incluso toda Europa podrán
recurrir a Rusia y dejar de confiar en EE.UU en medio de la crisis en Siria. La
actual coyuntura en Siria parece brindarle una oportunidad. En medio de unas
crisis mundiales que van desde Siria a Ucrania, los intereses geoestratégicos de
Berlín parecen ir divergiendo lentamente de los de Washington. Los industriales
alemanes, en particular, parecen ansiosos por continuar con unos tratos
comerciales con Rusia y China que no tienen límite. Estos podrían colocar al
país en camino hacia un poderío mundial sin los límites de las fronteras de la
UE y, a largo plazo, indicar el final de la era en la que Alemania, por mucha
sutileza que se quisiera, era esencialmente un satélite estadounidense (Vea,
Pepe Escobar, Pueden China y Rusia echar a Washington a empujones de Eurasia,
www.rebelión.org, 9 de octubre de 2015).

Según Stahel, EE.UU. no es su potente para “proteger” a Europa. Además, para “el
control eficaz” de Rusia en Europa Washington carece de “recursos financieros y
apoyo suficiente del pueblo estadounidense”. El escenario descrito por el
experto puede pasar más tarde o más temprano en función del desarrollo de los
acontecimientos en Ucrania. A juicio de Stahel, Alemania desempeña un papel
clave en la oposición entre EE.UU. y Rusia. Si Alemania apoya a Rusia, habrá una
posibilidad de “expulsar a EE.UU. de la Europa continental paso a paso”. En los
países europeos siguen atentamente las decisiones tomadas en Berlín y, quizás,
muchos de ellos sigan las huellas de Alemania (www.actualidad.rt.com 15 de junio
de 2015).

Putin simultáneamente planea una jugada final respecto a Ucrania, que involucra
el fin de sanciones. Las naciones que realmente cuentan en la UE quieren
eliminarlas. Y lo harán si Putin hace lo que ellos no pueden hacer, destruir el
“Califato” que está enviando oleadas de refugiados hacia la Fortaleza Europa
(Russia Today, Alemania y toda Europa cambiarán EE.UU. por Rusia,
www.actualidad.rt.com, 17 de junio de 2015). Rusia quiere acabar con los
yihadistas antes de que se vuelvan contra ella mientras que Estados Unidos
espera utilizar a algunos de ellos en otros conflictos. Elementos del Emirato
Islámico han llegado a la región de Kherson, en Ucrania, donde ya se encuentra
un llamado gobierno de Crimea en el exilio» (Vea Alfredo Jalifa- Rahme,
Cooperación entre Obama y Putín contra el Yihadismo global, La Jornada, www.red
Voltaire 4 de octubre de 2015).

Es posible que las dos últimas semanas de septiembre con los sucesos en Siria
nos hayan alejado incluso de una tercera guerra mundial nuclear. A juicio de
Thierry Meyssan, el nuevo mandamás del Pentágono, Ashton Carter , regresa a los
juegos geopolíticos «al estilo de Kissinger» (Él considera que si se trata a
Rusia en forma seria como a una gran potencia, entonces sus preocupaciones
deberán ser reconciliadas con las de Estados Unidos, entre lo que destaca la
virtual cooperación en una Ucrania militarmente no alineada, lo cual dejaría de
lado la confrontación de Estados Unidos contra Rusia y China «al estilo de
Brzezinsnki». Kissinger tiende un lazo de reconciliación al presidente ruso,
Vladimir Putin, en contrapunto a la rusofobia de Zbigniew Brzezinski. El último
recurre a los montajes hollywoodenses de «revoluciones democráticas» con los
yihadistas y sus anárquicos «cambios de régimen» (Vea, Thierry Meyssan, Moscú y
Washington se plantean refundar las relaciones internacionales, Red Voltaire, 5
de octubre de 2015). Lo anterior no significa que continúa la guerra económica y
financiera.

Un mundo en transición histórica
Políticos de Washington, del Pentágono y de Wall Street observaron con
preocupación la doble cumbre en julio de 2015 de los BRICS y la Organización de
Cooperación de Shanghai en la ciudad rusa de Ufa. Después de Ufa extendieron la
guerra del mercado financiero y económica a China. China, a cambio, está
poniendo en el mercado sus bonos del Tesoro estadounidense, haciendo acopio de
reservas de oro y abriendo bancos de distribución regional para su propia moneda
nacional. Esto les proporcionará un acceso más fácil a los mercados de capitales
y los protegerá de la manipulación financiera puesta en práctica por parte de
Washington y Wall Street (Vea, Mahdi Darius Nazemroya, El Yuan eclipsa al dólar;
www.rebelión.org 23 de setiembre de 2015).

Es más, algunos bancos y gobiernos de la Unión Europea habían estado
considerando y analizando el utilizar la divisa nacional de China, el
renminbi/yuan, como divisa de reserva debido al atractivo de la estabilidad del
renminbi como divisa. Eso había preocupado a Washington y Wall Street, y fue uno
de los factores que provocaron la expansión de la guerra de divisas y financiera
contra Rusia y China. Wall Street intentó de hundir o colapsar el mercado de
valores chino y aumentar el valor de la moneda china. Beijing a cambio anunciaba
que había comprado 600 toneladas de oro en el lapso de un mes y que el Banco del
Pueblo de China se había librado de más de 17 mil millones de dólares de sus
reservas de divisas. Al mismo tiempo Beijing anunció una devaluación de su
moneda que dejó perplejo a Wall Street (IBID). Las posibilidades que la Reserva
federal aumentase la tasa de interés quedaron en el aire.

La Reserva Federal dudaba sobre si aumentar o no la tasa de interés de los
fondos federales. Desde diciembre de 2008 la tasa de interés de los fondos
federales se mantiene entre 0 y 0.25%. Ello no ha logrado estimular inversiones
productivas significativas para, en esa misma proporción, impulsar la creación
de empleo. Lo mismo sucede en el caso de los programas de flexibilización
cuantitativa. Los mayores beneficiarios resultaron ser los grandes bancos de
inversiones: Citigroup, Goldman Sachs, J.P. Morgan Chase, Bank of America,
Morgan Stanley.

La mayor preocupación de las autoridades monetarias de Estados Unidos es el
surgimiento de la caída de precios. Si la tasa de interés de los fondos
federales permanece intacta, será entonces evidente que Estados Unidos es mucho
más vulnerable ya que la burbuja financiera ya está mostrando los primeros
signos de estar explotando. La nervosidad en torna a la bolsa de valores está
con ello en ascenso. En cualquier momento podrán explotar sin que la Reserva
Federal haya aumentado las tasas de interés y la depresión económica al estilo
de 1929 será un hecho, solo x veces peor. La deuda mundial incluyendo los
derivados se calcula en 500 billones de dólares, o sea, más de 6 veces el
Producto Mundial. Más temprano que tarde terminará por estallar (Vea, Ariel
Noyola Rodríguez, La deflación es la peor pesadilla para Estados Unidos, en
www.redvoltaire.org.es, 20 de setiembre de 2015).

Cuando la bolsa de valores colapsará en el mundo, la depresión económica y la
deflación serán la consecuencia. Los gobiernos serán presionados de saquear las
cuentas bancarias mediante políticas de ´bail-in´s con los probables
´corralitos´ al estilo argentino en muchas partes. Al mismo tiempo muchos fondos
de pensiones serán arrebatados. Los medios de comunicación dominantes se
encargarán que los ciudadanos se vean forzados a condescender con estas
políticas ´para su propio bien´. Ante este escenario no falta observar que unos
mercados de valores procuren salvarse a costa de otros. (Vea, Clive Maund, Fiat
endgame- More QE, NIRP, Bails-ins and Pension Plunder; www.gold-eagle.com, 4 de
octubre de 2015).

Está muy claro que no hay perspectiva ninguna de un repunte en la economía
occidental. Ya hemos abordado en otros textos nuestros (Wim Dierckxsens, Después
de Grecia ¿Estado global o rebelión mundial?, http://www.deicr.org, artículos
para descargar) que debido a la baja en la tasa de ganancia la inversión ha
abandonada de manera definitiva el ámbito productivo. En tanto que se sigue
acortando la vida media útil de la tecnología aumentará el costo de reemplazo
tecnológico más de lo que es posible bajar el costo de la fuerza laboral. La
migración de capital transnacional y los flujos financieros que ello implique
hacia países emergentes (y en primer lugar hacia China) apenas han dado un
espacio temporal para rebajar el costo de la mano de obra y un consecuente
realce en la tasa de beneficio.

Así como Japón lucía en la posguerra como la quinta maravilla del mundo, así
lució China en la era de la globalización. La economía japonesa fue un motor
súper dinámico durante las cuatro décadas que siguieron a la segunda Guerra
Mundial. Pero hacia finales de la década de los ochenta la locomotora perdió
velocidad. En ese momento se había reducido la vida media útil del capital fijo
mucho más allá de lo que se había observado en EE.UU. y Europa al mismo tiempo
que el costo de la mano de obra iba en alza rápida. Japón entró desde entonces
en una recesión de la cual no ha podido salir. La notoria baja de la tasa de
crecimiento en China que se observa en los últimos años se debe a la sustitución
veloz de la tecnología y a inversiones sin encadenamiento (la construcción de
ciudades fantasma sin población y otros proyectos estériles como trenes de alta
velocidad subutilizados). Si al mismo tiempo observamos el rápido aumento en el
costo de la fuerza de trabajo por las exigencias en materia de educación y
salud, revela que no solo China sino la economía mundial entera tiembla de miedo
al ver reflejada su imagen en el espejo japonés (Vea, Alejandro Nadal, El virus
japonés infecta la economía global, La Jornada México, 15 de setiembre de 2015).

Pensamos que estamos entrando en un período donde los bancos centrales han
perdido el control sobre la economía y se sienten impotentes. Esto se aplica
también para la Reserva Federal. El actual panorama de otra gran crisis de la
deuda en el mundo y la quiebra de bancos y bancarrotas de estados demandaría
fondos más allá de la capacidad que cualquier banco central podrá proveer. La
lógica pareciera ser la de un mundo, un banco y una sola moneda para todo el
planeta. Es aquí donde la élite financiera en el poder presentará al FMI como
banco único por encima de todas las naciones con una sola moneda (los Derechos
Especiales de Giro del FMI) que no tenga vínculo alguno con una nación con
intereses propios en particular. La elite propondrá en esta coyuntura la
creación de un Estado Global. Lo que esto en última instancia significa un
gobierno mundial, con un banco central mundial y moneda mundial. Lo que también
significará y lo que es mucho más preocupante, que todo esto se materialicen
como resultado de un descenso de la democracia en el mundo, y por lo tanto, un
aumento en el autoritarismo. Será un estado global sin fronteras ni compromiso
alguno con los ciudadanos. Lo que estamos presenciando es la creación de
gobierno mundial totalitario.

De hecho, el concepto mismo de una moneda mundial y el banco central global es
autoritario en su propia naturaleza, ya que elimina cualquier vestigio de
supervisión y rendición de cuentas de distancia de los pueblos del mundo, y
hacia un pequeño grupo, cada vez más interconectado de las élites
internacionales (Vea, Andrew Marshall, A global Central Bank, a global
Currencyand a global Government; www.drawingmagazine.com, agosto de 2009). El
gobierno global se estructuraría a partir de los tres Tratados que no se
discuten, sino que se imponen; que no pasan por los poderes del Estado, sino que
se “arreglan”. Los gobiernos “amigos” de los EEUU, (entre los que se cuentan los
obsecuentes de México, Perú, Chile y Colombia) están obligados a mantener en
secreto los ´arreglos´ aún después de la reciente firma de Asociación
Transpacífica (TPP, por sus siglas en inglés) por los gobiernos. Aunque falte la
ratificación parlamentaria de los países, de concretarse no solo se divide a la
Unasur y se frena el avance del núcleo Mercosur-Alba, sino el totalitarismo
supranacional se instalaría en América latina. El otro tratado entre EE.UU. y la
UE se denomina: Asociación Trasatlántica de Comercio e Inversión (TTIP, por sus
siglas en inglés). Estos dos tratados y el Tratado de Comercio de los Servicios
(TISA, por sus siglas en inglés) tiene alcances que no son locales, ni
nacionales, ni regionales sino mundiales. Juntos buscan establecer un nuevo
orden hegemónico global con más de la mitad de la economía mundial bajo su
control total.

Los tratados de la Triple T se inscriben en la perspectiva de crear un gobierno
global, impone la financierización de sus economías, afecta la producción, el
crecimiento económico, el ahorro, flexibiliza el trabajo hasta extinguirlo y
precariza el ingreso de las grandes mayorías, incrementando la desigualdad
social y la pobreza. Nada parece detener a la élite en el afán por imponer su
hegemonía a escala global. Se trata de frenar la posibilidad de un nuevo orden
mundial multipolar impulsado por los BRICS. Esto implica cercar a Rusia y evitar
con la ocupación de Ucrania que la UE se integre al proyecto de Eurasia. Lo
anterior requiere también aislar a China y evitar a toda costa que se unifiquen
Rusia y China, objetivo no solo lejos de haberlo alcanzado sino con un resultado
plenamente opuesto. También requiere acabar con BRICS y con la Cooperación de
Shanghái. El uso de la fuerza militar no es ajeno a este proyecto y los tambores
de guerra suenan cada vez más duro. (Vea, Ruben Ramos; TPP,TTIP, TISA, arreglos
en secreto para acabar con los pobres, www.alainet.org, 17 de agosto de 2015).

Para impulsar este proyecto global, la élite financiera ya no tiene mucho tiempo
de perder. Si no hacen estrellar las economías del mundo pronto, para formar en
ese caos un gobierno global con su banco central y moneda global, arriesgarán
que los BRICS adquieren el espacio necesario para tomar control hegemónico de la
economía-mundo. Está claro que en cualquier momento podamos esperar un caos
monetario en el mundo. Lo anterior lo esperaba China y más se preparan los BRICS
para tener medidas alternativas ante la generación de ese caos monetario. Si la
élite no se apresure, incluso hasta la Unión Europea podrá decidir virar su
mirada hacia el Este en vez de comprometerse con el Oeste. Con la sola
integración de la UE a Eurasia BRICS obtendrán sin duda alguna la hegemonía
sobre la conducción economía mundo (Vea, Bruno Sgarzini, Estados Unidos está
atravesado con la puja entre el viejo y un nuevo imperialismo; entrevista con
Gabriel Merino, http://misionverdad.com/, 16 de setiembre de 2014).
.
Sea quien que saldrá hegemónico de esta confrontación de bloques de poder,
ninguna de los dos estará en las condiciones de reconectar la inversión con el
ámbito productivo debido a la continua baja de la tasa de ganancia. Hemos
llegado a los límites de acortar la vida media de la tecnología y con ello a la
acumulación de capital en el ámbito productivo. Hemos llegado a los límites de
la acumulación de capital ficticio en una economía financierizada. Parece que no
hay de otra que dar vida a la tecnología y los productos en general. Lo anterior
no es posible dentro de la lógica del capital. Estaríamos ante un mundo de
des-acumulación, pero un mundo orientado a la vida de lo que se produce que en
última instancia podrá dar vida a las mayorías sin quitar vida a la naturaleza.
Estamos en plena crisis civilizatoria y en un mundo en transición histórica,
donde comienzan a surgir y desarrollar formaciones sociales en transición hacia
sistemas pos-capitalistas.

IN

LA PÁGINA DE WIM DIERCKXSENS
http://mariwim.info/?p=36
Octubre 2015



*** Complemento para se entender o Brasil de hoje.

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